Depende de nosotros

Capítulo III: Reencuentro

-Liam- dijo
-Narah- respondí
Los dos empezamos a correr hasta que estuvimos solo separados por unos cuantos centímetros y nos dimos un tierno y largo abrazo, me sentía bien... tranquilo, feliz, este era uno de esos abrazos en los que uno recupera energías, en donde uno siente que todo cambia para mejor. No se cuanto duro el abrazo, pero tengo que reconocer que ese momento ha sido uno de los mejores de mi vida.
Nos separamos, mientras nos mirábamos sonrojados, pero ambos sonriendo. No sabíamos como comenzar a hablar, ninguno de los dos esperábamos encontrarnos en este peculiar lugar. Ella mucho más centrada que yo me dijo -Vámonos, ya esta anocheciendo. Vamos hablando en el camino-
Después que dijo eso me hizo una seña para que la siguiera y eso hice. En el camino fuimos hablando de nuestra estancia en este lugar, cuanto llevábamos en aquel lugar y del como llegamos acá, ella me comento que cuando apareció a las horas de estar caminando por el sector se encontró con Hellä y que ambas llevaban tres días en el sector al igual que yo, esto ultimo de cierta manera me extraño, encontraba mucha casualidad que apareciéramos los tres en este lugar no solo por el hecho de que las conocía sino que también que lleváramos la misma cantidad de tiempo acá. Dejando de lado esos pensamientos, estaba sumamente agradecido que me hubiera encontrado con ellas.
Me comentaba que ambas habían hecho un refugio con unas cuantas ramas y unas hojas que habían entrelazado para poder hacer un techo de manera mas decente y que habían acolchado el lugar con hojas secas del lugar antes del día de lluvia, por lo cual estaban bastante cómodas, aunque no habían podido encontrar comida más que unas cuantas nueces que ya no les quedaban. Mientras me hablaba de esto último llegamos al refugio y ahí estaba Hellä la cual nos fue a recibir con gran entusiasmo, me dio un abrazo y me bombardeo de miles de pregunta, ¿Cómo estaba? ¿Cómo había llegado? ¿Cuánto llevaba?, etc. Me daba mucho gusto de ver a Hellä, la conocía desde que llego con su familia desde Alemania algo que era aproximadamente hace seis años. Era una de las personas más cercanas a mí y la única que sabía que me gustaba Narah, siempre me aconsejaba y me incitaba a que hiciera cosas con ella, aunque esto ultimo solo paso en pocas ocasiones ya que mayoritariamente me ganaba el miedo y lo nervios ya que sentía que podría incomodar o algo por el estilo.
Nos sentamos los tres alrededor de una fogata en donde respondí todas las preguntas que me tenía Hellä y conversamos de muchos temas. Mientras hablábamos me acorde que me quedaban unas cuantas bayas silvestres y se las di, estaban muy agradecidas ya que llevaban casi dos días completos sin comer. Le dije que como a unas dos o tres horas hay un sector con muchas bayas y les comente que más arriba había del valle había un lago en donde podríamos tratar de pescar algo para que podamos comer de mejor manera, a ambas les pareció genial la idea por lo cual mañana iríamos a buscar bayas y tratar de pescar. Después seguimos conversando, hasta que Hellä se despidió para irse a dormir. Ahí nos quedamos Narah y yo, ninguno de los dos tenía sueño así que seguimos conversando. Hace rato que con Narah no nos veíamos, ya que a pesar que íbamos en la misma clase ella se había tenido que ir de viaje por asuntos familiares, aunque su vuelta estaba programada pasada las mini vacaciones en la que estábamos.
Habían pasados dos meses desde la última vez que nos habíamos visto, me comento lo que paso durante estos dos meses y lo que había estado haciendo, después llego mi turno y pues bueno no tenía mucho que contar debido a que a pesar que no me gusta la rutina mi vida es super rutinaria, principalmente ya que como aún soy "chico" mi familia no me deja irme a hacer trekking o ir a partes que me gustaría conocer solo ya que decían que me podía pasar algo, entendía su preocupación ya que no soy bueno para contestar el celular y aparte siempre ando sin carga y por estas cosas entendía su preocupación ya que sería la de cualquier padre. Le comenté que antes de llegar acá justo estaba en medio de un viaje en el cual me dormí y al despertar ya estaba acá, en cambio ella me comento que se devolvía a donde se hospedaba, ya que había estado todo el día buscando su collar que el día anterior se le había caído -Casi me muero cuando me di cuenta que no tenía el collar, solo me decía a mi misma que lo tenía que encontrar , era mi collar favorito aparte fue el que encontramos antes juntos con los demás chiquillos-
Ella tenía un collar con el nudo corazón, el cual personalmente encontraba que encajaba perfectamente con ella, siempre se a caracterizado por su amabilidad y gran corazón, siempre ayudando a los demás, aunque estuviera agotada o tuviera que hacer un millón de cosas, si alguien la necesitaba ella estaría ahí ayudando. Su forma de ser fue lo que me enamoró de ella, aparte era una chica muy guapa e inteligente, para mí era perfecta.
Me conto como después de horas de búsqueda lo pudo encontrar, que se lo puso y empezó a caminar de vuelta a su hospedaje y que cuando paso por un sector con piedras piso mal, se resbalo pegándose en la cabeza y que al despertar ya se encontraba en este lugar.
Se levanto, nos despedimos de un beso en la mejilla ya que iba a entrar a dormir ya que se nos había hecho tarde conversando. Me dijo que después entrara no más al refugio ya que era espacioso y podemos dormir los tres de manera cómoda. Antes de que entrará me armé de valor y le dije:
-Buenas noches Narah, quizás no es la mejor forma de volvernos a ver, pero me alegro mucho verte... descansa que tengas dulces sueños, te quiero mucho-
Soltó una pequeña risa y tiernamente sonrío -También me alegro mucho verte, a pesar de la situación. Buenas noches y no te acuestes tan tarde, mañana necesitaremos harta energía. Te quiero- Y entro al refugio
Quizás muchos piensen que exagere al referirme que me armé de valor para decirle esa simple oración y si quizás fue una pequeña exageración pero decirle algo así me costaba mucho, a pesar que siempre se me ha caracterizado por mi seguridad y valentía cuando se trataba de mostrarle mis sentimientos me tendía a costar mucho, siempre me cohibía cuando quería hablar con ella, de hecho me daba miedo quedarme sin tema de conversación o aburrirla, las conversaciones que tuvimos hoy siendo sinceros fueron donde menos me cohibí y esto paso seguramente ya que teníamos muchos temas para hablar y por la gran alegría que sentí al verla, olvidando esos nervios que uno siente cuando esta con la persona que le gusta a uno.
Me quede afuera viendo las estrellas, pensando y analizando lo de este día, cuando me asalto un pensamiento sobre un hecho futuro. Algo que no me gustaba de mí, es que raramente podía disfrutar la actualidad, generalmente tendía a pesar en el futuro y en lo que iba a suceder. Pensaba que después de salir de acá y estar en casa nuevamente solo quedaría un mes de clases, luego las vacaciones y finalmente la universidad... esto último me daba terror, pero no por las nuevas responsabilidades o algo por el estilo, sino que me daba miedo que al entrar acá perdiera todo contacto con Narah ya que estudiaremos cosas distintas y en todas las charlas universitarias que nos iban a hacer siempre nos decían que las amistades del colegio desaparecen y que nunca más se vuelven a ver... me daba miedo que eso me pasara con Narah, siempre que pensaba en eso sentía un gran dolor en el corazón, un dolor del alma y generalmente se me caían unas cuantas lágrimas, aunque esto nadie lo supo ya que solo lo hacia cuando estaba solo, antes de dormir en mi pieza, abrazando mi almohada. Esta vez no quería llorar, quería "aprovechar" y "disfrutar" el momento dentro de lo que sea posible, estoy en un lugar hermoso con la chica que me gusta y no iba a permitir que mis pensamientos y negatividad me arruinara el momento. Miré nuevamente al cielo, sonreí y me prometí a mí mismo que iba a disfrutar este momento; no será la mejor situación, pero estoy con dos personas que me importan. Me levante y entre al refugio, prácticamente al minuto me acostarme me dormí, me dormí sonriendo estaba en un lugar maravilloso con la chica que me gusta.