MARIANA. Ombres de la dépression...

PARTE 2-4

Así pasan los días, Mariana ocupada en su trabajo y a su vez ocupada con su nuevo amor, como es obvio, su amigo incondicional Ricardo es enterado de la situación; Mariana solo le menciona a Ricardo que tiene un novio, pero no le enseña foto de él y le da a conocer su nombre; pero tras la insistencia de Ricardo, ella le da el nombre y le muestra una foto. Ricardo al verlo siente algo raro, pero no se percata de eso y solo le menciona a Mariana en tono de burla que "está muy lindo y que lo quiere para él".

Cierto día, Arturo le menciona a Mariana que ha comprado un carro, es la primera y única que se entera de esto y quiere ir a dar un paseo con ella; ella acepta, terminan unas cosas pendientes del trabajo y salen. De pronto, ya en el camino, el carro se apaga; están en medio de una carretera, en donde la casa más cercana está a dos kilómetros de distancia; Mariana olvido el celular en la oficina y a Ricardo solo le queda poca batería, solo para hacer la llamada a la grúa.

De pronto observan un carro acercándose y le hacen señas para que pare; el carro para delante de ellos y salen tres hombres con pasamontañas y con pistolas en mano; Arturo y Mariana salen a correr, pero uno de ellos le dispara a Arturo en la pierna, evitando que corra. Estos tres hombres le dan un golpe a Mariana que la deja inconsciente.

Al despertar, Mariana se encuentra encadenada en sus pies y sus manos, su ropa esta rasgada; a su lado se encuentra Arturo, el cual aún esta inconsciente; es un sitio oscuro, abandonado, lleno de goteras, muy frio; Mariana llama a Arturo para que despierte, pero este no despierta, parece que está muerto y comienza a llorar y gritar muy fuerte. En eso llegan esos tres hombres y comienzan a insultar a Mariana, a golpearla; uno de ellos vierte un balde de agua fría a Arturo, y este despierta enseguida.

De un momento a otro separan a Mariana de Arturo; solo se escucha los gritos de Arturo al ser golpeado; Mariana solo pide que" no lo golpeen, que lo dejen en paz", pero estas tres personas siguen golpeándolo; de pronto todo queda en silencio.