Permanecí en aquella habitación en total silencio, mis lagrimas aun salían de mis ojos como si fueran cascadas, quería salir de aquel lugar, necesitaba regresar con mi familia con vida, tenia miedo, temía por mi vida y por la de mi familia... no obstante, también temía porque esas personas hicieran algo conmigo.
Intente buscar una forma de escapar de este lugar, una ventana, alguna otra puerta o algo por el estilo... pero esta habitación es completamente cerrada.
Desde hace un rato he estado pensando en mi madre y mi hermano, tal vez ellos ya se dieron cuenta de que no he vuelto a casa, me pregunto si ya habrán dado aviso a las autoridades o si acaso piensan que me he ido por algún caso de rebeldía... pero ellos saben que yo no soy así, no soy del tipo de persona que se enfrenta a nadie, no soy del tipo de persona valiente o impulsiva si no que todo lo contrario, las personas que me conocen saben como soy... una parte que aveces odio de mi misma.
La puerta se volvió a abrir, pude distinguir un bulto, todo esta borroso para mi, no puedo ver bien sin mis lentes por lo que no puedo distinguir nada ni a nadie, es incomodo, demasiado incomodo para alguien que esta acostumbrado a distinguir a las personas o los objetos que están delante cuando se camina.
La persona que entro a la habitación se quedo por un par de segundos en cerca de la entrada, no se si pensando que hacer conmigo, esta claro que aun no podía hablar, pues aun tenia la mordaza puesta, lo único que si podía hacer era gemir tanto por el dolor que sentía en mis manos como por el miedo que abundaba mi cuerpo, estaba segura que con cualquier movimiento en falso me podrían matar.
Aquella persona resoplo, o eso es lo que yo creo haber escuchado, para luego acercarse a mi, yo comencé a gritar desesperada, no quería que nada me pasara.
-Calma tus malditos gritos, niña, no voy a hacerte daño- dijo la voz de una mujer- solo te voy a llevar a otra habitación.
Ella se acerco aun mas hasta llegar a mi, se hinco delante de mi y procedió a desatar mis pies para luego desatar mis manos. Una vez mis con mis manos libres yo misma quite la mordaza de mi boca y me levante de la silla di un paso para intentar correr... pero recordé que no tenia mis lentes por lo que no me queda de otra mas que permanecer tranquila en mi lugar... ademas, ella dijo que me llevaría a otra habitación, no se si sea para matarme o torturarme.
La mujer tomo mi brazo y me comenzó a guiar por hacia alguna parte de la habitación o fuera de esta. Todo lo que veía eran bultos borrosos casi imperceptibles para mi, la chica me llevaba de manera rápida hacia quien sabe donde, mi pie choco contra un objeto e hizo que algo cayera.
-Cuidado por donde caminas- dijo de manera agresiva.
-Lo haría, si viera por donde voy- dije en un susurro el cual no se si ella escucho y si lo hizo no dijo nada por el simple echo de no querer hablar.
Subimos por unas escaleras en las que constantemente yo tropezaba hasta que llegamos a una habitación en la cual ella me empujo hacia adentro sin ningún cuidado haciendo que yo cayera al suelo justo en el momento en el que cerro la puerta. Me levante inmediatamente y camine hacia donde creí estaba la puerta e intente abrirla, pero tenia seguro, intente buscar algún botón, el seguro, alguna llave... pero no encontré ninguna, la puerta estaba cerrada y yo dentro de aquella habitación, aquellas personas no me dejarían ir, eso estaba mas que claro y yo tenia miedo, mucho miedo.
Rosalie
Mi preocupación creció mucho desde que Daniel me llamo, mi instinto me decía que tenia que ir a Italia, pero no podía dejar a mi familia así porque si, había prometido no involucrarme en nada de eso mientras mi pequeña continuara tan pequeña, hice dicha promesa justo cuando había ido a Italia a buscar a mi abuelo para regresarlo a Francia... y no puedo involucrar a mi hermana porque hizo la misma promesa justo el día de su boda y Alex esta tomándose un descanso por su Luna de miel... no se que hacer.
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La nerd del mafioso
Teen FictionVerla caminar por las calles de Bolonia vestida de una manera que la hacia ver tierna, con su pelo recogido en una dona, su flequillo volando en diferentes direcciones gracias a la brisa fresca del otoño, sus mejillas sonrojadas por el poco frio que...