Simplemente Tú

Capítulo 2

-Hace unos dos meses mi hermano esta viviendo conmigo en mi departamento, lo invite a vivir conmigo porque esta atravesando un divorcio y se sabe que ese proceso desgasta físicamente como mentalmente y mi hermano necesita todo el apoyo posible, se que es un hombre fuerte que puede con todo pero se que en estos momentos requiere todo el apoyo posible; se que nuestros padres le dan toda la contención posible que un padre y una madre pueden brindar, pero ellos están en Puerto Rico, pero se que ellos están pendientes de Antonio y de mi. Y toda esta situación se torna muy interesante porque hace años que no compartíamos un espacio en común, cuando éramos niños todo el tiempo estábamos haciéndonos bromas, volvíamos locos a nuestros padres, a pesar de las bromas de hermanos siempre fuimos muy unidos; cuando ya fuimos mas grandes esa unidad no se perdió y gracias a esa unidad nos convertimos en confidentes del uno al otro y eso se mantiene hasta los días de hoy con mi hermano nos llevamos solo cuatro años.

Cuando Antonio cumplió recién los veintiún años decidió entrar a la policía y cuando cumplí los veintiún años también decidí entrar a la policía porque mi objetivo siempre fue convertirme en detective desde pequeña quise ser una gran detective. Cuando Antonio se gradúo de la escuela de policía, inmediatamente quiso convertirse en detective; cuando mi hermano estaba en su primer caso de encubierto conoció al sargento Hank Voigth quien estaba buscando a un nuevo detective para formar parte de la nueva unidad de inteligencia del distrito veintiuno de Chicago, cuando mi hermano llevaba cuatro años en inteligencia yo me uní, necesitaban a una detective para entrar de encubierto a un club nocturno, yo en ese entonces estaba trabajando con los de antinarcóticos, pero solo estaba haciendo trabajo de escritorio me aburría muchísimo porque yo se que doy mucho mas como detective, siempre me daban la excusa de que era nueva y no tenia experiencia, pero se que por ser mujer me veían débil pero les demostré de lo que estoy hecha cuando fui contactada por el sargento Hank Voigth, sabia de su reputación pero sabia que él era el mejor haciendo su trabajo, en fin al momento de conocerlo me pareció una persona sin tacto a la hora de dirigirse a los demás, porque lo primero que escuche de él fue que era una detective sin experiencia, yo solo le dije que era un maldito y después le demostre que era la mejor haciendo mi trabajo, en simple palabras le calle la boca...

De esos acontecimientos han pasado cuatro años, hoy en día inteligencia es una familia, pero últimamente estoy teniendo sentimientos por Hank Voigth, si estoy sintiendo cosas por el sargento Hank Voigth, esto me complica porque en primer lugar es mi jefe, es mayor que yo, pero para mi el tema de la edad no es importante pero no se que pensar, por la misma razón pedí unos días de permiso en inteligencia, en estos momentos estoy tomando un té mirando a la nada, estaba tan sumida en mis pensamientos que no sentí que Antonio había llegado a casa. solo se sentó a mi lado-

- ¿ Me vas a decir hermanita que te sucede?

- Siento que no puedo controlar mis sentimientos, hermano no puedo controlar lo que siento por esta persona, me siento como adolescente, ¿ Que me recomiendas hermanito?

- Solo dile a Voight lo que sientes hermana querida.

- A veces olvido que eres detective hermano querido...