𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚

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Kim Taehyung tenía veinte años cuando llegó a Rusia, Park Hoseok tenía veinticuatro años cuando vio al peliceleste por primera vez y creyó haber conocido a la persona más hermosa del mundo.

Taehyung era bailarín de ballet, desde niño había practicado siempre, el baile era todo para él, eso y su cachorro, quien por desgracia había muerto. Cuando terminó la secundaria, decidió seguir su sueño e ir a distintas academias en Seúl, se presentó en diversos teatros, era una figura en su país, tanto así que le recomendaron viajar a San Petersburgo, donde podían ofrecerle una beca en una de las mejores academias.

Fue en San Petersburgo donde conoció a Hoseok, una tarde fría y nevada que paseaba por las calles, fue derribado por un Pomerania , y detrás de él estaba el hombre más guapo que hubiese visto en su vida. Sintió un poco de vergüenza al estar en el suelo, pero las lamidas del perro solo le tranquilizaron, para luego dar paso a la melancolía al recordar a su antigua mascota.

Hoseok por su parte no salía de su asombro, el peliceleste tirado en medio de la nieve con Yeontan encima era una imagen casi sagrada. Se sentía torpe y embobado, le habían robado el aliento sin siquiera intentarlo. Así que le ofreció ayuda al chico, levantándolo del suelo, Taehyung estaba completamente avergonzado y solo podía mirar al piso mientras acariciaba al perro que no se quitaba de su lado.

—Oh, perdónanos, Yeontan es demasiado amoroso.—Hoseok sonreía e intentaba observar mejor al chico, a pesar de que este mirara al piso.

—No hay problema, me gustan los cachorros...

—¿En serio? Eso es genial, mi nombre es Park Hoseok, ¿Qué te parece si te invito a un café para que recuperes calor, eh?

Taehyung ni siquiera pudo pensar en su respuesta, pues el pelirrojo tomó su brazo y lo llevó a rastras hasta un lugar demasiado pomposo, una cafetería en el centro de la ciudad. El mayor hacía de todo para agradar al chiquillo, pero la timidez de este no le ayudaba mucho, además el menor se sentía demasiado incómodo, él nunca había sido muy bueno con las demás personas, su ansiedad hacía estragos y ahora mismo estaba a punto de tener un ataque.

Así que después de un rato, cuando ya ni les quedaba café, Taehyung dijo que debía marcharse. Hoseok se sentía mal por no haber logrado nada con el chico, pero se sorprendió cuando el peliceleste se inclinó sonrojado a darle un beso en la mejilla y dejar un papel con su número de celular sobre la mesa, para finalmente acariciar a Yeontan y salir apurado del lugar.

Después de eso, pudieron hablar mucho mejor por mensajes, Taehyung se sentía cómodo escuchando las ocurrencias del chico y le sorprendía lo talentoso que podía ser, Hoseok era un productor musical, y por lo que había visto en videos, era bastante bueno. El mayor le hablaba cada día, hacía planes para cenar juntos, solía ir por él a la academia de ballet, le invitaba a sus prácticas, aunque Yoongi se enojara. Fueron amigos cercanos por varios meses, Taehyung no conocía otro amigo más que Hoseok, pasaban todo el tiempo juntos, siempre hablando o riendo, ya hasta las caricias eran parte de la rutina. No saben en qué momento despedirse con un beso en los labios se había vuelto algo tan cotidiano.

En febrero, Hoseok invitó a Taehyung a un bar, en el día de los enamorados, para celebrar el cumpleaños de su amigo Jackson. Era una buena excusa para estar con el peliceleste en San Valentín, además el Tae y Jackson ya se conocían y se llevaban bien, solían hablar, aunque el pelinegro siempre acababa coqueteando. Esa noche las cosas se salieron un poco de control, Jackson animó a Taehyung para beber juntos, a lo que él no pudo negarse, olvidando por completo lo que ocurría cuando se pasaba de tragos.

Seis bebidas después, Taehyung estaba arriba de la barra moviéndose lentamente al ritmo de la música, animando a los otros presentes. Jackson no tardó en unirse y así ambos estaban dando un espectáculo apto solo para mayores de edad, quitándose poco a poco sus prendas con movimientos lentos y llenos de libido, haciendo que cierto pelirrojo sintiera demasiado calor. Luego de que Park les advirtiera de posibles accidentes, Taehyung estaba solamente con sus bóxers y su camisa, Jackson estaba a punto de quitarse la ropa interior cuando llegó un castaño a detenerlo.

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𝟱 𝗽𝗮𝘀𝗼𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗮𝗴𝗿𝗮𝗱𝗮𝗿 𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝘀𝘂𝗲𝗴𝗿𝗼𝘀 ➤𝗞𝗼𝗼𝗸𝗺𝗶𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora