louis

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A veces me
encontraba tan vividamente consciente de
su persona como si acabara de dejar la habitación y el sonido de su voz aún estuviese allí. De algún modo, yo sentía un alivio perturbador. Y pese a mí mismo, me imaginaba su cara, no como la había visto la última noche del incendio, sino en otras noches, la última que pasara con
nosotros, en nuestra casa, con sus manos jugandocon las teclas de la espineta y su cabeza inclinada hacia un lado Cuando comprendí en qué dirección marchaban mis sueños, sentí una enfermedad más terrible que la angustia. ¡Yo quería que
estuviese vivo!

frases de entrevista al vampiro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora