la distancia entre tu y yo

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Hola! Muchas gracias por sus votos y por darse la oportunidad de leer mi historia. Les deseo un feliz año nuevo y les dejo un pequeño capitulo

En Sunagakure

Dos meses después de la boda del héroe de la hoja el interminable papeleo mantiene ocupado a Gaara, como es habitual para el la administración de la aldea ocupa la mayoría de su tiempo. El ir y venir de sus ocupaciones no le impide sacar de su cabeza un cabello atado en dos moñitos y un par de ojos castaños que lo atraparon desde su última visita a la hoja.

Gaara no era un hombre que podía jactarse de ser un experto en mujeres. Aunque era muy popular entre ellas desde hacía un tiempo. Su semblante serio, su carácter fuerte como líder y su cambio a la adultez habían contribuido a qué muchas chicas jóvenes de la aldea y una que otra extranjera pusieran sus ojos en el. Algunas más atrevidas que otras. Pero la respuesta siempre había Sido la misma. Gaara no tenía cabeza para pensar en el sexo femenino, su vida la había dedicado a servir a su aldea y aunque su padre a su misma edad ya estaba casado el era diferente. Por mucho tiempo la única mujer que merecía un pensamiento y Cariño de su parte era Temari, su hermana mayor. Sin embargo todo esto había cambiado desde ese par de días que había pasado en Konoha. El solo recordar a la kunoichi maestra en armas lo hacía sonrojarse. Recordar su sonrisa, lo bien que lucía en ese entallado vestido que el mismo le había regalado, siendo este el impulso más grande al que había cedido en su vida, recordar el cálido cuerpo de Tenten junto al suyo compartiendo la cama y su bella cara al despertar. Definitivamente Tenten se había metido en sus pensamientos y no sabía cómo escapar.

Había tratado sin éxito de desviar sus pensamientos hacia otro lado pero era imposible. Cada cosa, cada objeto le recordaba un poco a ella. Se sentía tonto al pensar que tal vez ella ni siquiera pensaría un poco en el. Podría haberle enviado una carta, preguntarle a Temari por ella. Pero el era Sabaku No Gaara no un rock Lee enamorado acosando a Sakura. Siempre había sido un hombre que pensaba bien las cosas antes de hacerlas. Y como muchas noches se volvió hacia el ventanal de su oficina pidiendo al universo una señal. Debía olvidarla y seguir como si nada hubiera pasado?

En Konoha

Despues de un largo día de entrenamiento con Lee una cansada castaña se relaja en la tina. Esa tarde Lee le había contado sobre una linda chica la cual había conocido al ayudarla a bajar a su desafortunado gato de un alto poste. La chica había quedado tan agradecida con el ninja de mayas verdes que lo había invitado a comer a su casa al día siguiente. Una semana después Lee se había vuelto inseparable de la joven. Tenten se preguntaba si está vez realmente Lee había encontrado el amor. Salió de la tina y al abrir el closet para buscar una pijama limpia se encontró con el vestido que había usado para la boda de Naruto y Hinata. Con un sonrojo recordó al hombre que amablemente había pagado por el. Cada vez que el Kazekage de la arena era mencionado o recordado por ella un sonrojo aparecía en sus mejillas.

-Gaara. Susurro para ella misma. Se preguntaba que estaría haciendo en ese momento, tal vez aún en la oficina. Por la boca de Temari sabía que era un hombre muy dedicado a su tarea de lider de la aldea de la arena y solía estar hasta tarde en su oficina. Se cacheteo mentalmente. Debía dejar de pensar en el, en ocasiones anteriores se había obligado a aceptar la realidad. Los días que convivio con el hacia meses no fueron más que una misión, el fue amable con ella por educación y ella jamás debía pensar en el como un hombre. Ella era una simple kunoichi, no pertenecía a una familia de alto rango como Hinata y no podía aspirar a ser más que una simple conocida del kazekage de la arena. Una lágrima traicionera recorrió su rostro mientras se preparaba para dormir. Mañana sería otro día. Otro día más en su rutina habitual.

Inesperado (Gaaten)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora