Take me to church

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Calíope y Scott se miraban fijamente, la manada estaba en la acera y las chicas estaban en el balcón mirándoles igualmente, se podía percibir cierta tensión a su alrededor. La mayor se acercó al alfa ambos no pensaban bajar la cabeza o mostrarse débiles. ─Veo que Hale no está con ustedes─ dijo Calíope una vez estaban a solo unos pasos de distancia ─ Es una pena.

─Derek está indispuesto ─ le respondió Scott, mirando como la mujer apretaba sus manos una con la otra, se notaba que estaba enojada.

Ella sonrió negando con el dedo índice─ O demasiado dispuestos─ refiriéndose a lo irresponsable que fue al separarse de la manada para buscar por su propia cuenta al humano. Scott carraspeó y le devolvió la sonrisa.

─¡Al punto bruja!─ se notaba la ansiedad en la voz de Malia al gritar; ninguno de los dos grupos confiaba en el otro, Lydia sostuvo a al chica del brazo para que no se acerca y causara más problemas, aunque era un poco difícil, puesto sus emociones no eran diferentes de la coyote.

El alfa asintió olisqueo el aroma de que la manada estaba a nada de atacar a las chicas, ─ Queremos traer a Stiles de vuelta y estoy seguro que también desean volver a ver a su hermana pequeña, así que lo que pedimos es la verdad.

La mujer soltó sus manos, debía mantenerse tranquila y escucharles, era verdad que los Cinocéfalos se llevó a su hermana, aquella manada eran los únicos que podrían ayudarlos a recuperarla. ─¿Cuál verdad?

─¿De verdad son culpables de la presencia de los Cinocéfalos? Y ¿qué son realmente?─ La mujer suspiro, volteo a ver a sus hermanas las cuales entraron a la casa, ella dejó caer los hombros mostrando que dejaría la actitud agresiva de hace unos minutos.

Scott le contó lo referente a lo que habían dicho los Cinocéfalos antes de que desapareciera la pequeña Erato, como las culpo y el hecho que la niña parecía entristecida y olía a culpa antes de esfumarse junto con Stiles, esta estaba extrañada de eso, pensó un momento recordando el día en que habían puesto la antena de radio y las farolas en el bosque, Urania salió de la casa y la tomó de las mano para susurrarle algo. Era extraño pero ninguno de los chicos alcanzo a escuchar lo que está dijo, la expresión seria de la mujer cambió a una de sorpresa, giró rápidamente a la manada y luego a sus hermanas. Scott no entendía aquella forma de actuar, ellas no olían a nada mientras estaban en su casa, la mayor asintió un par de veces aferrándose a las manos de Clío y Terpsícore que salieron tras la segunda hermana. Volvieron junto al alfa.

Estas dos últimas contaron como la antena cayó la primera noche, debido a una falla de la estructura, las farolas cercanas a la casa parecieron ser afectadas rompiéndose, tuvieron que actuar tan rápido para repararlas que no notaron nada fuera de lo inusual, pero las lámparas debieron haber guiado un camino hasta este mundo haciendo que aquellas criaturas se perdieran. Aunque no estaban realmente seguras de si eso había sido la causa, aunque era lo más seguro después de todo aquel pueblo parecía aumentar cualquier cosa sobrenatural.

─Todo es nuestra culpa─ dijo Urania algo molesta aferrándose al brazo de Calíope.

Calíope permitió a la manada entrar a su casa, se acomodaron en la sala tomando te, todos con mala cara, excepto Urania y Peter que parecían no querer estar presentes y solo tomaban su te en la esquina tranquilos, claro uno alejado del otro.

─¿Han pensado en alguna forma de encontrarlos? ─ pregunto Thalía mirando al alfa, Liam se puso frente a Scott y le gruño a la chica que no le aparto la mirada, bueno eso querían pero los mayores les hicieron sentarse y mantenerse alejados uno del otro, no tenían tiempo para riñas.

─Se podría decir que sí─ dijo Scott suspirando, aunque era lo único que podían hacer no sabían si funcionarían ─ Sí esas cosas buscan una forma de regresar debemos dársela, y si de verdad ustedes tienen en cierta forma la culpa servirían como carnada─ Melpómene se alarmó de la ida del lobo pero Calíope la tomó de la mano para tranquilizarla, Calíope le pidió a Urania que se levantara, este dejó su té y subió las escaleras rápido, las chicas estaban tan confundidas como la manada. Esperaban una respuesta de la mayor la cual se levantó ─ Lo haremos, pero debes jurar que tu manada cuidara de mis hermanas─ dijo tomando las manos del alfa y obligándole a levantarse de su lugar ─ Cuidarán mis hermanas con su vida.

Three songs [Sterek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora