D i e c i s i e t e

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Hace 13 años



Intento correr un poco más rápido, me está alcanzando, esquivo los columpios y sigo corriendo. Mis pies comienzan a pedir un descanso pero no puedo parar, veo por encima de mi hombro y veo una silueta perseguirme a toda velocidad. Claramente él es más rápido por lo que pronto siento unas manos atrapar mi cintura, el agarre me toma por sorpresa así que pierdo el equilibrio y caigo acompañada por la otra persona.

Mi espalda se recarga en el verde pasto y mi mirada se encuentra con la suya, esos enormes ojos grises, ambos comenzamos a reír como locos.

– ¡¿Niños?! Hora de comer, entren a lavarse las manos, anden – mamá habla desde la mesa mientras sostiene un gran plato con comida, ambos nos levantamos y entramos a la casa.



– Todo ha sido maravilloso Oliva – la señora Sartovsky le sonríe a mi madre mientras agita su copa que contiene un líquido rojo oscuro y después sonríe un poco

– Eres muy amable Amelie – mamá se recarga un poco más en el hombro de papá y acaricia mi cabeza, después de la cena los adultos se han puesto a charlar y nosotros solo podemos aburrirnos

– Mi esposa no miente, la velada ha sido maravillosa y no nos gustaría arruinarla pero, tenemos noticias que darles de hecho – el señor Sartovsky se acomoda en su silla y coloca sus codos sobre la mesa - ¡He conseguido un ascenso! – todos gritan de emoción excepto el niño frente a mí y yo.

– Eso es maravilloso Seth – papá toma la botella de la mesa y rellena las copas de todos – Tu carrera va en ascenso y no es para menos, eres increíble salvando vidas –

– Felicidades Seth, concuerdo con mi esposo, no mereces menos – mamá sonríe ampliamente y yo no entiendo de que están hablando, obviamente es algo bueno.

– Muchas gracias a ambos, la parte desagradable de esto es que sería en un nuevo hospital, fuera del país – ambos sonríen de nuevo pero a medias, ¿fuera? ¿Por qué están tristes?

– Oh vaya, ¿y a dónde se irían? –

Los señores Sartovsky se mantienen en silencio y unen sus manos antes de contestar la pregunta que ha hecho papá

- Alemania –

– ¿Alemania? Wow, estoy sin palabras – mamá luce realmente sorprendida, ¿dónde está eso? No estoy entendido nada

Mi mirada se pasea entre mis padres y los señores frente a mí, ellos siguen hablando pero dejo de escuchar pues no entiendo muchas de las cosas que están diciendo. Miro al niño de enfrente y, a diferencia de sus padres, no luce emocionado o feliz. Luce triste. Sus ojos se encuentran con los míos y me contagia de su tristeza.

– ¿Y qué opina el pequeño Dominic de esto? – mamá observa con cuidado a Dom y espera por su respuesta, él agacha la cabeza sin decir nada

– Dominic está algo afligido de hecho – su madre soba cariñosamente su cabeza y todos se mantienen en silencio por algunos momentos

– Camile, cariño ¿por qué no llevas a Dominic adentro y juegan a algo? Anda, princesa – papá me da un beso en la frente, seguido de un pequeño empujón para que me levante

Observo un rato a Dominic y después comienzo a caminar con él siguiéndome de cerca, cruzamos el ventanal y llegamos a la sala. Camino hacia el mueble que tiene la televisión y abro uno de los cajones de abajo, ¿Dónde están mis juegos? Recuerdo que la última vez los guardé todos en mi cuarto y me siento tonta.

Miro hacia la sala y veo a un inocente Dom esperando con paciencia. Me levanto del suelo y camino hacia él despacio.

– Ven conmigo – digo antes de entrelazar nuestras manos y jalarlo en dirección a las escaleras. Subimos agarrados hasta que llegamos a la puerta de mi cuarto y entramos juntos. Suelto su mano para comenzar a buscar mis juegos de mesa de nuevo y lo veo acomodarse en el suelo junto a mi cama. Coloco varios frente a él y espero a que elija uno.

– ¡NO! – Dom golpea la cama con sus pequeños pasos y yo río fuertemente. Es la tercera vez que pierde en las preguntas sobre princesas y se le ve muy enojado pero tierno. Nos hemos cansado de estar en el suelo y es por eso que nos encontramos encima de mi cama con todos los juegos esparcidos alrededor de nosotros.

– ¿Quieres jugar otra cosa mejor? – dejo de reír pero mi sonrisa no desaparece.

– Uhg, creo que no, ya no – Dominic apoya sus codos en sus rodillas y me mira sin decir nada.

– Mmm bueno, ¿Qué pasará con el viaje ese? – sé que le está molestando y no quiero que se guarde las cosas, no conmigo – Está bien si no quieres platicarme – aclaro antes de que responda

– Odio ese viaje – Dom mueve su boca y su cara refleja toda su tristeza de nuevo – Alemania está muy lejos y no quiero irme. Aquí están todas mis cosas. No quiero dejar a mis amigos, mi casa, no quiero dejarte aquí – esconde su cara entre sus manos y dice otras cosas pero no lo entiendo, siento que mi corazón se acelera y pienso que voy a morir pero no lo hago, eso fue extraño

– No estés triste – gateo por la cama hasta quedar a su lado y forzó sus brazos para que me deje abrazarlo sin que me estorben – Tendrás tus cosas de nuevo y... yo puedo visitarte cada semana para que no me olvides nunca - lo miro con emoción intentado borrar su tristeza 

– No lo entiendes pequeña, me iré muy lejos y no podrás visitarme –

– Podremos arreglar algo, ¿no? ¿Qué tan lejos estarás? ¿Más allá de la carretera Mayfil? –

– Mucho más lejos que la carretera Mayfil – Dominic ríe levemente y yo pierdo todo hilo de la conversación solo con verlo

– Ese será un problema entonces, ¿con quién comeré los recesos si tú ya no estás? ¿Quién mandara lejos a Ashton cuando me esté molestando? – en serio estará lejos, la tristeza me invade y quiero llorar sin parar

– Ok, tranquila, no quiero que llores por algo así, ¿entiendes? Volveré pronto, lo prometo – Dominic me rodea con sus brazos y me jala hasta quedar acostados – Estaremos bien, lo prometo – su presencia me llena de paz, la tristeza desaparece y me quedo dormida con rapidez. 



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Tampoco nadie me preguntó esto pero quiero decir que es de mis capítulos favoritos. :3

Sus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora