Mi Vecino Jimin ft. Ruben Aleman

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Jimin fue acelerando sus movimientos y sus espasmos a la vez que nuestros gemidos se podían escuchar por todo el motel.

Jimin me mordió la oreja y luego me dijo entre espasmos de placer:

- escúchame bien Ru - Jimin estaba poseído por un espíritu salvaje – a partir de hoy, no importar dónde este yo, lo que sea que esté haciendo o con quien me encuentre, ten por seguro que mi herramienta estará a tu disposición el tiempo que quieras, solo tienes que pedírmelo y estaré ahí para ti. Porque necesito de ti y quiero compartir cada segundo contigo.

Finalmente, Jimin me clavó con fuerza que sentí que se me iba a salir por la boca, y soltó un rugido bestial como el semental que era.

Enseguida pude sentir como me premiaba, caliente y espeso, inundación en mis adentros más profundos mientras me hacía retorcer del puro placer de sentir el néctar.

Jimin estuvo dentro de mí un rato, hasta que sentí como se extinguía su palpitar y al final se salió.

Jimin me la dio a chupar y comenzó a tocarme abajito y al poco tiempo también me terminé, fue tan glorioso que comencé a escupir la leche de a chorros, Jimin se manchó los dedos y me alimentó.

Nos acurrucamos a dormir juntos y aun recuerdo lo que le dije antes de perderme en el mundo de los sueños a seguir soñando con él:

- Tal vez lo he dicho antes, en alguna frase para enamorar a un chico, pero tú eres la única persona que mi corazón ha esperado toda la vida.