Alianza - Thorki

9

Fue una noche muy fría, Thor dormía con al menos 3 sábanas distintas apiladas capa sobre capa y varias almohadas, cualquiera que viera desde lejos juraría que el príncipe estaba envuelto en un nido de telas.

Un nido enorme y mullido que no lo dejó escuchar cuando la puerta de su habitación se abrió y se cerró luego de que alguien entrase.

Tampoco sintió cuando la cama se hundió en partes hasta llegar a él, no, Thor estaba muy ocupado soñando con una extraña serpiente gigante contra la cual intentaba luchar pero esta lo aplastaba y, oh no, lo iba a devorar. Thor intentó moverse y liberarse pero justo en ese momento escuchó.

–"Thor..."- La serpiente lo llamó, no con la voz corroída que esperaba de un monstruo si no insinuante, suave y casi suplicante clamando por él.

Lentamente abrió los ojos y en la bruma del sueño lo primero que vio fue piel, piel suave y tersa tan azul como un lago cristalino en una noche de luna llena, miró aún más arriba y ahí estaba, Loki sobre él respirando con dificultad y el cuerpo bañado en sudor.

–Thor...- Volvió a llamar, Loki se veía mal, bueno, no mal, lucía bien, muy muy bien, pero su rostro era de pura aflicción y dolor.

–¿L-Loki? ¿Qué sucede? ¿Qué tienes?...- Thor preguntó cuando su cerebro finalmente fue capaz de articular palabras sin perderse en la hermosa visión que tenía al frente.

–Thor... Hace calor... mucho calor... ayúdame...

–¿Calor? Loki está helando afuera, ¿Qué quieres decir con calor?

–N-no lo sé, solo sé... –Loki parecía ahogarse con su propio aliento.–...no me gusta... Thor, ¿voy a morir?...

–¡¿Qué?!- Finalmente Thor despertó por completo y se enderezó lo suficiente para quedar a la altura de Loki quien aún seguía sobre las mantas que cubrían sus piernas. –Loki, no vas a morir ¿okay? ¿Q-qué puedo hacer para ayudarte? Loki, mírame- Sujetó los hombros de Loki con fuerza y Loki gimió, pero no había sido en queja al dolor, era un gemido aliviado, de placer...

–¡Eso! ¡Hazlo otra vez!- Rogó

–¿Q-qué cosa?- Thor preguntó entre confundido y sorprendido, muy sorprendido.

–Eso, esto...- Loki tomó las manos de Thor y las pasó por su propio rostro, las bajó delineando su cuello hasta su pecho donde sus dedos saborearon los músculos hasta la cintura donde la piel de Loki tembló bajo sus palmas. –Tócame, Thor...

Thor tragó pesado, en ese momento apenas cayó en cuenta que Loki solo llevaba una bata de seda translúcida que era un mundano intento de ocultar todas las curvas y piel que era Loki.

¿De qué doncella habría hurtado semejante prenda? Bueno, eso no importaba, Thor estaba seguro de que a ninguna le quedaría tan bien como a Loki.

–L-Loki, ¿estás seguro que esto está bien?- Murmuró aún con duda mientras sus dedos simplemente se apretaban a las caderas ajenas incapaces de buscar más allá sin saber si tenía el debido permiso para ello.

–Si, si, está bien, Thor, tú eres el único al que dejaría... ah, ¿Qué rayos está mal contigo? Tanta ropa...- Se quejó pasando las manos bajo la camisa de pijama de Thor incitándolo a sacársela, Thor así lo hizo.

–Loki...- Thor exhaló con el aliento contenido bajando sus manos por sobre las líneas estéticas que marcaban la piel de Loki hasta llegar entre sus muslos. –Dioses, Loki, ya estás tan mojado...

–Si, así, oh Thor...

Loki pudo haber seguido quejándose así toda la noche, pudo haber gritado solo por el toque de los dedos, pero pronto los labios de Thor lo callaron al momento.

Thor lo besó fuerte, profundo y con ganas mientras lo sujetaba de sus cabellos oscuros, lo besó en los labios, las mejillas, mordisqueó sus ojeras y su cuello dejando marcas moradas sobre la piel azulada y lamió su pecho con ansias antes de volver a sus labios.

Thor solo lo dejó gritar en tres ocasiones, cuando sus fuertes brazos rodearon completamente y lo metió consigo a la cama.

La segunda vez fue cuando por fin pudo adentrarse en Loki y Thor jadeó casi tan fuerte como Loki gimió, las uñas se clavaron en su espalda bronceada y lo marcaron con líneas por toda su extensión pero eso parecía alentar más a Thor a continuar su labor.

La tercera y última, cuando llegaron a su clímax, afuera el clima era tal que poco faltaba para que los lagos se volvieran cristales de hielo pero la habitación era calor puro, Loki lo había desnudado completamente y aún así Thor sudaba igual, Loki no se quejó más del calor aún estando bajo las capas de sábanas. Thor dio un par de fuertes embestidas antes de que Loki gimiera satisfacción y encorvara la espalda al terminar, Thor lo hizo igual poco después con sus respiraciones pesadas resonando entre los muros de piedra antes de volver a besarse.