Confusión

17 - ¿Hora de la verdad?

Ambos se adentraron en la casa. Empezaron a subir las escaleras observando todo atentamente. Poco después, Brooke decidió entrar en la primera habitación. Esta parecía ser la de sus padres. Sobre la mesita, había una foto vieja en un marco estropeado. Brooke se acercó a él y decidió sacar la foto.

— Son...

— Sí, eran tus padres.— Dijo Evan acercándose a ella. Brooke solo pudo expresar una sonrisa nostálgica.

Sobre la cama, había una bolsa de lona. Estaba vacía, Brooke abrió la bolsa, la sacudió y metió la foto. Empezó a mirar los cajones y cada artefacto que veía, lo metía dentro de la bolsa. Siguieron inspeccionando la habitación de sus padres y guardando cada objeto que veía en buen estado o cada foto. Después, Brooke salió de la habitación de sus padres y se dirigió a la de enfrente. Era su antigua habitación. Había un montón de papeles tirados. Evan se agacho y recogió algunos. Entre ellos había algunas cartas.

— Guárdalo aquí dentro, por favor.— Brooke le extendió la bolsa de lona y se dirigió al escritorio que había junto a la ventana.— Recuerdo...Recuerdo cosas.

Algunas lágrimas volvieron a brotar por los ojos de la chica. Miró el escritorio y vio una caja. La sacó de ahí y vio un montón de álbumes y libros.

— Necesito llevarlo conmigo...Quizás entienda algo...

— En mi casa hay una habitación...Sería perfecta para tí y puedes llevar todo lo que quieras.— Le dijo Evan.— Yo te ayudaré a llevar las cosas.

Después entró en la habitación de su hermano, Evan no se atrevió a entrar. Brooke notó una carta sobre la cama. Al lado, una carta para ella rodeada de flores de cerezo. A Brooke le impactó eso, significaba que alguien estuvo ahí hace poco tiempo y sabía que ella iría. Brooke la guardó y salió de la habitación. Y pensar que llevaba alejada de su familia diez años y hasta ahora no lo supo, aún ni siquiera sabía toda la verdad. Supo cómo empezó pero no termino de leer lo que Evan había escrito. ¿Allí estaría escrito que les pasó a sus padres?¿Y cómo llegaron a la otra dimensión? ¿Qué había hecho ella? ¿Quién le dejó la carta? Demasiadas preguntas le vinieron a la cabeza, provocando un fuerte dolor de cabeza a Brooke. Decidió seguir guardando las cosas, algunos peluches, algunos objetos de utilidad.

— ¿Podré volver aquí?— Preguntó Brooke mirando a Evan aún algo triste.

— Claro que sí, cuando tú quieras.—  Dijo sonriendo Evan para consolarla y poner una mano en el hombro de la chica.

Evan usó su poder de teletransportación para llevar a Brooke con sus cosas lo más rápido que pudiese hasta su casa. Directamente aparecieron en la habitación que Evan le había dicho. Había una cama hecha, un armario con ropa que extrañamente a Brooke le servía.

— Toda tuya, sabes. Puedes usar tu móvil desde aquí para contactar con tus amigas. Seguro están preocupadas.

— Muchas gracias.— Susurro Brooke muy agradecida por lo que hacía su amigo.

Evan hizo un gesto sonriendo un poco. Poco después acomodó sus cosas a un lado y sacó su móvil del bolsillo. Lo encendió y pudo ver un montón de mensajes de Stella, Kate y Lyra. En aquel momento Stella intentó llamar de nuevo a Brooke.

— ¿Hola?— Diría Stella desde el otro lado del móvil.

— ¡Hola!— Dijo Brooke. Stella suspiró y llamó a Kate y a Lyra. Al parecer las tres estaban en la misma habitación.

— ¿Es ella?— Preguntó Lyra.

— ¿La desaparecida?— Prosiguió Kate.

— Sisi, ¡es Brooke!— Respondió Stella.