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Había bastante gente frente al Castillo de las Gangas.
Me acerqué al balcón de dicho castillo, desde el suelo podía observar a mi madre, maléfica, la miro desafiante, sin que ella llegue a notar mi presencia.
-¡Maléfica!- Grita mi padre desde la muchedumbre
Los cuatro chicos que habían sido seleccionados giran hacia él, observando quién se atrevía a desafiar a la señora de las tinieblas.
-Oh, Hades, que gusto verte por aquí... ¿por fin sales de tu caverna? ¿A que vienes? ¿Vas a ver como logré triunfar en vez de ti?
-Que chistosa, solo vengo a despedir a mi hija- por primera vez la gente notó mi presencia.
-Que yo sepa esa bastarda no va a ir a ninguna parte, volverá a esa pocilga que tienes de casa ¿crees que llegarán muy lejos?
-Maléfica, Maléfica, Maléfica... noto que no recuerdas nada, nada de lo que ocurrió hace dieciséis años...
Mal se acercó a mi lentamente, sentía una cierta incomodidad.
-¿Sabes de que está hablando?- se notaba de lejos que mi hermana no estaba al tanto de nada.
-Ella- Mi papá me señaló fijando la atención de todos en mi- También es tu hija.- Mal me miró sorprendida y se quedó quieta en su lugar, Evie, Jay y Carlos, al lado de la limusina, hicieron lo mismo.
-¿Somos hermanas?- Preguntó Mal en mi oído
-mas que eso, Mal, somos gemelas- respondí rápido
Centré mi vista de nuevo en Maléfica.
Ella estaba como sin palabras.
-¿Y tu pobre hija? ¿No le preguntaste que es lo que quería? Seguramente es una débil, como tú, y quiere quedarse contigo porque no podría llevar una vida sin ti, ugh, que cursi.- Alguna gente río con sorna, lo que me resultó molesto
-Solo quiero reclamar lo que me corresponde, yo también soy tu hija- Respiré y la miré profundamente a los ojos- Tengo el mismo derecho que Mal a tener una mejor vida- miré alrededor- quizás te suene demasiado cursi y débil, pero en el fondo, no te odio, no, al fin de cuentas, me diste la vida, aunque no lo reconozcas- Dije antes de girar y entregar mi bolso al chofer y pararme a un lado de la limusina.
-Adiós mamá, no te puedo decir que voy a extrañarte porque apenas te conozco- dije acercándome a mi papá.
-Adiós papá,- bajé el tono de voz- trataré de enviarte una carta o algo parecido, te voy a extrañar.- Dije dándole un beso en la mejilla.
-Yo también voy a extrañarte, Halla.- Ya estaba subiendo a la limusina cuando me detiene- Espera, llévate esto, es mi brasa, no se si podrás sola con ella, pero si lo haces con tu hermana seguro vas a poder- no podía creer que mi papá, Hades, me esté dando su más preciada posesión para que la use y la comparta con mi hermana, casi una desconocida.
-¿Por qué haces esto?-pregunté mirando a Mal unos metros más lejos mío.
-Lo hago por ustedes- suspiró- la gente puede ser cruel a veces, y, no deben hacerle nada a nadie pero, no me perdonaría que algo les pase teniendo yo un arma para que se defiendan.
-Gracias papá, a veces creo que haces mucho por mi.
-Eres mi hija, Halla- Dijo abrazándome.
Ingresé al coche y Mal detrás mío, la puerta se cerró dejando todo en un silencio muy incómodo.

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⏰ Última actualización: Dec 29, 2019 ⏰

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Lo que me corresponde~ 𝕕𝕖𝕤𝕔𝕖𝕟𝕕𝕒𝕟𝕥𝕤 ~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora