Misericordia

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"Por qué no hay señales de la federación?" Pensaba

"sólo te tratan bien por tu cuerpo, me dan asco; no se dan cuenta que ante sus ojos esta la mujer más valiente y fuerte que haya existido. Esa valiente mujer, ahora me pertenece a mí, y sólo a mí. Y soy yo el único que se da cuenta de quien eres, el único que te ah respetado y admirado."

Y si él tenía razón? La federación ya no dependían ni ayudaban a Samus porque ya no está en las mismas condiciones de pelear? O simplemente ya no les importaba?

Samus tenía apretando su arma que había recogido mientras Ridley había dejado el cuarto, ahora en su mano lo iba a levantar y apuntar a la cabeza de Ridley, pero cancelo esas ideas mientras Ridley no la siguiese lástimando, ahora mismo no tenía un plan perfecto para escapar de la nave y no se encontraba en condiciones para ejecutar el plan si es que saliera en su mente.

De repente sintió de nuevo la garra caliente y grande de ese dragón en su cuerpo, otra vez estaba sobre su vientre, apretandola.

Samus abrió totalmente sus ojos para ver esa garra en su vientre. Ella sabía que Ridley estaba profundamente dormido, así que apagó la pistola y lentamente escondió su arma debajo del colchón que tenía la cápsula.

- Bastardo - murmuró. Y alejó la garra de Ridley

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Ridley siempre toma siestas largas, es un dragón.

Solo que en este caso, el solo tomó un pequeño descanso de 5 horas, ya había dormido lo suficiente momentos antes de secuestrar a la mujer espacial.

"No debo seguir mostrando tanta accesibilidad a Samus" pensaba para sí mismo pero le resultaba difícil ahora mismo que la miraba en esa condición.

-Ri-ridley?

-Sí, sigo aquí. - pusó una de sus garras para voltear el rostro de Samus hacia el suyo, estaba pálida y cubierta de sudor frío en su frente

-Necesito ir al baño.

"Es como una niña" pensó molesto y tomó un respiro.

Ridley la escoltó al baño más limpio de la nave y salió a esperarla afuera.

Los pensamientos del líder pirata se volvían en contra de sus principales, su deseo de tener a Samus en su dominio comenzaba a luchar con los sentimientos encontrados hacia ella. Ridley comenzó a sentir algo que jamás había sentido llamado "culpa" y cada vez que miraba a Samus cojear de su pierna aún herida y sosteniendo su brazo que por lo menos había parado de sangrar, lo atacaban.

-Mi señor? - El capitán había interrumpido a Ridley de sus pensamientos.

- Todo va de acuerdo al plan, una vez que ella cambie de pensar, trabajará con nosotros y la usaré cuando la necesite. Pero ahora está en malas condiciones como para torturarla, trae más medicina.

- De acuerdo, en seguida. - se dió media vuelta y se retiró.

Cuando Ridley volvió a mirar la puerta del baño Samus apareció con un gesto devastado, seguía vistiendo esa extraña gabardina de dragón enorme que se arrastraba al suelo.

- Tomarás un baño más tarde, ahora solo ve a la habitación y espera alimento.

Samus lo miró con sorpresa ante lo que había dicho, eso era demasiado.

- Qué esperás? Muévete, tienes suerte de estar enferma, así eres más fácil de matar.

Samus se fué.

Ambos no lo habían notado pero un pirata espacial había escuchado esa pequeña plática al recorrer el pasillo.

Aquel pirata soldado se dirigió a la gran sala de almuerzo. Se sentó solo en una mesa y se quedó mirando el techo extrañado.

"qué está pasando con lord Ridley? No, no debe ser nada, él odia a esa mujer, así debe ser, esa maldita humana a matado a decenas de nosotros, no puede traicionarnos as..."

El soldado miró como entraba a la cocina personalmente por comida que solo él y el capitán tenían acceso.

"Imposible, por qué le daría de comer carne de calidad al enemigo?"

- Qué estás mirando? Preguntó el pirata piloto que acababa de centarse junto a él.

- Oye crees que lord Ridley, nuestro líder asesino a sangre fría, pueda sentir sentimientos de amor?.

- oh lo dices por como ah tratado a Samus-Aran? No te preocupes, el capitán me ah dicho que todo lo que ha estado haciendo Ridley por ella es para que se una a nosotros, o algo así.

- No te parece sospechoso? Incluso Si fuese así, él le daría de comer mierda y la torturaria con lo que sea, pero yo mismo ví que la está cuidando como una maldita niña perdida en un estúpido barco.

- Está enferma y débil... Aunque, no. Es Imposible, debe tramar algo, no puede enamorarse de ella ni de nadie.

- Y tu que sabes de él? Desde la última vez que ah resusitado no solo su tamaño cambio, sino su obsesión por ella.

Ambos piratas se quedaban viendo así mismos y pensando en que demonios estaba pasando.

- Y si el plan del que habla es solo una mentira?...

- de que hablás?

- Y que si lo que quiere ya lo tiene, ella...

Ridley la miraba, la miraba como lo hacía cuando dormía y pensaba tanto una y otra vez en que hacer con ella.

Pero en ese momento pensaba tanto en lo que había experimentado y eso le hacía sentir hormigueo en su piel... La Victoria, la venganza, Los gemidos y jadeos de su enemiga, su piel desnuda que a pesar de no haber disfrutado mucho tiempo ni exactamente bien el momento, él eyaculó a su enemiga, y eso era totalmente extraño entre seres que se odian, y ahora que la miraba devorar su comida satisfactoriamente, Ridley, un asesino despiadado sentía un cosquilleo que jamás había tenido en su sistema nervioso.

- gracias - ella murmuró. Dejando solo huesos de salmón en la bandeja y bajandolo al suelo.

-Samus...- ella volteo a verlo. - Te llevaré a un planeta cercano parecido a la tierra, más pequeño y rocoso, creo que te hará bien respirar aire natural. - las últimas palabras las dijo en un tono muy bajo.

Samus miró al suelo.

- De acuerdo...

Ridley comenzó a abandonarla en ese momento.

- Espera, aún no hemos hablado nada.

- Lo haremos allá.
Ridley salió de la habitación y se dirigió a la cabina del piloto.

- Señor, llegaremos en 30 minutos.

- Está bien- se llevó su garra a la cabeza "hago todo esto por ella... La deseo, la lastimó y quiero hacerlo de verdad pero, también quiero protegerla".

"en que clase de lío me he metido está vez? Y cómo saldré? " Pensó Samus para ella misma mientras tocaba su cara, se sentó en la cama y esperó cualquier cosa.

"Qué estarán tramando esos dos? Pero más importante, que es lo que tiene en mente Ridley?" se preguntó así mismo el capitán quien se dirigía a su puesto cuando vio a Ridley allí mismo.

- Mi señor, cómo puedo ayudarlo?

- Escucha, eres el pirata con mayor cercanía tengo, y quiero que te hagas cargo de Samus cuando esté ocupado, no lleves ningún arma cuando estés con ella no olvides lo peligrosa que puede ser, solo dale instrucciones y sí puedes entrar a mi habitación.

- Entendido señor. Le diré que ya casi aterrizaremos.

Dolor (Samus X Ridley )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora