Prólogo

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El tiempo había transcurrido con normalidad en Tazmily, el antes tímido y llorón Lucas ahora se encontraba festejando su décimo octavo cumpleaños, había aprendido a dejar que sus miedos lo fortalecieran e intentaba cosas nuevas todos los días. La estaba pasando de lo mejor en su festejo, hacía competencias de quien podía comer más con Kumatora, medía su fuerza en las vencidas con Fuel y Flint, bueno, Flint trataba de cocinar el Omelette que tanto le gustaba a su ya no tan pequeño hijo.
Todos seguían hechando de menos a la hermosa Hinawa y al rebelde Claus pero siempre los mantenían presentes en sus corazónes.

A su vez, muy, muy lejos de tan tranquilo pueblo, en el bello Onett se encontraba Ness quien orgulloso como todos los días acompañaba a la pequeña Traicy a sus clases aunque ella podía ir sola el mayor insistía en dejarla. Tras el fallecimiento de su adorada madre juró cuidar a su hermana y enseñarle todo lo que esté a su alcance aunque claro, Traicy no es mucho de "salvar al mundo" ¿Pero qué se le puede hacer?
Algunas veces Paula se ofrecía a cuidarla mientras Ness seguía sus estudios en casa y en ocasiones Poo y Jeff iban, a robar lo que podían de la comida del azabache, pero iban. A pesar de que no tenían dificultades para poder llevar a cabo su vida a veces le resultaba un poco estresante, con tan sólo diecinueve años llevar una vida así —tengas las habilidades que tengas, tengas los recursos que tengas— puede no ser muy benéfico para la salud y más cuando tienes a alguien dependiendo aún de tí. Era por eso que, por las noches tomaba su característica mochila amarilla y salía, caminaba hasta llegar a lo más recóndito de Onett y ahí hacía una pequeña fogata, sacaba una libreta y dibujaba la Luna o al menos lo intentaba. Cuando se sentía más sereno guardaba aquella libreta y apagaba la fogata solo quedando iluminado por la luz de luna y era ahí cuando empezaba a hablar psíquicamente con ella, obviamente no recibía respuesta alguna así que sus pensamientos quedaban vagos de destinatario por el aire, por un tiempo fue así hasta que... Alguien o algo escucho uno de aquellos pensamientos.

«Parece poesía» ese pensamiento fue el que recibió Ness una noche «Deberías escribirlo», no iba a negar que se sorprendió al escuchar que otra voz le contestase.

«No... no sabía que alguien estuviera recibiendo mis pensamientos»
«Pues ahora sabes que sí y por una parte me alegro, creí que estaba enloqueciendo»
«¿Por qué?»
«Todas las noches escuchaba a alguien hablar pero no era una voz que yo conociera así que asumí que tal vez solo era mi subconsciente»
«¿Cómo sabes que no soy tu subconsciente?»
«Me conozco perfectamente y se que me respondería y tú, mi estimado, no suenas como yo.»

Por un momento Ness sintió la curiosidad dentro de él ¿quién sería aquel sujeto con quien tan repentinamente entabló conversación psíquicamente? No lo sabía y quizá nunca lo sabría pero fuera quien fuera su voz le traía paz y tranquilidad. Después de una larga y enérgica conversación Ness decidió hacer su última pregunta de la noche antes de regresar a casa.

«Dime ¿Eres de Onett? porque si es así no creo que tengamos el gusto de conocernos en persona»
«¿Onett? oh, no, no, no, ese lugar queda muy lejos de casa.»
«Oh... »
«Bueno, sería tonto de mi parte preguntar si eres de Tazmily ya que ahora sé que no es así»
« ¿¡TAZMILY?! ¿Tan lejos llegan mis pensamientos?»
« Así parece ser»
« ... Bien, creo que fue bastante por hoy yo me retiro, descansa»
« lo mismo digo»

Y así terminó la noche para Ness, cosas inesperadas habían pasado pero se sentía tranquilo y por alguna razón aquella voz lejana resonaba en su cabeza, era tan clara y tierna que hacía que una sensación indescriptible se apoderara de su cuerpo, esa misma noche al hechar un último vistazo a la Luna deseó con todo su corazón volver a escuchar esa voz lejana.

Edit: corregí algunas cosas pero creo que ha quedado igual de mal, anyway, nos vemos.

[EDITANDO] Voces  Lejanas [Nesscas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora