Día a día 《Venepón》

🇻🇪3🇯🇵

Hanahaki
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Quería vomitar, necesitaba vomitar, se levantó algo brusco de la mesa llamando la atención de todos los presentes, miles de ojos se encontraban mirándole; sin embargo sólo podía sentir la mirada de él.

- Japón todo está en- no dejo terminar a la organización puesto que había abandonado la sala.

Corrió al baño, estando ahí se encerró en un cubículo. Sangre mezclada pétalos y flores salía de su boca; claro que estas no eran flores comunes, eran orquídeas las cuales era sus favoritas. Habiendo terminado se lavó la boca, mirándose al espejo hizo una mueca de asco.

- esto debe terminar- murmuró a si mismo-

Salió del baño dispuesto a recibir los regaños de la Onu, camino por los pasillos hacia la sala de reuniones. Sin embargo una risa lo hizo detenerse, está provenía de la sala, dio unos pasos para después encontrarse con una escena que estrujaba su corazón. Venezuela siendo abrazado de forma protectora por Rusia. Desde hace algunos meses que estos eran pareja, nada raro hasta la misma Onu les felicito puesto que la crisis del latino había disminuido por este hecho.

Las flores se hicieron presentes en su garganta. Desde el inicio de esa relación empezó a sufrir el Hanahaki. Pues si, el asiático contrajo la "pequeña" enfermedad del amor no correspondido. Para su gente y el resto del mundo el Hanahaki no era más que una enfermedad ficticia; puesto que dicha enfermedad no afecta a los humanos, pero para él era el mismísimo infierno.

- Japan?- la voz de Onu lo sacó su trance- me quieres explicar que pasó hace rato?-

Dio un largo suspiró antes de responder.

- Gomenasai Onu-sama (lo siento señor Onu) es que sentí ganas de vomitar, creo que el sushi de mi desayuno me cayó mal, espero y pueda perdónarme- realizó una reverencia en son de disculpas-

La organización asintió, Japón nunca mentía, así que lo vio como verdad.

- Bien, que no se vuelva repetir- dicho esto se retiró-

Volvió a suspirar para luego mirar al frente, seguían allí, encerrados en su burbuja, una sonrisa triste se pintó en sus labios. Venezuela desde el otro lado de la habitación se sintió observando, busco con la mirada encontrándose al asiático, sonrió mientras alzaba su mano para saludar; el ruso miro con ternura a su pareja para después imitarlo. Japón se sorprendió regresando el saludo de forma tímida.

Con una sonrisa claramente fingida salió de la sala hacia las afueras del establecimiento.

- vaya vaya pero miren quien se digna en aparecer- sonrió al encontrarse con sus amigos- donde estaba Japón?-

- ese no es tu problema North- cerró los ojos sonriente-

- creo que pasar tiempo con los latinos te afecta- murmuró China-

- te escuche come perros- respondió con cierto enfado-

Sin darse cuenta sintió unos brazos rodeandolo.

- South?- la chica no dijo nada y sólo abrazo al japonés- saben que le pasa?-

North Corea y China se miraron alzando los hombros, China sonrió y se unió al abrazo, minutos y varias discusiones después North hizo lo mismo. Al separarse notaron la presencia de la pareja feliz, los chicos y chica giraron rápidamente su vista a Japón, quien sonreía sin más.

- quizás. . quizás tenga que vomitar flores por un tiempo, por mucho tiempo; pero si Vene y Rusia son felices que más luego pedir, podré superarlo ya lo veran- dijo a sus amigos-

- claro que si y estaremos allí para ayudarte!!!- añadió la surcoreana-