Definitivamente lo mejor que le gustaba en la vida a Seokmin era pasar tiempo con su novio.
Le encantaba hacer de todo con Jun. Todo. Pero habían ocasiones en las que no le encantaba estar con Jun.
Por ejemplo acompañarlo al asilo. Prefería mil veces acompañarlo a la biblioteca que al asilo.
—Talla más abajo, muchachito— un señor de edad avanzada pidió a Seokmin, quien asqueado hacía su mayor esfuerzo por bañar a los abuelitos. No entendía como Jun podía hacer esto cada lunes y jueves.
—Ya voy abuelo— siguio las órdenes no conforme, pasando el extenso cepillo de madera por la espalda arrugada. En su mente hizo comparaciones de la espalda que tallaba, sin ganas, con la espalda de su novio. De solo imaginarse la delgada espalda de Jun se ponía duro.
A lo lejos Jun, solo sonreía por el gran esfuerzo de su novio. Era consciente de que Seokmin no era fan de hacer esto y no lo hacía para recibir algo a cambio, lo hacía por Jun.
[...]
—Muchas gracias por acompañarme, Min— sonrió recostando su cabeza en el hombro de Seokmin.
Las despedidas eran lo que menos le gustaban hacer con Jun. Estando fuera de casa de Jun, ambos solo se encargaban de disfrutar el tiempo.
—No es nada, bebé— besó la frente de Jun—. Aunque no me pidas que lo haga, lo haré.
Jun levantó la cabeza y unió sus labios con los de su novio, pasó sus manos por el cuello contrario, sintiendo como su cintura era rodeada por dos grandes manos.
Movian sus labios en sincronización lentamente, reconociendo al instante cada rincón y sabor. Reconociendo el amor que se sentían y daban.
La puerta de la casa de Jun se abrió y por ella salió el padre del mismo.
El señor Wen carraspeó, logrando que se separaran—. Jun, ¿podrías dejarme a solas con Seokmin un momento?
Jun le dio un pequeño beso y alejándose de su novio, entró a su casa.
—Seokmin— incómodo pronunció el nombre.
—Señor Wen, buenas noches— saludó cortésmente como siempre hacía.
—Buenas noches— murmuró asintiendo—. Verás, yo solo quería agradecerte— con rapidez habló, era la primera vez que era sincero con él—. A pesar de todas las cosas malas que hiciste como las veces que te lleve preso, o que tus drogas fueron confiscadas o aquellas veces en las que manejabas borracho rebasando los límites de velocidad, ¿recuerdas? Fueron varías.
Avergonzado asintió recordando como si de buenas anécdotas se tratasen.
—O cuando participabas en carreras clandestinas— al notar la incomodidad de Seokmin decidió parar—. Bueno, son muchas, pero sí, quería agradecerte.
—¿Puedo preguntar el porqué esta agradecido conmigo?— liberó intrigado esperando por una respuesta.
—Oh bueno, ¿recuerdas cuando comenzaste a salir con Jun?— Seokmin asintió nostálgico—. Bueno, siempre insistias en que cambiarías tu actitud de... amm, ¿sonará muy exagerado si te llamo criminal?
—Como usted guste llamarme esta bien, no era la mejor persona en ese entonces— alzó los hombros tratando de verse indiferente.
—No, si suena muy exagerado si te llamo criminal— a pesar de la respuesta que obtuvo, podía notar que no le gustaba ese adjetivo.
—Sí, definitivamente lo es— asintió estando de acuerdo.
—Retomando el tema, es que lo hiciste, cambiaste esa mala actitud por Jun— admitió sincero—. Nunca creí que ese mismo chico que hacía cosas malas cambiará por un chico que hace obras de caridad.
Seokmin movió la cabeza de arriba hacia abajo lentamente. El tampoco creía haberse convertido en otra persona. Tal vez si no cambió mucho pero había una gran diferencia entre golpear a la gente en un pasado a golpearla en su mente porque había aprendido a controlarse.
—Créeme que me ponía nervioso saber que el primer novio de mi hijo era un vándalo, no sabía que podría pasar con Jun. Si se volvería malo o saldría lastimado pero ninguna de las dos sucedió— paró un momento su hablar—. Y déjame decirte que estoy orgulloso de ti, no se cuán enamorado estés de Jun pero me hago una idea de tu amor infinito por él. Te la pasas casi todo el día con él.
Seokmin sonrió emocionado. Nunca creyó que el señor Wen le dirigiera esas palabras. Bueno, en un futuro tal vez esperaba que las diga en su boda con Jun pero no de tal manera.
—También permíteme ofrecerte una disculpa. Pensé que solo jugarías con el corazón de Jun pero me di cuenta que lo conservaste como si tuvieras un gran tesoro.
Un silencio se hizo dejando oír el rápido palpitar de Seokmin.
—Bueno, deberías entrar y quedarte— sugirió seguro—. A Jun le daría gusto estar contigo.
Y como si se hubiese sacado la lotería, no pudo evitar abrazar con emoción al señor Wen, levantando lo en el acto.
—Lo siento, lo siento— se disculpó bajando al de mayor edad—. Es solo que me emocioné, eso es todo.
Y si lo estaba. Era el mejor día de su vida, bueno tal vez no el mejor en toda su vida pero estaba feliz. Feliz de por fin después de 3 años ser aceptado por el señor Wen. Feliz de tener un hermoso y lindo novio.
Cuando se proponía algo, ponía todo su empeño en él. Y se propuso ser mejor persona por Jun. Logrando lo con el paso del tiempo.
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Díganme que no soy la única que le pareció ridículo pero luego si uso zepeto igual😣 porque recién me cayó que en 21 días iré al ode😭❤ según yo sigue siendo dcmbr 26 y me fije que hoy es 28 ahhahah Well this is weird pero me iré a dormir ya uwu ahhahah
