El plan

155 14 4
                                    

El plan de Martín y Simón era sencillo: primero ellos dejaban la puerta trasera de la valla abierta, luego sus amigos se colaban e iban al árbol más grande del jardín para después subir por ahí y colarse en la habitación de Martín por la ventana abierta. Después Simón y Martín buscarían una excusa para salir del comedor y subir a la habitación para pasar la tarde con ellos.

Fácil, ¿verdad?

Y lo sería de no ser por qué sus amigos eran unos ineptos para el disimulo y el sigilo.

-No puedo subir. - Se quejó Villa desde abajo del tronco.

-Yo te ayudo. - Afirmó Martín saltando de su ventana a la rama del árbol y luego bajó por el tronco como un mono.

Con ayuda de Laura y Martín finalmente Villamil logró subir a la habitación del menor de los Vargas.

Por fin Simón podría volver a ver a su novio Juan Pablo

-¡Mi amor!- gritó Simón cuando vio a Villa entrar por la ventana. 

Villamil se lanzó a los brazos de su novio y empezaron a besarse como si no se hubiesen visto hace siglos.

-Busquen un cuarto o dejen de babosearse- Dijo el menor de los Vargas haciendo cara de asco.

Un rato después de estar jugando Martín le hizo una seña al más alto, para indicar que se acerque sigilosamente.

-¿Que quieres Bachi?- Dijo Isaza en un susurro.

-Tú y yo aún debemos hablar- Respondió el menor.

Ambos se dirigieron a la salida cuando Simón les interrumpió.

-¿Dónde van?

-Martín va a enseñarme vuestro piano de cola- respondió Isaza.

-Os acompaño- Dice de repente Laura.

-Puede ser muy peligroso si mi madre nos ve a los tres. Además Laura, mi madre aún tiene buen impresión de ti- Se excusó Marto.

-Pues os acompaño yo- Dijo Aleho con una sonrisa pícara.

-Esta bien...-Cedió Isaza y los tres fueron a la sala donde se encontraba el piano 

-Se que necesitan hablar. Me enteré. Entren a la sala y hablen- Dijo el mayor de todos señalando la puerta de la sala.

-¿Que sabes?-Preguntó el Bachi.

-Lo se todo pequeño saltamontes- Contesto Alejandro.

-¿De que hablas?- Preguntó Isa sonrojándose levemente.

-Pasen y no pierdan el tiempo- Dijo Aleho abriendo la puerta.

-Pasen y no pierdan el tiempo- Dijo Aleho abriendo la puerta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


El drama de los Vargas  (ACABADA, SIN FINAL DETERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora