💫Just one day💫

14 2 0
                                    

Así es como le quise llamar a esta pequeña esperanza que me mantiene viva cada día, ese pequeño rayo de sol que se asoma a través de las nubes...
Tan pequeño y casi invisible pero cuando lo ves te inunda esa felicidad casi inexplicable.
Supongo que prefiero expresarlo en una historia, donde lo único real que habrá serán mis palabras.
✧・゚: *✧・゚:*✧・゚: *✧・゚:*✧・゚: *✧・゚:*✧・゚:

Ya había llegado a uno de mis destinos favoritos desde que era una niña. El sol brillaba con fuerza y el ambiente era cómodo. Aquí estoy de nuevo, en esa ciudad que nos unió, Roma.
Llegué a mi hotel, deshice mis maletas y observé el paisaje a través de mi ventana. Como una cría, bajé por las escaleras y me dirigí a la Fontana, allí lancé una moneda con el mismo deseo de siempre y me senté a escribir.
Pasaron los minutos y satisfecha con lo que escribí alcé mi cabeza mirando al frente mientras seguía sumergida en mis pensamientos. De pronto oí una voz que se me hizo muy familiar acompañada de una guitarra. Al girar levemente mi cabeza encontré a un chico a tan solo unos metros de mí. Nadie parecía escucharlo por ahora, en cambio yo decidí quitarme los auriculares para escucharlo. Lo miraba, observaba su pelo rubio ligeramente despeinado por el viento y en como el sol iluminaba su rostro. Y para mis adentros, pensé:
-¿Será él?
Admito que me sumergí por completo en su voz y en esa melodía que se me hacía tan familiar como desconocida a la vez.
Cuando terminó fue despedido con los aplausos que merecía desde que comenzó a tocar el primer acorde y
antes de marcharse ví como metía una de sus manos en su bolsillo para sacar una moneda, contemplé como la sujetaba con fuerza mientras decía algo con los ojos cerrados y la lanzó para irse de allí.
Por desgracia esa moneda no llegó a la fuente sino a mis pies, así que decidí cogerla y devolversela.
Sí, lo sé, me la podría haber quedado pero la curiosidad de saber quién era ese chico me mataba por dentro.
Comencé a andar hasta dar con él en una linda cafetería de la ciudad, recuerdo como el corazón me latía a mil por hora por los nervios que sentía en ese momento. Con mi respiración agitada decidí entrar y entonces lo ví. Estaba sentado al lado de una ventana mientras escribía algo en una libreta.
Cogí aire y me acerqué con aquella moneda en la mano, de pronto sentí como me miró de repente mientras sonreía levemente y como pude hablé.
- H-hola... E-emmm... Se te cayó esto. -le dí la moneda tímida-
- Muchas gracias. -sonrió-. Acaso... ¿Te cayó encima? -preguntó preocupado-
- Nono! Cayó justo en mis pies. -reí nerviosa-
-Menos mal. -sonrió-
- Por cierto... Cantas muy bien.
- ¿Te gustó?
- Sí, tienes talento. -sonreí-
- Eres muy amable, ¿quieres tomar algo conmigo?
- De acuerdo!
Bueno, ¿y qué decir de ese día? Sonreí todo el rato como idiota mientras miraba sus ojos verdes. Por un momento olvidé todo lo que me preocupaba estando con él. Adoraba su sonrisa, su forma de expresarse... Seguro me veo como una imbécil pero esa tarde sentí como la vida me sonreía tras tanto tiempo.
Las horas pasaron tan rápido como las Perseidas de agosto mientras íbamos dando una vuelta por la ciudad.
La luna brillaba con fuerza mientras caminábamos por el puente y entonces recordé las palabras de mi mejor amiga.
"- Nada más lo veas, lánzate. No tengas miedo y arriésgate."
Es cierto que se parecía muchísimo al chico que estuve buscando durante años pero las dudas me consumían así que lo agarré del brazo y lo detuve.
- ¿Puedo preguntarte algo?
- Claro.
- Cuando lanzaste esa moneda... ¿Qué pediste?
- Creo que eso no puedo decírtelo aún. -rió-
- Yo... Creo que lo que pedí se cumplió...
- ¿Sí? ¡Qué suerte! ¿Qué era?
- No sé si te va a parecer tonto...
- No digas eso. Me he divertido muchísimo contigo y me pareces una chica increíble.
- ¿De verdad? -sonreí mirándole a los ojos-
- Por supuesto. Así que no temas.
- Vale... Es algo difícil de creer pero llevo años en busca de un chico que amo muchísimo. Es gracioso pero ese chico se parece muchísimo a ti. Hablas como él, cantas como él, te gusta lo mismo que a él... Te ví en la Fontana y realmente creí que eras él. Cuando te hablé estuve nerviosa y hasta ahora no me digné a preguntarte lo que pediste... Siento si te parezco rara...
- No me pareces rara. -me abrazó-. Creo que es el acto más bonito que has hecho por mí.
- ¡No te creo! Tú eres...
- Sí, tonta -rió-, soy yo y al igual que tú yo también te estuve buscando. Tú también te parecías a la chica que llevo años buscando. Me alegra haberte encontrado.
En ese momento sentí como algo explotaba dentro de mí, sentía ese alivio y esa felicidad mezclados dentro de mí junto a más emociones.
Sentía como mis lágrimas bajaban por mi rostro y como mis manos temblaban ligeramente.
Una vez más me acerqué con seguridad y lo abracé con fuerza como si él fuese lo más valioso de este mundo.

 And I love you 3000

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


... And I love you 3000.☀🌙.

‧͙⁺˚*・༓☾𝚅𝚊𝚕𝚔𝚢𝚛𝚒𝚎☽༓・*˚⁺‧͙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora