Capítulo I: ¿Donde estoy?

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Desperté, quedé anonadado. Empecé a sentir un cumulo de distintas emociones... sentía temor, alegría, curiosidad, ansiedad, nerviosismo, etc. No sabía que hacer o cómo lidiar con lo que pasaba más el mar de emociones que sentí de choque, además mi mente se estaba llenando de muchísimas preguntas las cuales no podía responder lo que provoco que la ansiedad que tenía al inicio aumentara enormemente... solo atine a seguir sentado abrazarme sobre las piernas y tratar de relajarme, a los minutos ya me había podido centrar nuevamente y ya estaba ordenando mis pensamientos para saber que hacer a continuación. Primero decidí evaluar la situación estaba en un lugar desconocido sin saber cómo llegué a este mismo, teniendo solo la ropa que tenía puesta al momento de tomar el bus. Debo reconocer que viéndole el lado bueno a la situación algo que hace poco había empezado a hacer, ya que antes siempre se me caracterizaba por ser pesimista ante cualquier evento,  pero gracias a esa persona que se caracterizaba por ser positiva y a pesar de que en ocasiones todo estuviera en contra, ella con una sonrisa decía "vamos, se que funcionara o por lo menos lo intentamos" siempre veía el lado positivo de cada situación, funcionara o no lo que planeaba, de todo sacaba algo bueno. Retomando lo que decía trate de verle el lado bueno a la situación, estaba en un lugar muy bello. Al frente mío se encontraba un hermoso lago de aguas turquesas, atrás de él había grandes montañas con nieve y detrás de mi rodeando también el lago había un bosque de pinos. Me quede sentado, contemplando el paisaje... era raro esta era una de las primeras veces en la que podía sentir paz, a pesar de tener muchas dudas que quería resolver, me sentía liberado de la monotonía de la realidad... me sentía feliz.
Me quede en ese estado un tiempo, no sabría decirles si fueron unos minutos o unas horas, pero cuando ya volví en si decidí continuar con lo que había pensado anteriormente, tenía que moverme. Me pare y observe el lugar nuevamente, al estar al lado del lago no me debía preocupar por agua, solo me faltaba ver el tema de un refugio y comida. Empecé a caminar hacia el bosque, era un terreno bastante agradable con una gran diversidad de aves las que tenían un bello cantar lo que hacia mucho mejor la caminata. No se cuanto camine hasta que encontré una pequeña cueva que me serviría para poder pasar la noche, trate de calcular la distancia que me separa del lago, pero al ver ido caminando de manera tan distraída me fue imposible hacerlo.
Descanse un poco y camine por el sector donde me encontraba, a unos cien metros aproximadamente encontré unas bayas silvestres y debido a que ya se estaba oscureciendo decidí ir a la cueva. Comí unas cuantas bayas esperando que no me cayeran mal, ya que si pasaba eso sí que estaría perdido. Mientras me devolvía aproveche de traer unas cuantas ramas que estaban en el suelo, un pedazo de corteza y maleza seca que encontré para tratar de hacer una fogata, la cual después de diversos intentos no pude lograr y esto me incomodaba mucho, ya que no me gustaba la oscuridad debido a que me hacía sentir muy vulnerable. Entre a la cueva y trate de conciliar el sueño algo que tampoco pude, decidí irme a la entrada de la caverna para meditar lo que pasaba, estaba en un lugar desconocido sin saber como llegue ni como regresar, pensé en diversas respuestas y con el pasar del tiempo cada vez eran mas fantasiosas... en un momento dado, mientras seguía tratando de buscar respuestas mire hacía arriba y todo era muy maravilloso... nunca antes había visto un cielo tan estrellado, no sabría muy bien como describir lo que veían mis ojos más que era algo esplendido, al saber un poco de astronomía pude identificar a Júpiter y Venus (o Marte, no estaba muy seguro ya que siempre los tendía a confundir) que justo se veían en el firmamento, a pesar que antes de llegar acá había tenido la posibilidad de viajar a muchos lugares nunca había podido presenciar un cielo como esto. Lamentablemente la felicidad y alegría que me había sacado de mis pensamientos rápidamente cambio y se transformo en nostalgia... siempre había querido ver algo tan lindo como esto con alguien, en todos mis viajes y aventuras, aunque estuviese acompañados de otras personas, ver las estrellas siempre lo hacía solo y siendo sincero en estos momentos sentía miedo ya que quizás eso no lo podría llegar a hacer, ni siquiera sabía donde estaba o si hay otras personas en mismo lugar en el cual me encontraba.
Acosado por preguntas y algunos miedos, me adentre a la cueva obligándome a dormir, algo que me costó enormemente pero que al final lo pude logre. Viaje al mundo de los sueños donde todo teóricamente es posible y mejor, sinceramente solo estando en este mundo es donde podía decir que era verdaderamente feliz.

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