○CAPITULO 19○

571 43 11
                                    

~

Todo estaba en silencio, ella solo tenía una mirada triste, ni siquiera abrió la boca para responder mi pregunta, y eso me molestaba, podría decir que no sé por qué me molesta, pero mentiría, aunque me cueste admitirlo estaba celoso, con dudas, de alguna forma sabía a que se refiría a su novio, no podía culparla después de todo no tendría que enojarme porque lo haya besado a él, ¿pero entonces?

*¿POR QUÉ ME BESO A MI?*

*¿POR QUÉ TUVO LA NECESIDAD DE AVERIGUAR DONDE VIVO Y BESARME DESPUES DE HABER BESADO A SU QUERIDO Y MALDITO NOVIO?*

*¿POR QUÉ ESTE SENTIMIENTO TAN NUEVO ME AFECTA TANTO?*

Estaba lleno de preguntas y sabía que no obtendría preguntas, por ahí nunca las tendré, ¿pero está mal querer tener respuestas para no sentirme como me siento ahora? ¿hay forma de regresar al pasado para poder evitar esas últimas palabras que salieron de su boca?

Sentí su mano posarse arriba de la mía, al mirarla me habia dado una media sonrisa, que no pude corresponder, no podia fingir, esto no, los sentimientos no puedo fingirlos.

- Kai llegó ayer, el se ha hospedado conmigo y Rose - me solté de ella y me levanté de aquel sofá, no quería verla, sabía que si lo hacía la besaría porque a pesar de lo que escuché quería seguir saboreándola a ella y tenía que detener ese impulso, no podría luego vivir con la culpa de que por mi ella fue infiel, aunque de alguna forma ya lo fue, pero había que parar.

- No pasa nada - respiré profundamente, en estos momentos debía actuar con adultez como lo he hecho la mayoría de veces - bien volviendo al tema de antes, perdón por no contestarte los mensajes y las llamadas últimamente tengo muchas cosas que hacer, pero prometo que ya no pasará - me dirigí al ventanal del departamento,y me quedé viendo la cuidad de Nueva York que estaba siendo iluminada por una gran inmensa luna llena y las pequeñas estrellas.

- Oh esta bien - su voz estaba apagada, sentí sus pasos acercase a mí - lamento lo del beso.

- No tienes que disculparte, entiendo que estes confundida - a través del ventanal vi su reflejo, notando que ella estaba al lado mío.

- ¿Por qué actúas distante conmigo? - giré mi rostro para verla.

- Mira Jen, no quiero que por mi culpa tu vida sea complicada, no quiero que luches con tu mente, por si esta bien besarme o no, porque estas de novia y eso hace que pienses más sobre esas cosas - hice una pausa - mira te entiendo, de seguro estas confundida porque nunca te imaginastes todo este lío, pero yo tengo claro lo que me pasa y es me gustas, cuando sepas que es lo que quieres te escucharé y lo aceptaré, mientras tanto seguiremos saliendo a lugares como amigos después de todo solo nos acabamos de conocer hace una semana - sonreí - hay que salir mucho y conocernos más, aprovechar todo el tiempo que podamos, antes de que vuelvas a los Ángeles.

- Gracias - su roatro parecía más relajado - sabes todo esto parece tan raro, tan solo más de una semana y haz cambiado mi vida - sonrió - es como si estuviera planeado ¿no te parece?

- Puede ser - volví mi vista al ventanal, cuando ella sepa que todo esto en realidad estuvo de verdad planeado solo para enamorarla y con eso escribir un artículo para obtener un puesto con Min YoonGi, me odiará, y lo más probable es que no pueda sacarla de mi cabeza aunque me quiera fuera de su vida.

- Bueno será mejor que me vaya es tarde.

- Si quieres puedes quedarte, hay una habitación de huéspedes.

- No quiero molestar - dijo con una sonrisa tímida.

- Tú nunca molestas - los dos sonreímos al mismo tiempo, me encantaba ver cuando sus pómulos en sus mejillas se marcaban le hacían ver más adorable.

Estaba acostado, solo pasó media hora después de que dejé a Jennie en la habitación de huéspedes, intento dormir pero no puedo, me levanto y voy a la habitación de Taehyung, esté estaba profundamente dormido, me acerco y me siento en su cama estando a lado de él, pongo mi mano en su espalda y lo remuevo un poco.

- Hyung ¿Puedo acostarme contigo?

- ¿Mmmm? - dice medio dormido, levanta su rostro para verme, su pelo esta todo despeinado y hace que suelte una leve risa - ¿Jennie ya se fue?

- No ella se quedará a dormir en el cuato de huéspedes - Taehyung se volvió a recostar mirando al lado contrario de donde estoy sentado.

- Ve a su cuarto y duerme junto a ella.

- ¡No puedo hacer eso!

- Inténtalo si te dice que no, vuelve y te dejo dormir conmigo.

- ¿Lo prometes?

- Sabes que siempre cumplo, así que hazle caso a tu Hyung y anda con Jen - dice medio dormido, me levanto de su cama y voy al cuarto de Jennie, antes de entrar toco a su puerta suavemente, si ella no responde volveré con Tae.

- Pase!! - mi corazón esta latiendo rápidamente, estoy nervioso siento que me echará. Abrí la puerta despacio y asomé la cabeza, encontrándo a Jennie recostada contra el respaldar de la cama y con la luz de la mesa a su lado encendida - ¿Pasó algo? ¿Quieres que me vaya? - ella se estaba por levantar.

- NO - la detengo - solo...- las palabras no quieren salir de mi boca así que me pellizco suavemente el brazo como forma de ayuda - no podía dormir y quería saber si puedo dormir contigo - ella me mira sorprendida - perdón lamento preguntarte eso, no vuelvo a molestarte - retrocedí un poco para cerrar devuelta la puerta.

- ¡¡Kookie ven!! - parpadeo un par de veces y decido entrar para saber si no escuche mal - puedes dormir conmigo - me sonríe.

Estábamos mirando al techo, si antes no podía dormir ahota mucho menos, ella parecía estar igual que yo, el silencio esta presente como muchas veces lo está entre nosotras.

Siento un movimiento, giro para ver que es pero es Jennie poniendose al costado para dormir.

- ¿Kookie me abrazarias? - la miré, ella está de espaldas a mí, solo asiento y sonrio porqué quede como tonto por haber asentido sin que ella me viera.

- Claro - me acerco a ella y paso mi brazo por su pequeña cintura apoyando mi mano en su vientre, su mano ahora esta sobre la mía y ella entrelaza nuestros dedos.

- Gracias...- escucho que dice susurrando.

- Gracias a tí... - respondo de la misma manera.

~

Treinta Días Para Enamorarla | JENKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora