bro ; sope

pánico

Cada día que Hoseok y Yoongi vivían juntos era un día más para conocerse entre ellos, sus rutinas, manías y formas de hacer las cosas; pero un día como ese, donde lo inusual ocurrió Hoseok no sabia que hacer.

Yoongi había despertado como todos los días suele hacerlo, odiando los lunes por la mañana, hizo su caminata rutinaria por la casa que consistía de su pieza al baño, del baño a la cocina y de la cocina con una taza de café a su pieza nuevamente; Hoseok no necesitaba estar despierto a la misma hora que el mayor porque sus clases eran en la tarde, pero le gustaba como el sol se veía bañando de luz su humilde apartamento compartido; por lo que Hoseok estuvo despierto cuando Namjoon, un amigo de Yoongi, lo llamó alarmado porque no sabia donde se encontraba Yoongi.

El moreno se escuchaba algo preocupado desde el otro lado del teléfono, ambos sabían que no era común que Yoongi no asistiese a clases o no diera señales de vida por largas horas; Namjoon ya había visto algo así por parte del rubio pero no se le ocurrió mencionárselo a Hoseok porque ¿Qué tan común era que Yoongi sufriera un ataque de pánico? Era algo muy extraño considerando que Yoongi no ha tenido una en ya dos años y esa vez supo controlarlo solo a pesar de que gente se daba cuenta de su estado. Como ninguno de los dos pensó en la posible opción de ello, esperaban a que el otro tuviese noticias sobre Yoongi y su paradero.

...

Hoseok no podía evitar sentirse nervioso, comenzaba a hacerse tarde y Yoongi aun no aparecía, cuando lo llamaba el timbre sonaba pero terminaba por enviarlo al buzón de voz, el moreno le dejaba mensajes cada vez más tristes y rotos, siendo su ultimo un simple "Por favor, vuelve a casa." casi al borde del llanto. Hoseok no lo aguantó más y salió de la casa a buscarlo casi a ciegas y sin razonamiento alguno, Seul era una ciudad muy grande para buscar a una sola persona pero a Hoseok no le importó en lo absoluto; su preocupación y cariño por el rubio eran mucho más grandes que las dimensiones de la capital de corea.

Y con esa misma disposición buscó a su amigo por todos los lugares que suele frecuentar, buscó por su cafetería favorita, en tiendas de música, en uno que otro parque al que va a escribir, incluso tomó un bus para ir hasta el río Han al que gusta usar de inspiración  pero no lo encontraba por ninguna parte, estaba oscuro y frío en la gran ciudad, era hora de volver aun así no había encontrado al mayor; mientras regresaba a casa insistió en llamarlo hasta que gastó la poca batería de su celular. Cada paso más cerca del apartamento era una lágrima que luchaba por no salir de los ojos de Hoseok ¿Y si había hecho algo mal ese día por la mañana? ¿Y si Yoongi no estaba bien y Hoseok no lo notó?

¿Y si él lo dejó...

--¡Yoongi!