Parte 7

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Y sin darme tiempo para reaccionar, Jimin se la sacó y la vi crecer y ganar poder entre sus manos.

No podía creerlo, luego comenzó a golpearlo contra la mesa llena de salchichas.

- durante todo este tiempo solo he podido imaginarme como te verías a mi lado, en mi cama, de cómo serían tus caricias sobre mi pecho – decía Jimin mientras desabrochaba su pantalón y se quitaba el cinturón - tus besos amorosos sobre mis pezones. Gracias por haber venido esta noche a la cueva del lobo, porque de una vez te digo que no vas a salir caminando de aquí.

No supe cuando paso, cuando me di cuenta ya me tenía contra la mesa, sus pantalones estaban a la altura de las rodillas.

- puede que solo podamos compartir unos instantes aqui, pero voy a disfrutar tu culo cada segundo que dure.

En ese momento me dieron ganas de llorar, había deseado tanto ese momento, desde que comenzó a ir al gimnasio y se había puesto mamadísimo, y se lo confesé:

- la verdad es que siempre soñaba que en un día de lluvia cuando paseabas por el parque. Poder acariciar tu cabello, besar tu frente, acariciar tus mejillas y perderme entre tus labios.

Jimin se acercó y me abrazó, me besó la frente y me susurró al oído muy suavemente:

- sé muy bien cómo te sientes, pero ahora puedo amarte libremente y eso hace que merezca la pena vivir. No importa las dificultades que podamos pasar hoy o el resto de nuestra vida, porque al tener tu apretado y blanco culito yo soy feliz y es todo lo que importa – me quitaba la ropa mientras seguía susurrando suavemente – no es posible expresar en palabras o en frases lo mucho que te amo y lo importante que era para mí ser el primero en meterte una salchicha de macho alfa. Solo puedo confesarte que mi vida fue mucho más feliz desde el instante que te decidiste elegirme a mí como tu compañero de vida, y desde ahora en adelante estaremos juntos en cada camino y vuelta del destino.

MI BODA CON JIMIN ft. Ruben AlemánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora