Eren

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"Miraba atentamente a su bolita de pelos que dormitaba entre sus brazos, se preguntaba tantas cosas pero quizás la más importante era qué nombre le pondría a su cachorro por que sí, era su cachorro.

El animalejo soltó un suspiro, en eso Levi vio como abría sus ojitos y se maravilló por lo que vio pues el cachorrito tenía unos ojos de color muy singular.

-Oh, nada mal-Dijo mientras ese par de irises turquesa lo miraban detenidamente.

En la manada era muy común ver hombres lobo con ojos de color café o negros pero los ojitos de ese cachorrito era únicos.

-Ya sé, te llamaras Eren-El cachorrito pareció comprenderlo pues movió su colita y le mostró lo que parecía ser una sonrisa".

Ese fue uno de los mejores momentos de su vida, el haber nombrado a su cachorro con el cual viviría de ahora en adelante.

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La casa estaba hecha un desastre y el culpable de ello estaba corriendo como loco por todo el lugar mientras que un joven de cabellera azabache lo seguía muy de cerca.

-¡CON UN DEMONIO MALDITO MOCOSO DE MIERDA, PONTE LOS PUTOS PANTALONES Y DEJA DE CORRER COMO DESQUICIADO!-Cada uno de los muebles eran pasados como si nada.

-¡No quiero usar esa asquerosa ropa humana!-El azabache sintió como una vena de su frente se alzaba.

-¡TSK SOLO PONTE LOS PUTOS PANTALONES Y YA! ¡SE NOS HARÁ TARDE PARA QUE VAYAS AL COLEGIO!-Pero el chico no daba su brazo a torcer.

-¡No, quiero ser libre!-El azabache entonces tomo un florero que estaba cerca y se lo lanzo al pobre chico quien solo sintió el impacto del objeto contra su cabeza.

-¡TE LO MERECES POR NO OBEDECERME!-El pobre chico esta boca abajo.

Entonces el azabache tomo a ese chico de los pies y lo arrastro por la casa mientras que lo llevaba hasta el baño, dejándolo encerrado ahí. Todos los días debía de repetir la misma rutina y es que por más que pasaran los años su cachorrito simplemente seguía comportándose como un niño mimado.

Escucho el sonido del agua de la regadera y satisfecho se fue hasta la sala en donde se sentó. Aun recordaba el tiempo pasado en el que ese chico era solo una bolita de pelos grises indefensa y sin embargo no se arrepentía de haberlo criado el solo.

Después de unos 12 minutos se escucharon los pasos de alguien que se acercaba hasta donde Levi estaba sentado.

-Ya estoy listo-Se veía a un chico alto, piel acanelada, cabello castaño y ojos turquesa que llevaba puesto un uniforme.

-Tsk solo espero que la puerta del cole no esté cerrada-Levi tomo las llaves de su carro.

-Porque eres tan severo conmigo, hermano-El chico seguía muy de cerca a Levi.

-Solo eres un cachorro pulgoso que no sabe obedecer-Salieron de la casa y abordaron el vehículo.

-Tu eres igual que yo, no por nada eres mi hermano-Emprendieron rumbo a su destino.

-Lo que sea-Aun era temprano pero Levi debía dejar a su cachorro en el cole antes de irse a trabajar como un simple humano más.

Condujo un buen tramo de camino hasta que llego a la dichosa preparatoria en la que estudiaba su cachorro, era una de las más prestigiadas en esa ciudad y muy cara pero a Levi poco le importaba lo único que deseaba era que su cachorro fuera feliz.

-Nos vemos a la salida, cuídate hermano-El pelicastaño bajo del automóvil.

-Cuídate Eren-Se despidió de su "hermanito".

De camino al trabajo Levi pensaba en su muchacho y en las cosas que habían enfrentado juntos desde adaptarse el uno al otro hasta mudarse de ciudad en ciudad con el fin de no levantar sospechas entre los humanos, pues Levi seguía viéndose como un jovencito aunque los años transcurrieran rápidamente.

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Las chicas lo miraban detenidamente y es que con el paso de los años esa bola de pelos se había convertido en un muchachito demasiado guapo.

Camino por los pasillos del lugar hasta que llegó a su salón de clases en el que se topó con Jean a quién consideraba su único amigo y es que a diferencia del resto de los humanos de ese lugar, Eren sentía que ese chico era diferente.

-¡Hey Jean! que haciendo-Noto como el ojimiel leía un libro.

-Hola Eren, ¿hiciste la tarea de mate?-A Eren se le abrieron los ojos como platos.

-¡Encargaron tarea!-Se llevó las manos a los cabellos.

-¡Típico de ti! Deja de estar en las nubes o reprobaras el año-Eren alzo los hombros.

-¡Bah! no es como si me importara-Se sentó al lado de Jean para ocupar su puesto dentro de la clase.

-Mhhh y ¿qué si se entera tu hermano?-Eren sintió como un escalofrió recorría su cuerpo.

-Pásame la tarea, porfa-Jean le extendio el libro.

-Mira, solo debes anotar esos números y leer el recuadro de la parte izquierda-El par de chicos estaban concentrados en lo suyo.

En eso, entro al salón una chica de cabellera azabache que capturo la atención de todos bueno, casi todos pues Eren y Jena ni siquiera voltearon a mirarla. Y es que esa chica era Mikasa, la capitana del equipo de porristas y la alumna con el mejor promedio en todo el cole.

La chica miro directamente rumbo al lugar de Eren y sonrió, camino coquetamente hasta llegar a su lugar y se detuvo frente al par de chicos.

-Hola Eren-Comento mientras se sujetaba uno de sus mechones de cabello.

-¿Qué quieres? Que no vez que estoy ocupado o estas ciega-Un silencio se hizo presente en el salón.

-Este fin de semana habrá un baile y quiero que seas mi pareja-Para cualquier chico hubiese sido un honor recibir esa propuesta por parte de la azabache pero...

-Pero resulta que yo no quiero ir contigo, además que clase de nombre ridículo es ese ¿Mikasa? En serio que tus padres deben odiarte-La muchacha se puso tan roja como el color de la bufanda que llevaba puesta.

-¡Como te atreves a faltarme el respeto de esa manera!-Pero Eren no era un chico común.

-No, cómo te atreves tú a acercarte a mí de forma confianzuda siendo que ni siquiera somos amigos, además estoy ocupado y tú me estorbas. Mejor lárgate a otra parte y déjame en paz Michoza-Jean solo contenía una risa entre sus labios.

-Chicos, siéntense en sus lugares-Mikasa no pudo decir nada más pues el profesor acababa de entrar en el salón.

La azabache se retiró del lugar con un inmenso coraje pues había sido humillada de la peor manera y es que hasta el momento Eren era el único chico que la rechazaba e inclusive ignoraba por completo.

"Me las vas a pagar Eren, te prometo que me las pagaras"



N/A: COMO EN TODO BUEN FIC ERERI, NO PUEDE FALTAR LA MICHOZA HACIENDO MAL TERCIO

BYE, BYE

"Mi vida eres tú"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora