𝙱𝚎𝚜𝚝 𝙵𝚛𝚒𝚎𝚗𝚍𝚜 🍁 𝙿.𝙹𝙼

Capitulo 5

Horas después...

Cerré la puerta sin importarme la bulla que hiciera con esta, me dirigí hasta la cocina y lance mi morral sobre el mesón, abrí bruscamente la nevera para tratar de encontrar cualquier tipo de snack, y tome rápida cualquier cosa que pude conseguir. Hoy estaba molesta, sí, ¡molesta! A mi Omma le pareció una "grandiosa" idea que saliéramos con Roseanne. ¿Que sigue? ¿Que ella nos lleve a las compras navideñas? ¿Que nos lleve a fiestas adonde vendan drogas? ¿Que la acompañemos a la carcel? O no... ya sé ¿¡Que nos adopte!?

Vagamente arrastre mis piernas hasta llegar a la sala y tirarme en el sofá más cercano, pero para mí grandísima suerte, ella ya se encontraba allí. Vigilándome atentamente, así como un depredador a su presa.

—¿por qué llegaste tan tarde? —preguntó una castaña oscura de piel pálida, sentada muy cómodamente en el sofá mientras se retocaba las uñas ya pintadas.

—¿acaso estabas esperando allí hasta que llegara?

—de hecho, sí —sus palabras eran muy calmadas. Cerró el esmalte de uñas que estaba utilizando y se cruzó de brazos para poder analizarme mejor— tú madre me avisó que ya sabías todo lo que tengo planeado.

—así es... —abrí el empaque que tenía entre mis manos, y lo empecé a comer sin pena alguna.

—¿Y que esperas? Vístete —después de terminar su última palabra, agarro sus cosas y salió de la sala. A simple vista es una chica manipuladora y egocéntrica, una mandamás, y claro, sus aires de confianzas se encontraban muy altas solo por ser nuestra niñera.

—Aaahg —gruñí cansadamente— la aborrezco...

—¿a quien aborreces? —mi rostro se grito en un ángulo de 90 grados al sentir la presencia de otra persona, la cual -gracias a Dios- era mi hermana.

—¡me asustaste, Jungie!

La niña de cabellera azabache, se me acercó a tal punto de estar al frente de mi. Llevaba puesta una franela blanca, con un mono color caramelo, que de igual manera estaba a juego con su chaqueta del mismo color. Pero lo que le quedaba más bonito, era un hermoso moño de lunares, que permanecía perfectamente adherido a su cabello.

—aún llevas el uniforme estudiantil ¿por qué?

—¿Quién te coloco el moño? —respondí con otra pregunta mientras acariciaba su lisa y sedosa cabellera. La infante no pudo contestar, ya que cuando sus labios se abrieron ligeramente, el sonido del timbre se escucho. Y algo más extraño que eso, el sonido de alguien abriéndole la puerta para atenderle.

Lentamente me acerqué hasta el emisor de ese sonido, acompañada de la presencia de Jungie por detrás de mí. Pues algo estúpido que tengo que confesar, mi yo interna de ese momento había olvidado por completo la existencia de mi "querida" prima Rose.

Llegue hasta la puerta principal, y efectivamente era ella, saludando amigablemente a su novio.

Perfecto, saldremos con su novio también ¿que más quieres? ¿Que te acompañemos a ver cómo se besas en su Luna de miel?

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—Mira Jungiul ¡una estrella! —gritó alegremente la menor.