frase #94

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Mis noches frías y mis días oscuros.

Y en las noches frías, eres tú y tu sonrisa, las que traen calma a mí, y mi alma, eres tú quien ilumina mis mañanas. Y aún más, eres tú, quién se posa en cada pensamiento feliz, que decidía escribir, aquí. En las noches frías soy el amante favorito de tu corazón, soy tu gran admirador y tú más grande amor. En las noches frías eres mi estrella, la más brillante del firmamento, la  causante de mi insomnio de media noche. Y en las noches frías recorro tu hermosura espacial y es así que sé de lo cósmico. Y en lo días mas oscuros, era tu mirada la que me daba luz y tu bailar de armonía, y en las partes en que mi mundo se derrumbaba, llegabas tu y me armababas si dudarlo, y aún así, en los días oscuros, recuerdo tu dulce risa, dulce risa que es o era música para mis oídos. Y aún asi suelo recordar la forma en que nuestros cuerpo bailaban, y la parte en que convertías los días mas oscuros en calidas brisas de verano. En mis días mas oscuros, sueles ser ese pequeño rayito de sol, que me cubre el cuerpo y me enamora una vez más sin pensarlo. Y en los días más oscuros puedo perderme muy fácil en esa mirada tan encantadora. Y en mis días más oscuros estoy dispuesto a entregarte mi corazón y toda mi alma,  no importa si me destruyes en el intento,  por ti dolería lo necesario porque vales la pena. Y en mis días más oscuros me gustas de una manera increíble, me gusta como te vistes,  y como andas, me gusta tu pelo, tu cuerpo, me gustas porque tienes ese encanto que las demás no. Y en mis días más oscuros es increíble las cosas que me haces sentir  cuando estoy contigo, me haces sentir único, cuando te veo sonreír puedo jurar que el tiempo se detiene e iluminas mi enorme oscuridad. Y en mis días más oscuros logras inspirarme de una manera tan inusual que no pensé escribir todo esto.

Pensamientos RotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora