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—Mantengan la calma,... por... favor
La futura heroína se encontraba en medio del entrenamiento.
—¡Futōmeina-chan, hay más personas debajo de estos escombros! —gritó Togata quien era su compañero en aquella clase, se encontraba utilizando su kosei y sacaba tan solo la cabeza del suelo encontrándose bajo los escombros y viendo a cinco personas bajo ella.
—¡Ya...ya voy! —corrió hacia donde se encontraba Mirio y se detuvo frente al edificio destruido—. Veamos....
Notó una biga que estaba soportando todo el peso del edificio empezaba a doblarse. Sin dudarlo abrió sus palmas y sintió la energía que había almacenado antes correr por su traje. Pues este estaba hecho de un material especial que era conductor de aquella única energía. Además poseía almacenamiento para ella, para cuando el usuario de aquel traje se le acabara o disminuyera la energía que mantenía en su cuerpo pudiera utilizarlo.
La energía lunar se deplazó por su traje formando lineas azules en ella, se agachó y colocando sus manos abiertas dejó libre una cantidad de energía que recorrió la superficie para adentrarse dentro de los escombros.
—Moon protection —dijo en voz baja el nombre de aquella técnica y una cápsula de energía que comenzó a crecer desde el suelo protegiendo a los heridos—. Togata-kun, sacaré los escombros, por favor mantenlos en calma —dijo a través del audífono que utilizaban para comunicarse.
—¡Como digas Futōmeina-chan! —respondió—. Mantengan la calma, nosotros los héroes ya estamos aquí —lo escuchó decir y suponía que estaba sonriendo.
Ella también lo hizo al escuchar la palabra héroes, la cápsula de energía aumento su tamaño y movió los restos de edificios levantadolos. Escuchó a los ciudadanos gritar por el susto.
—Futōmeina-chan, ¿qué esta sucediendo?.
—Haz que mantengan la calma Togata-kun —dijo concentrada en elevar aun más su técnica de protección—. Moveré los escombros y te avisaré cuando los harás salir.
—¡De acuerdo! —sonrió y tranquilizó a las personas.
Tsuki suspiró concentrandose aun más, y levantando las manos del suelo con lentitud cerró los ojos y cambió la forma de la energía.
Pues esta tenía la forma de la mitad de una esfera boca abajo y la transformó en una que este boca arriba. De esa forma cargaba todos los escombros de los edificios y lo empezaba a elevar.
—¡Ahora... Togata-kun! —dijo con algo de dificultad pues utilizaba mucha energía soportar tanto peso.
—¡Salgan ahora, en un fila, sin detenerse! —dirigía a los heridos hasta un lugar seguro—. ¡Todo despejado Futōmeina-chan, todos han salido!
