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16. paper rings 2

Valentina abrió lentamente los ojos, acostumbrándose a la tenue luz que venía de la ventana. Se estiró un poco y se volvió hacia un lado para poner los brazos sobre el cuerpo de su novia, pero lo único que sintió fue el vacío del colchón a su izquierda.

Se incorporó un poco y se apoyó en los codos, mirando alrededor de la habitación, todavía con sueño. "¿Juls?" Preguntó en voz baja y ronca, pero no escuchó nada. Luego decidió ir al baño y salir de la habitación para averiguar dónde estaba Juliana.

Salió del baño y tomó su teléfono celular para comprobar la hora, aún no era mediodía, y abrió la puerta para buscar a Juliana, cuando escuchó un sonido bajo proveniente de la sala de estar y cuando llegó allí, vio a la más joven en el balcón con nada más que una blusa, una taza de café a su lado y un cuaderno en la mano, sin duda dibujando la vista del parque que desde que se mudaron, Valentina escuchó que se quejaba casi todos los días por el hecho de que todavía no había tenido la oportunidad de dibujar a causa del trabajo y la universidad.

Valentina extendió la mano detrás de ella y la abrazó, envolviendo sus brazos alrededor del cuello de Juliana y dándole un suave beso en el cuello, lo que hizo que Juliana sonriera.

"Finalmente despertaste, ¿hm?" Preguntó Juliana colocando el cuaderno sobre la mesa y alisando los brazos de Valentina. "¿Dormiste bien?"

"Uhm, aunque siento que todavía estoy durmiendo" fue lo único que Valentina pudo responder, haciendo que Juliana sonriera de nuevo y dijera: "Ven aquí", tomándola de los brazos y acercándola para que se sentara en su regazo. Y eso fue lo que hizo Valentina, de forma automática porque todavía estaba, de hecho, dormida.

Tuvieron suerte de que la silla en la que estaba sentada Juliana fuera lo suficientemente grande como para manejar la forma en que Valentina se sentó sobre ella, ya que estaba literalmente acostada encima de Juliana como una niña pequeña con un brazo detrás del cuello de la menor mientras la otra la abrazaba por la cintura y acurrucó su cabeza entre el cuello y el hombro de Juliana.

"¿Te das cuenta de que eres enorme, verdad? ¿Y de que podríamos caernos de la silla?" Juliana preguntó besando a Valentina en la mejilla y abrazándola fuertemente.

"Sí, pero eres tan cómoda y cálida". Valentina respondió acurrucándose más en Juliana.

"Está bien", se rió Juliana. "¿Quieres tomar un café aquí o almorzar en tu casa?"

"Estoy en mi casa, Juls". Valentina respondió.

"Sí, lo siento", se rió Juliana, "me refería a la mansión. ¿Quieres que almorcemos con Guille? ¿O quieres comer algo aquí?"

"Lo que sea, ya sé que no podré comer nada". Juliana se liberó de Valentina para mirarla a los ojos. "Estoy demasiado nerviosa por ver a Eva hoy, me preguntará sobre mi trabajo y no podré mentirle, así que sabrá lo horrible que es y me dirá que estuvo en lo cierto todo el tiempo y que debería haber pedido un trabajo en nuestra empresa. No, no pedir, exigir ". Valentina respiró hondo y salió de Juliana. "Eso es lo único con lo que no quería lidiar hoy".

"Val, solo tienes que decirle a tu hermana que no predijiste que sucedería y recordar cuánto amabas trabajar allí al principio". Juliana se levantó y fue tras ella.

Valentina resopló ante lo que dijo Juliana. "Sabes que estamos hablando de Eva, ¿verdad? ¿Mi hermana?" Fue a la cocina a tomar un vaso de agua. "Ella dirá que no lo predije, pero que ella si lo hizo y que eso era lo que importaba, que nunca escucho lo que me dice, que no siempre quiere estar en lo cierto, pero al final siempre lo está". Valentina se volvió hacia Juliana, que estaba apoyada contra la puerta de la cocina. "No quiero discutir con ella sobre esto. Primero quiero resolver lo que voy a hacer con mi vida profesional. Quiero saber si me voy y si me voy a donde voy. No quiero depender de mi apellido, Juls".