Capitulo 12 "Usando bien las coincidencias"

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Nota de la Autora: yo se que pareciera como si las cosas van muy rápido pero como dicen "vamos a lo que vamos" y no quería alargar las cosas, pero aun hay mucho que leer, no se preocupen (la que debe preocuparse soy yo jaja bromas), espero que les guste el capitulo :·)

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Justamente la noche donde Rosie había amenazado a Alastor aquella dama sintió cierto asco al darle unos tragos a su bebida favorita, desde días atrás había sentido ciertos síntomas un poco peculiares: algunos mareos, algunas nauseas, entre otros.

-"¿Será qué...?" -se alarmó Rosie al recordar que una de sus aventurillas tal vez trajo consigo un premio

Así que salió del hotel en búsqueda de una prueba de embarazo, solamente el cuarto de baño de su habitación fue testigo que la prueba había dado positiva. Rosie se encontraba angustiada ya que eso arruinaría sus planes de volver con Alastor pero podría sacarle provecho a eso. Citó a Alastor en la noche al bar con la excusa de que retiraría su amenaza

-¿Ahora qué quieres? -dijo Alastor con los brazos cruzados

-¿Acaso no puedo invitarte una copa de champaña? -dijo inocentemente -Y...quería decirte que ganaste esta vez

-¿Ganar qué? -dijo sin entender Alastor

-No haré nada en contra del hotel de tu amada rubia -dijo mientras bebía de la copa -ahora veo perfectamente que no sientes nada por mí y como dicen por ahí: las cosas no funcionan bien a la fuerza.

-No te creo nada -dijo observándola

-¿Ah, no? -seguía bebiendo de la copa mientras la conversación avanzaba, la champaña aligeraba la tensión entre ambos y parecía como si dos amigos platicaban mientras que Alastor sin saber por qué sentía cierta adicción a esa bebida en especifico, la champaña estaba más deliciosa que de costumbre, minuto a minuto su visión se hacía más espesa, si tenía sospechas de su bebida ya que conocía perfectamente a Rosie pero sus sospechas se habían ido ya que el color de la champaña estaba normal pero se equivocó.

-Maldita perr... -apenas podía pronunciar Alastor

-Droga liquida, mi amor -sonreía Rosie -Provoca adicción, por eso te encantó la champaña

Alastor no había probado una droga desde hace mucho tiempo, tal vez por eso su reacción había sido demasiado fuerte. Al siguiente día despertó en su habitación pero sin ropa, sin nadie a su lado...como si no hubiera ocurrido nada, no recordaba mucho lo ocurrido.

A Charlie le parecía extraño que Alastor no llegara a su oficina a darle los buenos días pero tampoco quería asfixiarlo estando mucho tiempo juntos, al caminar por el lobby encontró a Rosie quién estaba a punto de salir del hotel, tal vez le había llamado su atención por los celos que sintió la noche en que ocurrió la riña con Alastor.

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-¿Entonces, cariño? -Se escuchaba la voz seductora de aquella dama con planes perversos - Sería un buen negocio

-Es una propuesta interesante -decía el empresario quién estaba convencido de aquella propuesta en qué consistía en convencer a Lucifer de que le vendiera el terreno del hotel con la excusa que no estaba siendo bien usado el terreno y podía generar más dinero con otra clase de negocio, sin más tardanza el empresario decidió visitar al gran Lucifer planteándole la propuesta frente a muchos empresarios.

-¿Se imagina las ganancias que obtendríamos? -Replicaba el empresario - ¿Acaso ya vio las estadísticas del hotel? Es una burla, lo digo con respeto a la princesa

A Lucifer le parecía extraño que alguien entrara a su oficina proponiéndole algo que iba en contra de su hija, fingió interés en el asunto y al terminar la reunión decidió llamar a su hija.

-Charlie ¿Cómo va el hotel? -pregunto para sondear las cosas

-Pues de maravilla, recientemente se han hospedados más -dijo con ánimos la chica sin sospechar que algo raro pasaba

-Según me han llegado las noticias como que el hotel no está muy bien -dijo Lucifer muy serio y contándole lo ocurrido en la reunión

Charlie estaba devastada de escuchar las intenciones de personas que quizá ni conocían el hotel. La chica caminaba en su oficina pensando alguna manera para atraer más huéspedes.

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Alastor seguía pensando en qué pudo haber ocurrido en la noche pero no iba a darle tantas vueltas al asunto, así que mejor se concentraba en hacer feliz a su damisela.

-Bella damita -saludo Alastor al entrar a la oficina de Charlie a quien vio revisando muchos papeles

-Alastor, lo lamento...estoy muy ocupada -dijo Charlie sin despegar su vista en el papeleo

Aquel demonio al ver de mal humor a su amada decidió salir del hotel para comprarle golosinas, pasteles, rosas y otras cosas que harían feliz a su amada. La chica rubia pasó toda la noche buscando una manera de atraer más huéspedes, de tantos papeles no se había dado cuenta que Alastor se había quedado dormido en una silla.

-"Cariño, te he tratado tan mal" -pensaba mientras se acercaba a él recordando que él había llegado otra vez a la oficina para darle detalles y algunos besos -"gracias por todo" -se inclino para darle un beso en la mejilla.

A la mañana siguiente que Alastor despertó vio una nota pegada en su saco "Buenos días, querido. He salido a buscar café. Te quiero", eso le había provocado tanta alegría pero recordó que debía ir a darse una ducha y cambiarse las prendas. La alegría duró poco cuando se encontró con Rosie en el pasillo a quién trato de ignorar

-Gané...-murmuró ella cuando pasó a su lado

-¿Ahora de que mierdas hablas? -dijo Alastor muy enfurecido

-¿No te han contado? - Dijo ella con una sonrisa -Pronto voy a ser dueña de este terreno junto con un "amigo" -enfatizó, en ese momento Alastor recordó todos los papeles que tenía Charlie y su mal humor

-¡MALDITA PERRA! -el enojo ya no se podía contener en Alastor

-Trátame lindo si no quieres que tu chica sepa de nuestro bebé -dijo Rosie mientras acariciaba su vientre

-¿Cuál bebé? -dijo Alastor confundido

-Este -sacó la prueba de embarazo de su bolsillo

-¡No inventes, ni siquiera he soportado un minuto de tu presencia en este hotel mucho menos compartir una noche contigo!

-¿A quién le van a creer? -Seguía la dama con una sonrisa -¿A ti, Alastor rey de la maldad o a mi? Además, tengo fotos de lo que ocurrió la noche en que te bebiste toda la champaña así que pórtate bien

-¡MALDITO EL DIA EN QUE TE CONOCI, BRUJA DE MIERDA! -dijo enfurecido pero soltando un golpe a la pared

-A mi nadie me rechaza -murmuro Rosie al oído de Alastor

Había tanta tensión en el hotel que todos tenían una preocupación en la mente, una angustia que se había apoderado de todos en solo 4 días .

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En eso consistió la semana en Hazbin Hotel, en vivir angustias de todo tipo pero había una esperanza...aunque no suene muy alentador, la única esperanza era un actor porno. Alastor tenia esperanzas en que Angel lograra algo:


-"Estoy jodido..."


Otra nota de la Autora: Gracias por los comentarios, créanme que me han hecho muy feliz :3 Saludos y abrazos

(Charlie x Alastor) Una nueva e involuntaria oportunidad al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora