Parte 2

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Llegó el momento de que mi padre me entregara y caminar por el pasillo hasta el altar. Saqué fuerzas para luchar, para recuperar mi autocontrol. No podía colapsarme de nervios. Sostuve el brazo de mi padre, pero no permití que alguien se diera cuenta. Jimin me sonreía desde su lugar en el altar. Luego comencé a reflexionar sobre el hombre con el que estaba a punto de casarme, él había crecido siendo un niño feliz, siempre estudioso y de buenas calificaciones. Cuando cumplió 12 años se metió al equipo de voleibol, fue en un partido cuando nos habíamos conocido y a las pocas semanas de andar me presentó a su mamá, Jimin siempre había sido muy guapo, lo heredó de ella, hermoso cabello que contrastaba con el blanco de su piel, una sonrisa de dientes perfectos.

Por fin llegue a su lado y mi brazo pasó del de mi padre al agarre suave pero firme de Jimin, luego me dio un beso cálido en la mejilla y juntos nos volvimos hacia el cura y comenzó su sermón.

Jimin siempre fue muy atlético, se mataba en el gimnasio, y tenía muy bien trabajados sus músculos. Le sobraban las mujeres, pero él nunca les hacía caso, nunca pude olvidar su perfección. Estando en el altar, viendo a Jimin de reojo descubrí que también me miraba y me sonreía. Su camisa blanca desabotonada dejaba ver su pecho blanco sin vellos, me hizo desnudarlo con la mirada, lo deseaba mucho, lo necesitaba. Cuando el cura terminó, Jimin tomó el anillo, yo estaba muy nervioso y Jimin lo notó pero continuó con sus votos:

- Yo, Jimin me comprometo a estar a tu lado disfrutando de tus alegrías y apoyándote en los momentos de tristeza, creciendo juntos y siendo felices por siempre.

Estaba a punto de tomar mi anillo pero Jimin siguió hablando y mirándome a los ojos mientras me sonreía:

"Te prometo que quiero recorrer el mundo contigo y que viajaremos todo lo que podamos".

"Los domingos cocinaré yo, pero sólo si luego me dejas ver esas pelis que tanto me gustan".

"Prometo que nunca nos iremos a dormir enfadados y haré todo lo que pueda para desenfadarte siempre".

"Prometo que me despertaré antes para seguir preparándote el café cada mañana".

"Prometo intentar que cada día sea una nueva aventura y hacerte alguna mini sorpresa."

"Prometo escribirte cada día un post it diciéndote algo bonito".

"Prometo dormir abrazados aunque se me duerma el brazo. "

"Prometo no ocupar tu lado del armario e invadir tu espacio".

"Prometo ver tus videos de YouTube (al menos los de cocina) aunque no entienda nada de cocina".

"Prometo tener paciencia y no enfadarme cada vez que veo tu ropa tirada por la casa."

"Prometo quererte con tus defectos, tus manías y esas pequeñas cosas que me sacan de quicio pero que adoro. "

MI BODA CON JIMIN ft. Ruben AlemánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora