Monochrome | KookMin || Book 3#

III - Rídiculo

Namjoon no hallaba manera de que Jungkook reaccionara. Está en una nebulosa tan, pero tan lejana que la comida se le caía de la boca por empezar a fantasear con el dragón albino. Sobra decir que sus feromonas también andan en descontrol. Llega a ser muy tierno de su parte, pero hay que hallar la manera de sacarlo de ese sopor o nunca van a poder llevar a casa.

Se pierde a donde sea que van buscando a Jimin.

Que dicho sea de paso es un desconsiderado al dejarles a este dragón medio tonto.

—Es tú cría, a mi no me mires. —Yoongi permanece echado en la gruesa rama de un árbol.

—No es mi cría y aun así tenemos que ayudarlo a que-

—No sé absolutamente nada Nightfurys, tampoco de los que son blancos, ni siquiera creí que eso fuese posible. —bufa malhumorado por la insistencia de Namjoon en que debían ayudar a Jungkook a acercarse a Jimin... O bien, que supiera que hacer para que no saliera huyendo.

—Últimamente pasa de todo, nada me costaría creer que hay otro Stormcutter de mi tamaño—dio un prolongado suspiro estirando las alas en su espalda, para Namjoon luce como un gato y Yoongi no hizo más que darle la razón en ese punto—. Lo poco que sé, es que se trata de una especie Monógama. Si ya se enamoró de él, no lo hará por ningún otro y posiblemente la depresión lo mate.

— ¿El otro siente lo mismo? Estaremos en un problema si no es así, como tener a un moribundo Death Song y agregando a un despechado Nightfury.

—A mi no me comparen con una niñería sentimental... Ya eso lo superé... creo...—balbucea Hoseok, Taehyung siguió acariciándole la cabeza para que descansara en lugar de meterse en conversaciones ajenas.

Aunque si no lo hace él, lo haría Taehyung. Mayor diferencia no hay.

—Pues... enséñale algo entonces.

Namjoon sudó frío, claro, como si fuese tan sencillo.

...

Toquecitos en el hocico lo hicieron despertar del pesado sueño que tiene. Muy a duras penas pudo distinguir la cola blanca que desaparecía tras los árboles y arbustos. A pesar de que se mareó por el rápido movimiento, tomó marcha tras el dragón alguno que sin duda quiere que lo siga.

No le costó mucho, el aroma que desprende delata con creces el camino que sigue. Por andar despistado resbaló en una caída no muy alta que daba a un lago de aspecto tenebroso, Jimin lo esperaba ahí sentado, luciendo muy elegante por la manera en que está erguido. Bajó ligeramente la cabeza, logrando que sus ojos se viesen más redondos.

— ¡Hola! Eh... creí que-

— ¿No puedes volar? ¿De verdad no puedes?

Jungkook guardó silencio y las aletas de su cabeza bajaron. Su mirada se clavó en es suelo, sintiéndose juzgado. Negó con la cabeza, avergonzado y bastante nervioso de lo que Jimin pudiera decirle ahora. Sintió su respiración muy cerca de él, que incluso le resopló en la cara.

— ¿Y si lo intentas?

—No puedo.

No supo definir el suspiro de Jimin y por ello su mente se encargó de darle una mala connotación ¿Está decepcionado? Posiblemente. Eso lo entristecía enormemente, pues evidentemente nadie busca o toma a un posible compañero a un enfermo. No es viable, no es inteligente. El tema de Hoseok y Taehyung es distinto, pues se conocían desde antes. En cambio aquí...

¿No le gustaría a Jimin por estar varado? La nariz le pica un poco.

Se sorprendió al sentir como Jimin pasa su cabeza por debajo de su hocico, bajando ligeramente hasta pasar todo su cuerpo contra el pecho oscuro. Se sentó a su lado, aun chocando su cabeza contra la de Jungkook, quién lo imita con suavidad. Jimin gorgotea y casi suena como un gato al que están mimando.

—Y a pesar de eso sigues vivo... Eres muy fuerte. —afirma con una nota impresionada. Jungkook suspiró.

—He tenido mucha ayuda...

— ¿Qué importa? Un dragón que no vuela es dragón muerto. Sea por lo fácil de atrapar, sea por lo triste que es permanecer fuera del cielo.

— ¿No te molesta...?

— ¿Por qué lo haría?

Jungkook se aclaró la garganta incómodamente. Ambos cambiaron de forma y Jungkook hizo una postura tan extraña que Jimin solo lo ve con la confusión perfectamente instalada. Sacudió la cabeza por el chillido repentino, luego el movimiento de alas y lo que sea que Jungkook estuviera haciendo, se inclinaba un poco atrás a medida que aquello mutaba en rareza.

—No es por nada, pero no debimos dejar al más torpe enseñar algo como esto...—opina Hoseok. Los cuatro escondidos y quietos para evitar una desgracia. Cerraron los ojos cuando una cantidad burra de arena le dio a Jimin, quién se cubrió con las alas.

—Ninguno quiso hacerlo. —replica el Alpha avergonzado.

—Y lo peor del caso es que aun así se ve mejor que tu demostración...—murmura Taehyung.

—Creo que ya no lo aguantó...

Jimin había empujado a Jungkook de la cara apenas se le acercó haciendo esa clase de cosas raras que bien es el acto más ridículo que haya visto. Si no fuese porque lo hace tan cerca y lo vencía le pánico de la confusión, se habría reído.

No por burla o de mala manera, sencillamente hace gracia.

Guardó una distancia prudencial con Jungkook que había caído a la arena y ahora se sacude el exceso. No sabe si es que Jimin espera algo más, pero claro queda que lo dejó disgustado -o asustado-, por todo lo que acaba de hacer.

Entiende que lo principal para intentar llamar la atención sería hacer algo impresionante, pero no se le ocurre nada que no implique volar. Cosa que no puede hacer.

— ¿Qué haces? —pregunta guindándose de cabeza en una rama alta. Jungkook había tomado una bastante grande y hacia algo extraño en la arena—. ¿Hey? Kookiiie que estás haciendo.

— ¿Qué hace? —pregunta Yoongi a Namjoon que se encoge de hombros igual de confuso. Sin embargo, no se mueven para tratar de ver.

— ¡LISTO!

Jimin bajó de su sitio y observó lo que había en la arena. Bueno, se parece mucho a lo que se refleja en el agua cuando se asoma. Ladeó la cabeza y dio algún que otro saltó para evitar las líneas, como si estuviera bailando. Al llegar hasta Jungkook le sonrió.

—Eres muy extraño.

—Y tú muy misterioso ¿Por qué...?

—Primero tengo que probar algo... Luego te cuento ¿vale? Espérame un poco más.

Cambió de forma de es amanera tan natural suya y se fue volando. Jungkook lo persiguió por puro instinto, logrando caer al agua de forma torpe por el intento de vuelo. Le rugió, pero Jimin ni siquiera lo miró, solo se desapareció como de costumbre. El resto fue hasta él.

—el lado bueno—dice Taehyung ayudándolo a salir del agua—. Es que ya prometió volver.

—Y no te rechazó por no-

Hoseok empezó a toser antes de terminar su comentario.

—Lo asusté.

—Bastante, incluso a mi me asustaste, pero hasta cierto punto... Lo hiciste reír y también funciona.

Jungkook no supo si interpretar realmente como algo bueno lo que Yoongi le acaba de decir.

Sea como sea, al menos tiene la certeza de que Jimin vendrá, en lugar de tener la incertidumbre de si está o no ahí.