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My Best Friend is a Vampire!

Narra Robin

Hola a todos, mi nombre es Robin Crakford, tengo 20 años, estudio Comunicación Social en la Universidad y lo que estoy apunto de contarles parecerá una locura pero no lo es.

Toda la vida nos han engañado diciendo que si no hay cosas que no vemos, estas no son reales, pero eso es un error. En realidad hay miles de cosas que no vemos pero eso no significa que no existan y aunque no las podamos ver no significa que no han estado allí mucho antes de ser personas hechas y derechas. De eso no me queda duda, no tras mi experiencia.

Mi vida era totalmente normal y aburrida hasta que ella apareció en esta y me hizo creer cosas que creía imposibles... Sin más preámbulo comencemos con la historia.

Todo esto tuvo lugar en el semestre pasado cuando  me tocaba ver una materia llamada Gestión Cultural, como parte de mi pensión... Materia que hasta donde yo sabía, era propia de Comunicación Social; sin embargo cuando llegué al salón me di cuenta que habían personas que no había visto en mi carrera no al menos en todos los años que llevo de esta.

Estaba hablando con mis amigos cuando la ví entrar al salón y quedé impactado. No sabía quién era, no sabía ni su nombre pero algo era cierto, su presencia se sentía por doquier y te rodeaba...

Lo primero que me fijé fue en su cabello pelirrojo como el fuego y lo siguiente que ví fue su piel blanca como la nieve, nunca había visto a una chica tan blanca que pareciera un fantasma.

Lo único que pude hacer fue callarme de inmediato y seguirla con mi mirada no se porque pero algo dentro de mí me dijo que debía conocerla. Sin embargo no era nada fácil de la misma forma que su presencia era evidente, al mismo tiempo, era una persona impenetrable pero fuera como fuese lograría cambiar eso. Eso era seguro.

Los días pasaron y comencé a averiguarme sobre quién era esta chica y una vez que lo logré, decidí acercarme a ella pero en vez de saludarla puesto que no era una chica convencional, decidí hacerlo de otra forma. Lo que nunca me imaginé es que a partir de ese momento mi vida cambiaría para siempre y ella me abriría las puertas a lo que, para mí, era tan solo una simple ficción.

Finalmente llegó el día y decidí acercarme a ella. La profesora estaba hablando de unos murales y la situación del país cuando le dije:

- Es una verdadera lástima que estemos pasando por esta situación ¿no crees?

- Disculpa ¿estás hablando conmigo?-Me dijo seca y super fría.

- Disculpa, solo quise ser amable y no veo a más nadie a tu alrededor-Le dije-

- Sí, es una lástima-Me dijo-

El día terminó, no hablamos más pero sin embargo no me rendiría.

Pasaron unas semanas y le pedí el teléfono, el face y el Instagram y ella se quedó impactada ya que no se lo esperaba. De allí en más comenzamos a crear una gran amistad. A pesar de que me costó mucho entrar en confianza con ella y que se abriera hacia mí, al final lo logré y debo admitir que es una gran amiga y chica. Sin embargo al mismo tiempo  que nos conocimos las cosas raras comenzaron a pasar.

Habían días en los cuales ella no venía a clases, días en los que había mucho sol, y los días que no había tanto sol ella llegaba vestida de negro y rojo, en su mayoría, con una chaqueta de cuero y lentes de sol. Siempre que hablábamos decía cosas que te hacía creer que pertenecía a otra época o escuchaba cosas que yo no escuchaba.