Un largo camino a casa

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Íbamos en el carro con Denisse, ambos íbamos en completo silencio y realmente eso no me gustaba a mi y justo cuando planeaba romper el silencio entre nosotros, Denise habló.

Denisse: y que Nathan, ¿cómo te a ido por ahora en tu vida sentimental?- me preguntó sin apartar la mirada del camino

Nathan: pues por ahora soltero y codiciado- le contesté divertido a lo cual el comenzó a reír de igual manera- no pero ya hablando enserio, todo a estado tranquilo por ahora, creo tengo un repelente contra chicos porque ni uno me hace caso- volví a bromear a lo que él está vez permaneció en silencio- pero y tú Denisse, ¿Cómo te a ido en el amor a ti?- le pregunté aunque la respuesta ya la sabia.

Denisse: el chico, me engañó con alguien más, hace 2 semanas terminamos- me dijo secamente, a lo cual yo quedé asombrado, ya que lo veía todo ilusionado con ese chico, pude ver cómo apretaba el volante del carro y como su mandíbula se tensaba.

Nathan: chicos así no valen la pena, para eso me tienes a mí- bromeé a lo cual ambos reímos, me acerqué a su hombro y me recosté con el cuidado de no estorbarle, pude ver cómo se relajo y siguió conduciendo normalmente, pero está vez llevaba una gran sonrisa en su rostro.

Denisse: oye Nathan, ¿Porqué solo Frank te puede decir Nat?- me preguntó.

Nathan: él y yo tenemos historia- reí- no esa clase de historia, pero desde que llegué a esta escuela, él fue el primero que me habló y sí ya sé, es un grado mayor, bueno, no un grado, sería un año, todo porque reprobó el menso- bufé- pero aún así, con él he vivido tantas cosas en solo unos meses que pareciera que nos conociéramos de años, lo quiero mucho en verdad, pero, me desvíe de la pregunta, más que nada, sería por la confianza que nos tenemos y bueno, antes en mi antigua escuela todos me decían Nat y ahora quise cambiar las cosas, ser alguien más pero sin perder mi esencia, no sé si me comprendas- bostezé- pero por esa razón se lo permito- le contesté.

Denisse: entiendo- me dijo seriamente- entonces, tengo que ganarme ese privilegio- me dijo decidido, a lo cual yo reí.

Nathan: Ya veremos si lo logras- le dije casi a punto de caer dormido.

Ya no pude aguantar más y me dormí sobre su hombro. Desperté debido a que el gran sonido de una puerta cerrandosé me despertó, me tallé los ojos y pude notar que ya estaba en mi habitación, en mi cama y con otra ropa, me quedé intrigado por esto pero más aún por las voces que provenían de afuera y pregunto, ¿Quién no sé asomaria para ver quién era?, así aquí eso hice e inmediatamente me acerqué a mi ventana y abrí lentamente la cortina, pude ver cómo Denisse estaba platicando con mi mamá, realmente no lograba a alcanzar a escuchar ya que estaba en la segunda planta, solo veía como Denisse se jugaba las manos por lo nervioso que estaba y como mi mamá estaba con los brazos cruzados.

Nathan: esta noche, voy a tener una gran charla- me dije ya que mi mamá no se molestaba por cualquier cosa y que ella tuviese los brazos cruzados es porque realmente estaba molesta, sin más cerré mi ventana, me aparté y me fui al baño, me mojé el rostro, el cuello y un poco el cabello, salí y me acerqué al buró que estaba a lado de mi cama y el cual tenía encima mi reloj, lo agarré y pude ver la hora- media noche, con razón Denisse se encontró con mi mamá, pero, ¿qué hacía Denisse aquí hasta las 12 a.m.?- me pregunté e inmediatamente me puse a revisar todas mis cosas, tardé solo 5 minutos y todo estaba en orden entre mis cosas y mi habitación, hasta vi la ropa que andaba puesta en el día, estaba en el cesto de ropa sucia, dieron las 12:15 a.m. hasta que vi como mi mamá se despedía de Denisse.

Escuché como entraba y cerraba la puerta, como subía las escaleras y para mí mayor sorpresa no llamó a mi puerta, cosa que me intrigó más.

Nathan: saber que tanto le habrás dicho para salvarte el cuello Denisse, saber que tanto le habrás dicho- me dije para mí mismo y reí, me acosté nuevamente y cerré mis ojos, en un rato más sabría toda la verdad.

Me levanté gracias a la alarma que había programado en mi reloj, me tallé los ojos y me acerqué a mi reloj- bueno, 8:35 a.m., es buena hora- me tallé los ojos y pude ver cómo el cesto de ropa sucia estaba ya vacío, me asombré ya que comúnmente ahora era yo el que lavaba mi ropa, me paré inmediatamente y estaba a punto de quitar llave a mi puerta cuando esta se abrió- me dejó sin llave- dije un poco molesto, ya que odiaba quedar sin llave, bajé las escaleras y busqué inmediatamente mi juego de llaves, busqué y busqué hasta que por fin lo encontré entre mi mochila hasta el fondo, suspiré con gran alivio y pude ver una nota pegada en la puerta de entrada de mi casa, la despegué y era de mi mamá.

Decía:
Hoy me paré temprano, lave tú ropa y ya hice el desayuno, hablamos en cuanto llegue más tarde a la casa, ten un buen día y no olvides llevar tú bote de agua, te quiero.

Nathan: genial, hoy seré carne frita- dije sin más y bufé, hoy tendría que hablar seriamente con Denisse acerca de lo que habló en la madrugada con mi mamá.

Subí a mi habitación algo molesto e intrigado, no sabía que tanto le habría inventado Denisse a mi mamá y no sé que tanto pensaría mi mamá al ver a Denisse fuera de la casa a altas horas de la noche, ¡todo era un tremendo caos! y lo peor era que yo recibiría un buen regaño o eso suponía.

Abrí y cerré la puerta de mi habitación, estaba molesto y necesitaba respuestas, busqué mi celular por todas partes hasta que por fin lo encontré debajo de mi almohada- ¿Él lo habrá dejado ahí?- me pregunté cómo si él no lo hubiera echo, prendí mi celular, dejé que hiciera bien inicio y rápidamente conecté el Wi-fi, esperé unos segundos y para sorpresa no tenía ningún mensaje nuevo- vaya que raro- dije algo asombrado ya que no era tan común que me sucediera esto.

Busqué el contacto de Denisse en el chat del grupo de mi salón, pero por nada del mundo lo encontraba, ya que no tenía agendado a Denisse entre mis contactos, busqué nuevamente pero con más calma hasta que lo encontré, estaba cómo "Den"-¿será por lo de ayer?- me pregunté, a lo cual hice caso omiso, seleccioné su número y seleccioné la opción de enviar mensaje, entre a su chat y al parecer no estaba conectado- qué flojo, no se ha despertado- me dije para mis adentros, rápidamente le dejé un mensaje, el cual decía:

"Necesito hablar contigo, nos vemos en la escuela"

Salí de su chat y recordé que el día de ayer no había abierto ese mensaje que me tenía intrigado todo el día.

Nathan: Es hora de saber quién es, o qué dice- hablé en voz baja, cómo si tuviese miedo de que alguien me escuchara.

Efecto Mariposa (2) (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora