"Estaba decepcionado, no hacía falta que lo dijera con palabras, podía notarlo"
En un abrir y cerrar de ojos, los días se volvieron semanas. Fue mucho más rápido de lo que haya podido imaginar, pero gracias a ello pude conocer un poco más el tipo de relación que tenían Oliver y mi madre... por lo que pude entender, se conocen desde antes de que mi padre asumiera su lugar como rey de Román.
Una de mis cosas favoritas era escucharlos hablar cómodamente mientras intentaban revivir aquel viejo jardín, no sabría cómo explicarles lo que me produce verlos juntos... es como si les rodeara una luz brillante que es capaz de incomodar a las personas que estaban lo suficientemente cerca de ellos para notarlo, pero solo por el simple hecho de ser increíblemente radiantes. Por otro lado, no siempre era capaz de entenderles, pues hablaban en idiomas que no comprendía del todo y ni siquiera con las mínimas expresiones era capaz de adivinar su tema de conversación, aunque había decidido no esforzarme a ello, al fin de cuentas, solo soy un bebé.
En fin, era admirable lo rápido que ambos pudieron renovar el viejo castillo, solo tardaron un par de días en transformar el lúgubre ambiente del primer piso, en uno mucho más familiar, incluso me atrevía a decir que era más hogareño de lo que había tenido en mente. Se dedicaron a comprar nuevos muebles y contrataron trabajadores para que volvieran a pintar las paredes, es verdad que el castillo era enorme como para terminarlo en un par de días, pero al menos, las salas principales estaban listas.
Por otro lado, no pude participar mucho del "gran cambio", mayormente estaba en la habitación de mi madre y no dejaba que nadie se acercara, incluso ella y Oliver cambiaron parte de su aspecto, ella cambió sus lujosos vestidos por algunos más sencillos, en cambio, él hizo casi lo contrario. Fue así como, en menos de un mes, el viejo castillo y jardín olvidado, se transformaron en nuestro nuevo hogar, claro está, nunca se hubiera logrado si las personas que vivían cerca no les hubieran prestado su ayuda.
Incluso un pequeño grupo de jardineros se comprometió con revivir el jardín, hicieron su mayor esfuerzo para que las nuevas flores pudieran crecer, lamentablemente, todo lo que habían intentado mi madre y Oliver anteriormente, fue rechazado por ellos. Estaba muy emocionada por ver florecer a los capullos de rosas, no, quizás me emocionaban más los capullos de orquídeas, pues eran las favoritas de mi madre, no, no, no... sin lugar a duda, mi entusiasmo se debía al pequeño columpio que construyeron en el jardín, estaba ansiosa por crecer en este lugar.
Quiero recalcar cómo el viejo castillo se fue transformando en un hogar con el traspaso de los días, era algo que nunca dejaría de sorprenderme, pero... había algo mucho más interesante que contar. Durante un corto periodo de tiempo mi madre permitió que una sirvienta jugara conmigo y me cuidara mientras ella estaba ocupada con la remodelación.
Su cabello era rubio como el oro, sus ojos eran bicolores, recuerdo haber leído de ello en algún lugar, pero no recuerdo donde exactamente. Ella era muy dulce y no parecía más joven que mi madre, aunque no era capaz de darle más de veinte años; lamentablemente, no estuvo más de un mes y medio en el castillo, pero podía afirmar que ella disfrutaba de mi compañía e incluso me dio un nuevo apodo: mon petit rayon de soleil [Mi pequeño rayo de sol], no tengo la menor idea de lo que significa, pero el tono de voz que utilizaba al decirlo me hacía sentir especial.
Fue de esa forma que nuevas personas comenzaron a llegar a nuestro hogar y de ellos, los mejores eran los cocineros, incluso había una chica que era igual de amable que la que solía cuidarme, pero con la diferencia de que no me daba apodos adorables, sino que me preparaba toda clase de chocolates... no parecía importarle que solo fuese capaz de babearlos, de hecho, era divertido ver cómo se esforzaba por decorar a la perfección cada postre, pues, solo soy una bebé, no voy a juzgarla por nada.
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Segunda Vida Para Amelie [EDITANDO]
FantasySegunda vida para Amelie, fue creada para un trabajo del colegio, pero con el pasar del tiempo se convirtió en algo mucho más grande, mucho más importante para mí. Sus personajes poseen parte de mi alma, parte de mi vida y parte de mis emociones re...