8. P E L I G R O.

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JaeMin se acercó a RenJun, tomando entre sus manos el delgado rostro de Huang. El Omega miró con un poco de miedo a el alfa.

A veces JaeMin daba miedo, por lo que no era para nada simple tener la cordura así como la tenía RenJun. Pronto las manos de JaeMin acercaron el rostro ajeno a el suyo, exprimiendo sus labios en un beso fogoso.

Ambos labios chocaban una y otra vez mientras que los ojos de los dos chicos estaban cerrados. JaeMin tomó ambas piernas de Huang y lo levantó, tomándolo entre sus brazos. El pelirosa caminaba con el Omega entre sus brazos hasta la habitación de TaeYong porque era la más cercana.

Cuando estuvieron en la habitación, cerraron la puerta con seguro. Sus labios seguían juntos, mientras sus manos se tocaban entre ellos.

—J-JaeMinie, ¿No crees de que es muy pronto?.— preguntó RenJun.

—No te dejaré hacerme esperar más.— JaeMin estaba sobre Huang, con su cara justo en la repartición del cuello y el hombro del chino.— Estuviste una noche afuera esperando por esto. Y yo estuve seis años esperando por esto también, creo que es lo justo.

La boca de JaeMin torturó la garganta del Omega. Movía su lengua sobre la suave piel, luego mordía levemente la zona y succionaba. Las manos del alfa tenían con fuerza atrapado el trasero suave y redondo de Huang, mientras la respiración del Omega era más agitada.

La lengua del alfa siguió bajando, hasta toparse con la polera, con rapidez quitó la prenda, mirando lo blanco que era el pequeño chino. Bajó su cabeza hasta la piel del joven, empezando a morder y besar. Cómo si de un dulce se tratara, JaeMin mordía, succionaba y lamía los pezones del Omega.

Las manos de ambos chicos estaban entrelazadas a los lados, mientras que ambos sentían placer. Los ojos de RenJun estaban cerrados mientras su boca dejaba escapar gemidos y jadeos incontrolables. Los besos bajaban y bajaban, pero no tanto como para llegar a el miembro de RenJun.

Las prendas de ropa desaparecieron de ambos, estaban completamente desnudos.
Con la mirada fija en los ojos de Huang, JaeMin acercó su boca a la entrada de RenJun, respirando. RenJun estaba tan excitado que empezó a rogarle, mientras el alfa solo reía y tiraba un poco de aire caliente a el lugar.

—JaeMinie, vamos.— susurraba y gemía RenJun.

—¿Por qué?, ¿Por qué debería seguir?.— JaeMin tocó levemente la entrada del Omega con su lengua, viendo como el joven se estremecía.

—JaeMinie, se lo ruego, por favor.— RenJun empujaba un poco sus caderas, a lo que JaeMin sonreía.— JaeMinie no me haga esto...

JaeMin se dió cuenta de que RenJun estaba en celo, porque empezó a dilatarse por sí solo. Sonrió, quizás podrían formar una manada tan grande como la de Yuta y SiCheng. Hundió su boca en la entrada de RenJun y empezó a lamer y succionar.

Su lengua se metía de repente y sus dientes dejaban mordidas en los muslos del chino. Con sus dos manos, JaeMin tomó ambas piernas y las levantó más, dejando más espacio y lamiendo mejor la entrada. RenJun empuñó sus manos y empezó a gemir más alto mientras que sentía como sus feromonas de omega empezaban a salir.

JaeMin miró el rostro de RenJun y se sentó en la cama, dejando su hombría pegada a la entrada de RenJun. Aún no se metía en él, por lo que Huang se movió a lascivo sobre su pene.

—A-Ah, mgmm.—Huang se dió la vuelta y pegó su trasero a el miembro de JaeMin. El alfa sonrió y miró lo redondo y blanco que era.

Na tomó con sus manos las caderas de RenJun y se enterró con fuerza, dejando a el Omega gemir y gemir con fuerza y rapidez. Pronto estuvo dentro y se empezó a mover frenéticamente contra él.

Mientras las penetraciones empezaban, JaeMin, muy escondido, tomó el cinturón, dando el primer azote en el blanco trasero del chico. RenJun cerró los ojos y sintió el ardor en esa zona, para después simplemente quedar aturdido y un poco dolido.

—Ay, ¿P-Por qué me golpeas?.— Huang sentía como cada vez más rápido avanzaba el alfa.— Me gusta.

JaeMin sonrió y golpeó otra vez a RenJun, ganándose gemidos incontrolables. Una de las manos de RenJun entraba enterrada en el colchón, mientras la otra estaba en su trasero, sobando algunos azotes que habían sido más dolorosos.

Las penetraciones empezaron a ir más rápido, hasta que el alfa se corrió dentro de Huang, respirando agitado. RenJun manchó la cama con su liquidación, mientras que sentía como JaeMin se recostaba detrás de él y lo abrazaba.

Ambos se recostaron y se taparon con las sábanas de TaeYong.

—Te amo, RenJun.

—Te amo, JaeMin.

—¿Te gustaría ser novio de un alfa tonto y enojón como yo?.

—Te faltó sexy, pero si. Si quiero ser tu novio.— un lindo beso unió al omega castaño con el alfa pelirosa.

Justo cuando empezaban a dormir, un pelirojo entra en la habitación y grita, despertado a ambos chicos.

—¡Justo en mi cama!.— gritó el chico, empezando a lloriquear.— ¡JaeHyunie!.

El alfa llegó corriendo por el llamado de su omega. TaeYong, muy enojado, salió hechando humos. JaeHyun sonrió y cerró la puerta, viendo a ambos jóvenes dormir abrazados y en paz.

Por fin se amaron y por fin RenJun tubo su primera vez.

El alfa completó por fin su corazón y el Omega pudo sentirse amado.

Fin uwu.

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⏰ Última actualización: Dec 08, 2019 ⏰

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Danger | JaeJun omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora