Ice Моем Heart [Viktuuri]

Capítulo 5: La Inteligencia de Viktor

[Yuuri narra]

¡No puede ser!

¡No puede haberme descubierto tan pronto!

Chille mentalmente al regresar a la habitación, viendo a Viktor en esta y con el móvil a centímetros suyos de la silla del escritorio donde está sentando.

– Yuuri –me dice. Trago duro.

No sabía que responder hasta que mi teléfono sonó en una llamada. Tanto Viktor y yo, vimos de quien era la llamada.

¡YURI PLISETSKY!

Debo despistarlo con algo... ¡Pronto!

– Ah –dije ¡MIERDA! No se me ocurre nada.

Viktor coge mi teléfono y me dice: Te está llamando Yu···

Se lo arrebato de golpe y este me ve con impresión.

– AH, ETTO sí! –dije en alto y sumamente nervioso, pero en vez de contestar colgué y me lo lleve a la oreja –Si, Hola... Yurio?

Solté, pero no hubo respuesta. Yo tenía los ojos cerrados ya luego de un rato me du cuenta de mi error.

–Oh.

–Le colgaste –dice Viktor al ponerse de pie.

–Ah, sí que torpe, ¿no? –me reí de mí mismo y Viktor se acercó a mí. Hasta estar a solo milímetros.

–Vi-vik-tor..

Dije, pero este solo sonrió de pronto al decir.

–Vamos a bañarnos, Yuuri.

–Si –dije de inmediato. Y sin rechistar. Creo que no de subestimar a Viktor.

.

Tras un par de horas, lo estuve meditando... no dije nada, y espera que Viktor no viera nada en mi móvil.

Fui bastante cuidadoso y discreto en mis charlas con el respecto al tema de amor. Y los consejos que podía sacar de estos... pero...

Últimamente me he visto complicado, en retomar mi celular.

Pues cada que lo hacía, sentía que Viktor me miraba de reojo. Esconderme en el baño, pareció mi única opción hasta que recibí otra llamada más.

De Yurio, esta vez, si conteste.

Y estaba furioso, me contaba su Cita o casi Cita según él.

Recalcándome el punto, de que Otabek parecía más afín con su persona. Pero que no lo veía de forma romántica, ya que le dijo: Niño.

Sinceramente, era verdad. Yuri era un año menor.

Eso de alguna forma, lo complicaba y también estaba el: NO SE QUÉ DECIRLE, ¡SI TU NO ESTAS!

A lo que respondí, que fuera natural pero él me insistió que le dé una solución.

Suspire. Y sale de baño, sintiendo aun peor.

En mi depresión, fue al Ice Castell a patinar un poco y despegar mi mente.

La situación, llego a tanto... y todo, porque no me permití decir la verdad.

Ahora, como le explicaría la situación a Viktor... y ¿Qué haría?

Suspire.

"Porque no remontas en lo que atrajo de esa persona para empezar"

Las palabras de Pichit, revotaron en mi cabeza.

PERO ¡NO SE TRATA DE MI!