IN MY TWISTED GAMES • ÉLITE

Capítulo 4.

— ¿Tenías algún motivo para enfrentarte a  Marina?

— No

— Pero, ¿ustedes no hacían parte de un
triángulo amoroso?

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Guzmán hablaba con Nadia, los analizaba y no podía creer hasta dónde había llegado, nunca habríamos imaginado que el se enamoraría de alguien así.

— ¿Celosa? - sentí una voz que me hizo sobresaltar, al voltear ahí estaba el chico de los rizos -

— Ander ¿Que podría ponerme celosa de Nadia? - pregunté con una sonrisa -

— Guzmán - respondió con simpleza -

— Para nada, sabes que si quisiera lo tendría conmigo, pero no puedo traicionar así a Lu - respondí - si fuera por miss Palestina ya le hubiera terminado su cuento de hadas, no puedo imaginar como se debe sentir al tener a un chico guapo y de mente abierta cuando muy seguramente lo único que normalmente atrae son tipos machistas y de pensamiento retrogrado - respondí para dejar a Ander ahí parado -

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— Martin y ustedes dos, a mi oficina - ordenó Azucena señalando a Marina y a Lu -

Luego de que los mencionados se retiraron ingresamos nuevamente a clases. Samuel acusaba a Martín de embarazar a Marina, no me sorprendería, nada en Las Encinas podía ser ordinario.

— Ay honey, ya cálmate - dije acariciando el hombro de Guzmán -

— Todo el maldito curso sabe que Marina está embarazada - respondió el con su particular ira, su vena de el cuello parecía querer explotar -

— ¿y que? - respondí sin pensarlo - aquí nadie es un santo, nadie puede juzgarla, y quien lo haga sería muy cara dura - continué - Guzmán, ese bebé estará bien, ustedes tienen una buena vida y el dinero para mantener a toda España, así que no hay nada por lo que preocuparse, ahora solo importa la salud de Marina y ese saquito de células y tejidos que hay en su vientre

— Ese bebé arruinará su vida - respondió el dejándome fría, ¿se estaba escuchando? -

— No digas cosas de las que puedas arrepentirte, no querrás recordar esas palabras cuando tengas a tu sobrino en tus brazos, aparte, aquí todos tenemos la vida resuelta, así que para con las estupideces - dije con cierto enojo -

— El padre de ese bebé es un barriobajero que apenas puede manternerse a si mismos - continuó el -

— Nano sacará a ese niño adelante de la mano de Marina, se esforzarán y lo lograrán - tomé su mano - tu hermana es muy fuerte Guzmán, saldrá de esto y mucho más, ahora deja de ser cruel y piensa en que seguramente amaras a ese niño apenas lo veas y todo este drama pase - concluí para luego soltar su mano y salir de los vestidores -

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— ¿es seguro? - preguntó Marina -

— Si, muchas chicas musulmanas van ahí... Piénsalo - finalizó Nadia -

Rápidamente entré a el baño como si nada, Nadia me miró raro pero siguió su camino.

— ¿Ahora que locura piensas hacer? - ataqué de repente -

— Dani, ahora n... - interrumpí -

— Puedes hacer lo que quieras, pero solo quiero que piensen en todos los recuerdos lindos que podrías crear con tu bebé, podrías arruinar un hermoso futuro haciendo eso, quiero que de verdad lo pienses porque sé que puede dejarte secuelas - tomé su mano - es solo un consejo, estaré aquí para ti no importa que decidas - dije con una sonrisa -