18.Deseos

90 7 2
                                    












🐢

- Bembem ah…- le llamé suavemente mientras él entreabría los ojos, como si acabara de despertarle.- ¿Me amas?















Como si aún no hubiera despertado del todo, me siguió mirando, como si no me hubiera escuchado. Avanzó un par de pasitos más, hasta chocarse con el borde de la mesa frente al tocador del camerino, en la que estaba sentado.

Acercó su cabeza a la mía, apoyó su frente en la mía, sin soltar aún mi mano. Y me miró. Me miró de tal manera que sentí querer desaparecer. Convertirme en humo, y volar alto alto.



- No.- Me contesto con voz suave.- No te amo.

Se hizo el silencio y yo aparté la cabeza.

- Entonces ¿Por qué estás asi? ¿No es por mi? ¿No es por todo lo que me dijiste en aquél baño?- Comencé a hablar, y en ese mismo momento me besó suavemente la mejilla. Una, y otra vez. Suavemente. Yo miré de nuevo hacia él, le encaré.- Tenías razón. – esperé y le miré a los ojos. No hubo reacción.- ¿No era eso lo que querías que te dijera? Tenías razón, sobre todo. De modo que…..- Intenté soltar mi mano, lo hice, pero él la cogió entre las suyas de nuevo.

- De modo… qué?- me dijo tercamente mientras ponía mi mano tras de su cintura.

- Que no sé que demonios haces aún aquí.- le acusé casi sin voz.

- ¿Quieres que me vaya?- Me dijo con los ojos entrecerrados de nuevo, acercándose más a mi, apoyándose en la mesa tras de mi espalda con las manos. Acortando al máximo las distancias. Percibí su olor.

- Bembem ah… si… si es cierto que…

- Lo es.- Dijo en mi oído besando de nuevo mi mejilla.- no te amo. ¿Te he dicho yo alguna vez que sí?

- No, pero…

- Pues eso mismo, no sé de dónde te lo sacas. Tonterías tuyas. ¿Es qué acaso soy como un niño de 14 años que tengo que enamorarme de la primera persona con la que me acuesto?- Me dijo interrumpiéndome, paseando sus labios por mi oreja mientras hablaba.

- ¿Me tomas el pelo?- Le pregunté sorprendido haciendo que me mirase a los ojos.

- ¿A qué viene todo esto?- me preguntó. Yo de pronto me sentí estúpidamente manipulado.

- Bambam.- Dije en un tono completamente distinto al resto, uno que nunca había usado para hablar con él estando los dos solos. Con ese tono con el que hablaba a Jb cuando estaba irritado o molesto.- Hay muchas cosas que me has acusado de no tener muy claras. Es posible que esté confuso respecto a algunas cosas.

Noté en su manera de mirarme que me escuchaba atentamente.

- Pero hay algo que ,aunque tu lo dudes, yo he tenido claro en cada instante;

Si nunca he pretendido llevar esto más allá de lo que hemos tenido hasta ahora, ha sido, evidentemente, porque es una mujer lo que yo quiero a mi lado el resto de mi vida.

Seguías sin otra expresión en tu mirada, solo estaba entrecerrada, fija en mí.

- Sabes lo poco que escucho las opiniones de los demás y lo poco que me importan, no es porque crea que esté mal lo que hacemos.

Pero eso es lo que quiero para mí. Lo único que sé que quiero.

Yo siempre he tenido mis límites. Pero empiezo a dudar de los tuyos.

JackBam StormDonde viven las historias. Descúbrelo ahora