Mi historia fue borrada, ya nadie lo recuerda o habla de eso, pero la verdad es que yo fui el primer experimento de CRUEL, el primer conejillo de indias que se utilizó... fui la primera en el área.
Los recuerdos van y vienen pero lo único que siempr...
Han pasado 15 días desde que llegué y la caja volvió a subir; me acerqué lentamente y abrí las pesadas puertas para ver que había en su interior. Para mi sorpresa la caja venía con gallinas, cerditos, varios sacos y una vaca... ¿cómo diablos saco a la vaca? 0_0
Saqué la caja con malla donde venían las gallinas, eran 10 medianas, así que no me costó mucho. Las dejé en la pequeña casucha que había construido hace pocos días. Luego vinieron los cerdos y eso si costó. Uno a uno los iba sacando de la caja y los iba poniendo en un área cercada hasta tener 7 chanchitos. También habían palas, una malla como la de la caja de las gallinas, planchas de maderas y metros y metros de alambre.
Ahora venía el gran dilema, ¿cómo sacar a la vaca?. Tomé algunas cajas y las desarmé para hacer una rampa; tuve que clavar varios clavos en las uniones de madera; después de varios minutos estaba lista así que la acerqué y la bajé. Ahora la cosa era convencer a la vaca de subir, se veía muy asustada así que comencé a hacerle cariño para que me tuviera confianza, tenía una marca en su piel C.R.U.E.L.
Tú: eso debió doler -dije acariciándole la zona-
Un recuerdo atravesó mi mente, estaba viendo una película de cachorros blancos con manchas negras y una mujer que los secuestraba
Tú: te llamaré Cruela -le dí un abrazo- no eres una secuestradora de perros pero te viene con la marca
Después de varios minutos sentí como se relajaba para luego seguirme por la rampa. Prueba del día superada, Cruela se encontraba pastando tranquilamente y ahora tenía que encargarme de sacar los sacos que estaban en la caja.
Habían 25 fardos de paja, 38 sacos de afrecho y ¿sacos de comida para perros? miré a mi al rededor y vi en una esquina de la caja un pequeño bulto, me acerqué a este y pude escuchar un pequeño silbido. Lo tomé entre mis brazos y despertó.
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Al mirarme bostezó y me miró con su carita adormilada; me pareció toda una ternurita. Lo saqué junto al ultimo fardo de paja de la caja, esta se cerró y bajó nuevamente. Miré a mi nuevo acompañante y los demás animales que se encontraban en el Área... Ya no volvería a estar sola nunca más y la simple idea me hizo llorar de felicidad.
Dejé al cachorro en el suelo para que explorara la zona; tomé mi cuaderno con el lápiz y comencé a diseñar una cerca hecha con la malla que había llegado. Miraba cada cierto tiempo donde se encontraban Cruela y el cachorro para que no entraran por las puertas de ese lugar al que no quería ir.
Después de hacer el boceto fui a darle comida a los animales, tenía en un recipiente los trozos de frutas y verduras, los cocí en una olla con agua y le puse afrecho a la mezcla; mientras se enfriaba, le dí un fardo a Cruela y con un poco de paja comencé a hacer los nidos para las gallinas. El cachorro no se separaba de Cruela y esta le lamía la cabecita con mucho cariño.
Cuando la mezcla se enfrió les dí a las gallinas y a los cerdos; no pensaba que vendrían tantos animales, así que debía ponerme a trabajar. Después de varias horas trabajando, los muros se cerraron y comencé a clavar unos troncos a cada lado de las puertas para luego rodearlos con la malla, con varios alambres fijé la malla. Ya era muy tarde y estaba terminando la cuarta puerta, casi todos los animales estaban durmiendo comenzaron los ruidos así que no hubo mucho movimiento, a excepción del cachorro que no paraba de gimotear al lado de Cruela.
