INCUBUS [Taekook]

05.

-¡¿Pero qué estás diciendo?!- Fuí callado rápidamente por la señorita de la biblioteca.

-Okay, hay que hacer esto, no duermas en tu casa hoy.- Comentó Namjoon.

-¿Con quién dormiré?- Contesté.

-¡Puedes dormir conmig...- Las palabras de Jimin fueron cortadas por Yoongi.

-Que duerma conmigo, no sabemos si este demonio es capaz de salir de la casa de Jungkook y hacerle daño a quien duerma con él. Está más que claro que no pondré en peligro a Jiminie.

Todos miramos a Yoongi de una forma dulce, brotando su sonrojo fácilmente por tan clara piel. ¡Este chico es muy dulce!

-De acuerdo, Jungkook dormirá con Yoongi y ya mañana nos cuentan que pasó, ¿de acuerdo?- Volvió a hablar Namjoon mientras ambos ansentiamos.

Nos mantuvimos charlando unos cuantos minutos antes de que el timbre sonara. Al salir y tomar el camino que cada uno toma algo me llamó la atención.

O mejor dicho alguien.

Volteo rápidamente hacía mi izquierda y veo como aquel chico de hombros anchos mira hacía otro lado cuando sé que estaba viéndome a mí o ¿será que a Jimin?

-¿Tú conoces a aquel chico?- Le pregunto al susodicho mientras que este voltea a mirarlo al ser guiado por mi mirada y asintiendo a la vez.

-¡Si! Es el chico quien es asesorado por Namjoon.- Le doy un sape.

-¡Tonto! Yo sé eso pero me refiero a su nombre.

-Ya veo.- Soba la parte donde le metí la palmada.- Mh, si mal no recuerdo su nombre es Seokjin...

-...Kim Seokjin.- Termina por decir.

Justo cuando la última palabra salió de su boca, un mareo se instala en mi cabeza, haciéndome tambalear pero no cayendo en la acera ya que Jimin me tomó a tiempo.

"Kim, Kim, Kim..."

-¿Q-qué sucede, Jungkook? ¿Te encuentras bien?

Aunque Jimin sea mayor que yo, su fuerza no es la misma que la mía así que no logra mantenerne de pie por mucho tiempo.

-¿Jungkook? ¡Ayuda! ¡Por aquí!

La voz de mi amigo poco a poco disminuye. ¿Estoy cayendo en algún otro sueño?

Antes de cerrar los ojos pude escuchar el abucheo de la demás gente chismosa.

🍃

-¡Taeee!

Volteé hacía donde llamaban pero al ver a un pequeño, alrededor de 8 años mirándome fijamente fue que pude reaccionar.

El pequeño ladeó su cabeza mientras que fruncía la frente.

-Tú no eres TaeTae.

Yo no sabía que decir.

Ese pequeño era yo.

-Y-yo no soy...¿TaeTae?

-Claro que no, tú estás bien feo.

La cara de poker face que no pude evitar realizar era de imaginarse.

Agité mi cabeza un par de veces antes de hincarme hacía el pequeño, quien tenía una pequeña cantidad de chocolate embarrado en la comisura de su labio y quitándosela sin dudar.

-¿Te ayudo a buscar a TaeTae?

Los ojos del pequeño brillaron.

-¡Sí! ¡Por favor!- Mi yo pequeño tomó de mi mano y así mantuvimos la caminata durante unos minutos.