"Rosa" - [Mikayuu] #AwardsNoSeraph

"Fin"

Capítulo 17

"El fin" dijo mientras se acercaba al castillo, "nos encontraremos de nuevo, hermana"

- Tengo que regresar.

- Entiendo ..

- Volveré contigo, Mika - Sus palabras parecían reales, era lo único que el rubio necesitaba para permanecer tranquilo.

- ¿Quieres que vaya contigo? - Mikaela preguntó, pero recibió el desacuerdo de Yuuichirou.

- Esta es la parte de la historia donde la damisela en apuros debe esperar el regreso de su héroe.

Mikaela levantó una ceja con cuestionamiento. - ¿Desde cuándo yo soy la damisela en apuros?

- Desde que te salvé de tu inminente autodestrucción, ¿tal vez?

- Entonces aquella vez que estuviste a punto de ser comida de lobos, ¿Yo fui la damisela en peligro? - El vampiro contraatacó.

- Pues ... pues te recuerdo que el golpe final fue dado por ¡Mí! - Yuuichirou se estaba quedando sin material.

"Peleas" como esas, hacían que Mika recordara el por qué amaba a tal competitivo joven de ojos verdes.

- ... Tú ganas, supongo que ambos somos las damiselas.

Yuu lo pensó un momento. - Me parece un trato justo - Después de todo, las damiselas también son geniales.

En eso estaban cuando el sonido de un cristal rompiéndose invadió la habitación. Ambos se miraron, una piedra había golpeado violentamente la ventana.

- Ya están aquí! – Dijo Mika con preocupación. Acto seguido, fue hacia la ventana rota para ver mejor lo que sucedía.

- Yuu-chan, ¡mira!

Yuuichirou se acercó. Una gran cantidad de hombres se encontraban caminando por el jardín del castillo.

- Bestia! - Gritó una voz conocida. – ¡Entréganos al chico! O sufrirás las consecuencias ...

- Guren! - Exclamó Yuu con alegría. Se giró hacia Mika para poder verlo de frente, tomó su mano suavemente y depositó un tierno beso sobre sus labios. - Te prometo que todo estará bien - Mikalea no quería soltar su mano, pero al final lo dejó ir.

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- Qué es eso que viene? – Dijo Shinya después de notar una figura que venía del castillo.

- Alto ahí! – gritó Narumi mientras apuntaba su espada hacia la figura.

El incógnito paró y levantó sus manos en señal de tregua.

- Tranquilos todos! ¿Narumi?, Dios santo ¡baja eso! - Yuuichirou estaba claramente asustado por tal "calurosa" bienvenida.

- Esa voz ... - Shinya fue el primero en reconocerla.

- YUU! - Guren saltó desde su caballo seguido por Shinya y se dirigieron hacia el azabache menor, que los saludaba con alegría.

- Yuu? - Narumi todavía dudaba.

Yuuichirou no se molestó en responderle al castaño.

Cuando por fin se encontraron, Yuu tenía la intención de relatarles todo, pero ni siquiera pudo abrir la boca porque ya estaba siendo abrazado por Guren.

- Te extrañé demasiado mocoso.

Shinya también se unió al abrazo familiar.

- Estás llorando? - Preguntó Yuu con burla. Aunque tampoco estaba en posición para cuestionarlo, ya que una lágrima traicionera se escapaba de sus ojos.