Mara Jade ▷Luke Skywalker

ᴛʀᴀᴍᴘᴀ

⌠I ᴀᴍ ᴛʜᴇ ᴍᴏɴsᴛᴇʀ ʏᴏᴜ ᴄʀᴇᴀᴛᴇᴅ⌡

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Podría ser el día más brillante, del planeta más resplandeciente, pero aún así la oscuridad la perseguía a dónde fuera. El lado oscuro estaba de su parte y enorgullecida se preparaba para hacer frente a lo que más deseaba: Matar a Luke Skywalker.

Cómo miembro de la corte de Jabba el Hutt, nadie sospecharía y sería la coartada perfecta, no más que una simple y bella bailarina de Tatooine.

Los susurros de su maestro inundaban su mente, cada paso que la joven diera él mismo se encargaría de aconsejarla tras ese vínculo que ambos tenían. Sus inquietudes eran nulas, pues había mandado a su joven aprendiz a otras misiones previamente, pero esta aunque no tan diferente de las otras, los tintes personales que rodeaban a esta misión hacían a la mujer más peligrosa. Su envidia hacia Lord Vader, provocaba que el corazón de ella fuera llenado cada vez más de odio y por consiguiente, mas unida al lado oscuro.
Tal vez reiterando sus prioridades, lo que más deseaba, era que Vader traicionara al emperador, así ella podría asesinarlo sin consecuencia alguna. Para por fin tomar su lugar y que nadie estuviera sobre ella para ser la mano derecha de su maestro.

Había visto llegar a dos androides que anunciaban la pronta llegada de su amo Skywalker, para luego ser entregados como obsequios al mismo Jabba. Aguardaría lo necesario, tenía la seguridad que a quien buscaba se presentaría, pues había descubierto que el carbonitado Han Solo, era su amigo personal, además de haber enviado formalmente a los droides para considerar un acuerdo.

Esa misma noche, justo como se esperaba, interceptaron el palacio de Jabba con la intención de liberar a Solo, los que lo intentaron fueron aprendidos, entre ellos Skywalker.

Al fin podría ponerle un rostro a aquel nombre que Darth Vader tanto le obsesionaba, un joven de tez blanca, cabellos rubios y ojos azules; Descripción que trataba de no olvidar hasta que haya terminado con su vida y así su maestro estaría complacido por otra de sus misiones cumplidas.

No tenía oportunidad de sobrevivir a la bestia del foso al que había sido arrojado, similar a la bailarina que Jabba arrojó horas antes y no corrió con mucha suerte. Sorprendentemente, logro matar a aquel monstruo, pero lo que le esperaba no tenía comparación con lo anterior. Así que la joven no quería perder la oportunidad de por fin cumplir con el propósito de su visita. Pero había un problema, una mujer había puesto su ojo en Mara, la miraba y la seguía de forma sospechosa, le tomó algunos momentos para después descubrir que importancia tenía ella en toda la situación.

Melina Carniss, ese era su nombre, un miembro del grupo de la seguridad secreta del Hutt, sospechaba que la pelirroja quería asesinar a Jabba cuando esta se le acercó secretamente e intentó convencerlo por medio de la fuerza para dejarla ir con él en su barcaza velera de lujo. Desgraciadamente fue abandonada en el desierto poco antes que Skywalker realizara su escapatoria del gran pozo de Carkoon. Si hubiese estado allí presente podría haber evitado que Luke escapara.

Su furia incremento al ver cómo tan cerca de lograr su cometido, había terminado tan lejos por un error. Se golpeaba la cabeza contra la pared con frustración al saber que por primera vez en mucho tiempo, había fallado.
El emperador estaba decepcionado, pero no tenían tiempo para remordimientos. Otra misión la esperaba en Coruscant, posiblemente uno de los planetas más influyentes e importantes de la galaxia, una misión de espionaje y asesinato, si era necesario. Tendría otra oportunidad de no fallarle una vez más al emperador, pero lamentablemente no habría otra oportunidad para matar a Skywalker, por el momento.

Antes de regresar a lo que sería la segunda estrella de la muerte, que aún no finalizaba su construcción. Un disturbio de la fuerza llamó su atención, un sentimiento repentino que hablaba casi por si solo.

Por primera vez sintió la fuerza como nunca la había sentido, gritos ahogados se le manifestaron, su mente ahora estaba en completo caos. Una visión se le presentó, su maestro perecía.
Vader y Luke estaban presentes y le pareció que los dos, juntos, asesinaban a Palpatine. Solo una última frase le perforó los tímpanos como un disparo, la que sería la última frase de su maestro:

"Matarás a Luke Skywalker"

Lo que no sabía, es que aquello que veía, solo era una ilusión. Una mentira creada por Darth Sidious para manipularla.
Su dolor por perder a su maestro lo reprimía con odio e ira, como bien le habían enseñado, cerro los ojos con fuerza callendo al suelo. Una breve vibración recorrió su cuerpo, sabía que la llamaban, la fuerza le susurraba casi tal sutil como una ráfaga de viento.

Sintió la destrucción del arma de planetas. La flota rebelde había penetrado la estrella de la muerte y lograron destruirla desde el interior, marcando así el inicio de la caída del Imperio.