LA HUÍDA[En Proceso]

(Maratón 3/3)Cap11

Llegamos a uno de los residenciales del centro de la ciudad uno de esos donde los departamentos eran en realidad casas gigantes... En serio. Moriré del corazón esto es enorme.

Entramos y la casa era hermosa tanto por fuera como por dentro,
Jaicob me guió por toda la casa enseñandome todo y luego me mostró un almacén en una habitación llena de Nutella.

He llegado a mi paraíso ( dijo Cleo con un traje de baño)

Somos dos nena.

- Este almacén lo hice por ti pero no te doy nunca la llave porque una vez te levantaste de madrugada a comer Nutella.- dijo el mientras yo seguía embobada.- ven te mostraré nuestra habitación.

La habitación era hermosa, tenía una cama matrimonial gigante. Muebles, guardarropas enorme el cual tenía ropas que supongo eran de el y mías.

- ¿Dormíamos juntos?- pregunté.

- Si pero tranquila, dormiré en otra habitación, hasta que vuelvas a tu rutina normal- dijo serio y en verdad no se porque me entraron unos nervios inmensos y dije.

- Quiero que duermas conmigo- respondí- la cama es gigante además no quiero volver a estar sola.

- De acuerdo- el sonrió- te haré algo de comer mientras ve a ducharte si quieres.

Dijo y salió de la habitación, entonces me encamine al baño y procedí a bañarme, el agua estaba deliciosa, lavé mi cabello y lo dejé caer por mi espalda.

Me dirigí al guardarropas y había tantas cosas que no sabía que ponerme, al final me decidí por un pantalón de chándal corto y un abrigo gigante el cual supongo que era de Jaicob pero tengo frío y es muy caliente, sólo espero que a él no le moleste.

Salí de la habitación y me tope con su figura.

- Te queda mejor a ti que a mi, te vez hermosa- dijo el mirándome.

- Gracias- dije sonrojada.

- Ven la cena está lista- bajé con el las escaleras.

Llegamos a la cocina y me encuentre con dos platos servidos de carne roja y puré de patatas.

- ¿Hiciste esto tú?- pregunte sorprendida.

- Pues si es tu plato favorito- dijo orgulloso de saber ese dato.

Procedimos a comer y el plato estaba delicioso.

Luego de eso nos pusimos a ver una película y no se en que momento caí rendida. Desperte en la cama, la cual era muy cómoda por cierto. Jaicob no estaba a mi lado así que decidí bajar por un vaso de agua.

En la cocina lo encontré a el de espaldas a mi con un vaso de zumo de naranja, se giró a mi y me sonroje.

- ¿Me estabas mirando Dahian?- en ese momento me percaté de que no traía camiseta.

- Claro que no- pase de largo por su lado y me dispuse a intentar alcanzar un vaso.
Para mi desgracia la alacena era muy alta y yo muy baja para alcanzarlo.

- Te ayudo con eso- dijo y sentí como sus pasos se encaminaron a mi posición y se acercó a mí.

Me pasó el vaso y cuando volteó me soy cuenta de que estamos tan cerca que podría jurar que puedo contar sus pestañas.

- Yo...- iba a decir algo pero en este momento el me callo pasando su dedo por mi mejilla y luego me beso.

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