No Quiero hacerlo

04

Salgo con el credo en la boca. Hay muchos hombres lo que me pone mas nerviosa. Busco con la mirada a Declan y lo encuentro apoyado cerca de la barra, muy lejos de mí. La canción que voy a bailar empieza a sonar, salgo de mi pequeño trance y empiezo a moverme.

Unas lágrimas rodaron por mis mejillas. Yo No quiero hacer esto.

Busqué a Declan otra vez, pero ya no estaba ahí. Se había ido. No es que quería que me viera bailar como puta sino que tenía miedo  a que uno de estos hombre se subiera a la tarima.

Seguí moviéndome sexualmente al ritmo de la canción, cerré mis ojos e hice todo el baile con ellos así. Los hombres gritaban un sin números de cosas feas. Como "muevete  perra",  "así...vamos muevete", "Te quiero en la cama". Me arrojaban mucho dinero y algunos querían hasta ponerme la mano, por suerte había un seguridad debajo que lo impidió.

Unos 15 minutos pasaron yo bailando en el pedazo de metal siendo la atención de muchos hombres. De vez en cuando abría mis ojos buscando al dueño de este negocio y nada. No estaba.

Me aplaudieron al terminar, querían que siguiera bailando. Eran muchos hombres, osea hasta los hombres que estaban debajo de las demás tarima viendo a las demás chicas  fueron hacía donde mí. A verme.

Y no se si es bueno o malo.

Cuando llegué al camerino respire unos minutos observándome en el espejo. No puedo creer lo que pasó ahí fuera. Ser el centro de atención de muchos hombres no es algo de lo que me siento orgullosa.

-Alice!! Lo hiciste genial - Laura me abraza contenta.

- Gracias supongo- iba a quitarme la máscara pero ella me detuvo.

- El jefe te quiere ver, así como estás- no pude evitar ponerme nerviosa.

Me hizo seguirla, por unos pasillos con muchas puertas y con luces rojas... Y a juzgar por las personas que han cruzado por mi lado, son las habitaciones donde se acuestan los clientes con las empleadas.

Nos paramos frente a una puerta, me miró un poco nerviosa y me hizo señas de que entrará.

- Que h....? - no  dejó que formulara mi pregunta.

-Sólo has todo lo que te diga. Sí?- asiento, y si antes estuve asustada ahora lo estoy más.

Entré y efectivamente el estaba ahí, de espalda a donde mí, al sentirme se volteó dejándome ver  un cigarrillo en sus dedos derechos  y una copa de alcohol en su palma izquierda.

Me sonrió de manera macabra, caminó hacía mí lentamente hasta llegar a unos cm de distancia.

- Estuviste fantástica- rozó los nudillos de su mano por mi mejilla. Se acercó más uniendo nuestros labios. No sabía que hacer, no podía impedir que me besara pero no quería besarle. Por lo que me quedé estática.

Cuando se separó de mí puede ver la habitación. Es enorme, con unas luces  entre rojas y blanca, una cama enorme y lo que más me asustó fue ver una pequeña tarima con el tubo de pole dance.

- Quiero que me bailes, no sabes lo mucho que me contuve para no bajarte de ahí y hacerte mía. - su expresión es nueva para mí, está entre enojado pero excitado.

Esto no me huele bien.

Se sentó en un pequeño sofá que daba a la parte del tubo esperando mi acción, caminé hacía la tarima y él puso la música que estaba bailando antes.

Asustada Y nerviosa empecé a bailar. Agache mi cabeza mientras lo hacía.

-Mírame, quiero que lo hagas mirándome- ese porte de hombre malo me asustaba mucho, "Dios mío en que estoy metida" es mi pensar.

Me observaba fijamente y apretaba la mandíbula, como si estubiera conteniéndose a algo.

Unos minutos después paró la música. Se puso de pie y me ayudó a bajar. Quitó la máscara y peluca que tenía puesto.

-Así me gustas más-  Empezó a besarme desesperado, me llevó a la cama y me tumbó en esta.

Él se quedó de pie quitando su ropa observándome como presa a punto de cazar.

Se tumbó encima de mí y beso cada parte de mi cuerpo, rozaba sus dedos por mi cara y cuello cada vez que podía. Era incómodo para mí.

-Dec...- iba a decirle que parase.

-Ssssss. No quiero que hables a menos que vallas a decir mi nombre en gemidos de placer- quería llorar juro que quería llorar.

De un tirón quitó mi sostén, lo volvió trizas en sus manos. Este acto me desespero más de lo que estaba y empecé a quejarme y gritar que pare.

Eso fue un error.

Me golpeó fuerte, tanto que casi me desmaya. Aprovechó y quitó la ropa interior que poseía y lágrimas se hicieron presente, no creí que pasaría por esto.

- Te dije que sería suave contigo. Pero eso depende de ti- lo miré. - Si te calmas y te dejas llevar será más fácil y menos doloroso para ti. - voltee mi cabeza dándole a entender que estaría quieta.

-Quiero que me mires- volteo mi cara de manera brusca a su dirección, nuestros rostros estaban muy cerca, nuestras respiraciones agitadas se mezclaban. Su mano derecha descendía por todo mi cuerpo hasta llegar a mi zona íntima, quise detenerlo pero fue imposible con su mano libre sostuvo las mías.

Movía sus dedos por mi parte mientras me besaba. No sentía más que asco, no quiero hacer esto. Un quejido salió de mis labios cuando introdujo un dedo en mí. Dolía. Me preparé mentalmente para sentir su erección dentro de mí. Respire profundo un par de veces pero eso no me ayudó en lo absoluto.

-Besos y abrazos de colores- 😵

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