veintiocho

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Al volver, dormimos usando las mantas y almohada de la combi. Me dormí en su pecho mientras él aún seguía hablando con Gonzalo y su fotógrafo.
Sé que desperté con unos besitos suyos y unas palabras en forma de murmuro anunciando que llegamos.

Se supone que nos quedábamos en la casa de los chicos a comer, lo hicimos y en un momento que me quedé a solas con Tomás empieza a titubear cosas que no alcanzo a entender — Tomi, hablame bien, no te entiendo — me río, él me mira a los ojos luego de un suspiro

— Te quiero muchísimo, de la nada te empecé a querer mucho más cuando empecé a valorarte y a darme cuenta lo que sos para mí. — hablaba tranquilo y con calma — Literalmente ahora estoy en paz, y es gracias a vos y a la violencia que usaste en contra de Julieta — lanza una risita y yo sonrío divertida. — No sé si vas a querer, quizás no te guste la idea, ¿pero podemos tener algún título ?— cierro los ojos cayendo en que me acaba de hacer la pregunta que esperaba muchísimo, que buscaba un momento para hacerla yo pero nunca lo encontré

— Si — acepté con felicidad, vi que sus ojitos brillaron con un halo de emoción en ellos. Tomé su mentón y rocé nuestros labios, jugando con sus deseos. Terminó uniéndonos finalmente — Te amo — alargué la última letra, bien sabia que ese te amo no era igual al resto

Solo esperaba que con el tiempo no nos desgastemos, que sea siempre como el inicio de todo y no nos olvidemos que nos amamos, que el otro haría lo que sea por uno. Lo amaba realmente y quería estar con él una vida entera, con cualquier título pero siempre juntos

Lo mantuvimos de esa forma unos dos meses, recuerdo que el día que cumplimos el segundo mes, Homer se enteró de alguna forma y no podía creer que su amigo se lo ocultó.
Zoe ya lo sabía porque yo no aguantaba más de la emoción y se tuve que decir para no explotar.

Conseguí un departamento para mí sola, aunque Tomás no quería que me vaya y que guarde la plata que uso en el alquiler para otra cosa, me fui de todas formas. No quería depender de ellos, no está en mi moral por más bien que la pase estando todos juntos.
Me quedé con que si algún día no puedo pagar el alquiler, Tomás iba a estar ahí esperándome para dormir con él las veces que sean necesarias. Toda la vida era necesaria dormir con él pero tuve que olvidarme de aquello para avanzar como persona

Aprendí a odiar, odié y desprecié a Helina y a mis viejos. Joaquín y Tomás me ayudaron con eso, desde que me plantearon que no era justo que ambos sean tan buenos conmigo, Helina tan forra y los trate por igual. No era justo para mis amigos y aprendí que para mí tampoco

En telas pasé a un rango donde puedo trabajar de eso, dando shows en circos y hasta presentaciones en teatros importantes. Mi mayor ganancia fue cuando mi profesora me partió las horas para que dé clases en su lugar a chicas de entre catorce y quince años. Le agradecí con el alma, porque con lo que estaba ganando pude dejar de trabajar en el call center, que era un mierda porque la gente me trataba mal si no había soluciones a sus problemas. Conseguí encajar mi nuevo trabajo con mis materias de arquitectura pendientes para seguir estudiando, lo logré con bastante éxito.

Al finalizar ese año, con el empujón de mis amigos, mis ahorros y ayuda monetaria de Tomás, abrimos un club de telas y acrobacias en general. Me costó estrés diario, sudor y lágrimas pero lo logré gracias a mis amigos. Se los agradezco realmente, porque por primera vez mi vida empezaba a tener más momentos felices que momentos sin importancia o tristes.

——

Hablando posta, voy a contar la cantidad de pedido de actualización que me llegaron desde que me queje de mil formas para compensarlo con dos días sin actualizar por cada uno. Me jode muchísimo así que posta voy a empezar a bloquear gente, parece que lo hacen a propósito algunos

eternally | c.r.o [COMPLETA☑️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora