Mark
Mi padre me concedió el día libre, era lo mejor, no quería volver a ver a ese chico... no después de sentir esta extraña sensación que se instaló en mi pecho. Decidí quedarme realizando nuevos bocetos para una nueva colección... quizás la extraña sensación se esfumaría, así mi mente se distraeria.
La tienda ha cerrado, no he podido realizar ni un solo boceto, cuando inicio uno, veo su rostro y la sensación extraña solo incrementa y termino desechando boceto tras boceto.
La cena estuvo silenciosa, papá nos miraba a mi hermana y a mí con curiosidad, Luna sonreía sin razón aparente, mientras que yo estaba muriendo en vida, por esta sensación en mi pecho y si entramos en detalles el hormigueo en mi mano aún no desaparece, la había delavado varias veces...
¿Qué mierdas me sucede? Terminé mi cena, colaboré con el aseo de la cocina y platos... me despedí de mi padre y Luna, entre a mi habitación a dormir... quizás con un buen descanso todo desaparezca.
*
Son las 3 de la madrugada y no he conciliado el sueño, así que baje al taller... tampoco es que haya podido hacer mucho... el cosquilleo en mi mano no ha desaparecido, la imagen de sus ojos sigue en mi mente, su sonrisa. ¡Mierda! ¿¡Que rayos me sucede!? ... ¿por qué no puede sacarlo de mi mente?
Fue entonces que recordé a mi madre, coloque mi mano en el corazón y le hable a ella, necesitaba un consejo... parecía un loco relatando mis problemas al viento, dije todo aquello que me sofocaba... así fui cayendo en un sueño profundo... en medio de este pude ver a mi madre sentada en una banca rodeada de flores, girasoles, malvas, ella sonreía...
En un abrir y cerrar de ojos me encontraba junto a ella, me tomo entre sus brazos colocándome en su regazo, mi cuerpo no era de un adulto, era un niño nuevamente, recosté mi cabeza contra su pecho, escuche los latidos de su corazón, era como una hermosa melodía que me relajaba... me acurruque contra su cuerpo, podía sentir la calidez de su amor.
Luego de un tiempo, ella hablo sin mover sus labios, habla directo a mi mente... - sé que es difícil de entender, pero no necesitas entender, solo sentir y descubrirás el porqué de todo... vamos mi pequeño... escucha tu corazón ...-
Me dijo sonriendo... esa sonrisa lograba calmar el huracán de emociones en mi interior... El sueño se apodero de mi ser nuevamente ... -él me gusta- fue lo último que escuche... un cosquilleo inundó mis labios, se sentía tan cálido, tan perfecto...
Abrí ligeramente mis ojos, era él besándome, lo más extraño de todo fue que no sintiera miedo, simplemente me deje llevar... sentí la necesidad de atraer su cuerpo contra el mío, mis brazos se aferraron a su cintura, me levante de manera de quedar derecho, él estaba inclinado sobre mi besándome, pidiendo el permiso para entrar a mi boca.
El beso se volvió intenso, necesitado, perfecto, es como decir que nuestros labios nacieron para besarse mutuamente... el aire pronto hizo falta, un vacío se hizo presente que iba más allá de lo físico, él era la persona correcta para mi vida...
No había ninguna duda...
El junto nuestras frentes, me miraba con el mismo brillo de ayer, era lo que necesitaba, un ancla en mi vida; sonreí... acaricié si rostro, ese hermoso rostro que deseaba ver toda mi vida...
Ese mágico momento duro muy poco, un chillido nos sacó del trance... Luna daba saltos de la emoción, aplaudía, detrás de ella... mi padre con los ojos bien abiertos... tratando de articular palabra... parecía un pez fuera del agua.
Me puse en pie de inmediato, colocándome delante de Pat, mire a mi padre en espera de su reacción, Luna coloco sus manos en sus caderas, se dirigió a papá. Mí, hermana usualmente es una chica tranquila, pero si la hacer enojar... sería mejor no estar cerca de ella.
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Alianzas de Amor
General FictionNo todas las historias terminan con un final feliz... Solo tienen un final... O al menos eso creemos...