𝘼𝙛𝙩𝙚𝙧 𝙃𝙤𝙪𝙨𝙚 𝘾𝙍𝙊𝘼𝙕𝙕𝙐

26

Narra Tomás.

- ¿Querés dormir en casa?. - propuse sin pensar cuando estaba agotado descansando entre los pechos de Juli.

- Puede ser. - sonrió y acarició mi pelo.

llevé mis manos a su cuerpo acariciandolo yo también y viendo como su piel se erizaba ante el tacto de mis dedos.

- ¿Vamos?. - preguntó.

- Mmh si. - hablé tranquilo. - Antes de entrar me tengo que fijar de que nada quede en el auto porque H me mata.

nos cambiamos tranquilos y ella al ponerse el corpiño me miró.

- ¿Sabes abrochar?. - preguntó poniendo su espalda con el corpiño desabrochado ante mi vista.

- No te lo pongas. - se lo saqué y lo escondí para que no lo agarrara.

- ¡Tomás!. - rió.

- No vas a necesitarlo conmigo. - le alcancé su remera y se la puso, haciéndome notar sus pezones. -  Creo que me va a distraer mas a mi que a vos. - suspiré y terminé de cambiarme.

nos pasamos para adelante del auto y yo comencé a conducir hacia la casa de H mientras la morocha miraba todo el camino.

bajamos, no sin antes fijarnos que todo esté en condiciones al llegar a la casa dentro del auto y entramos a la casa mientras el sol se asomaba en el cielo, regalándonos un color violeta y rosa en el.

subimos las escaleras sin hacer mucho ruido y al llegar a mi cuarto le busqué una remera mía para que duerma cómoda.

- Gracias. - sonrió y se cambió frente a mi mientras yo me sacaba el pantalón y solo me dejaba la remera.

- Estoy re cansada. - habló arrastrándose hacia la cama y abrazándose a mi cuerpo cuando nos metimos en ella.

- Yo igual. - cerré los ojos acariciando la piel de Juli mientras escuchaba su respiración tranquila.

se pegó mas a mi cuerpo como si no quisiera que me vaya y pueda pegarse a mi lo mas posible, lo cual me llenó de ternura y acaricié su pelo.

terminamos durmiendonos con el sol entrando por la ventana y su respiración tranquila en mi pecho mientras mis dedos se perdían en su pelo y la otra mano abrazaba su cintura.

Narra Julieta.

abrí los ojos encontrándome con la carita de Tomás con su pelo verde cayendo por su frente, todo desordenado y sus labios algo hinchados mientras respiraba tranquilamente.

acaricié su pelo suave mientras me acomodaba cerca de su cuerpo y sentía el calor que lograba darme.

con una mano mientras parecía seguir durmiendo levantó mi remera y apretó mi culo.

- ¿Estás despierto?. - pregunté divertida.

- Mmh. - se quejó y me apretó de nuevo aunque esta vez acercando más mi cuerpo a el.

agarró mi cadera y me subió encima de su cuerpo, yo ubique mi cabeza en su pecho mientras cerraba mis ojos a causa de la paz que me entregaba el momento y casi volvía a dormirme entre sus brazos.

- Sos hermosa. - abrí los ojos sorprendida y miré su carita frente a mi.

- Me asustaste. - reí y cuando iba a contestarle me cortó.

- Bajemos a desayunar, yo después te llevo a tu casa. - habló tranquilo y se levantó de la cama.