Un Juego Perverso.

Gane

-No, no, no, no, no, no- El chico de cabello castaño se quejaba en el sillón viendo la pantalla de la tele mientras sostenía el control del videojuego.

-Si, si, si, si, si, gane, gane, gane, gane -Y su novio se la pasaba brincando por todo el departamento burlandose del mas joven.

-Hiciste trampa -Peter estaba furioso no quería hacer la apuesta y ahora había perdido.

-Por favor babyboy yo a ti jamas te haria trampa -Ofendido por el comentario, Wede se sentó al lado de Peter en el sillón.

-Lo dice el mercenario -Se cruzo de brazos y volteo para evitar ver la cara de Wede.

-Auch -Se puso una mano en el corazón demostrando dolor -Pero este mercenario haria cualquier cosa por ti y jamas, jamas, jamas de los jamaces te haria trampa y si ese fuera el caso ¿No crees que lo hubiera echo antes? envés de estar pasando casi dos meses intentando ganarte.

Wede tenia razón desde que le comentó a Peter su idea e hicieron la apuesta este había estado perdiendo haciendo que su BabyBoy se salvara de lo que tenía pensado.

-No lo voy hacer.

-Oye siempre cumplimos con las apuestas a demás te va a gustar y lo sabes -Wede se acercó a su novio pero este retrocedió un poco cuando intento besarlo, hizo la cabeza para arriba dejando expuesto su cuello y aprovechó para que sintiera su aliento poniendo la piel de gallina al menor -Vamos BabyBoy.

-Te odio -Dijo con una sonrisa en la cara ya que no podía odiarlo.

Resignado se dejo besar, poco a poco los dos se acomodaron en el sillón. Pero antes de seguir Wede se paro y fue a un cajón dejando a Peter con duda, se acomodo mejor para ver que hacia.

Saco una caja mediana blanca y regreso con Peter.

-Tienes que cumplir tu apuesta amor -Mientras abría la caja Peter lo miro con enojo haciendo un puchero. Cuando estuvo apunto de sacar el contenido Peter lo agarró de la mano deteniéndolo, Wede volteo a verlo, el menor aprovecho para robarle un beso.

-Lo hare, pero después, hace mucho que no estamos juntos y quiero aprovechar este tiempo contigo.

Peter tenia razón hace tiempo que no estaban juntos, ya fuera por el trabajo de Wede o la escuela de Peter o incluso por el pequeño trabajo que se consiguió de fotógrafo, así que dejó la caja de lado y siguieron con los besos, caricias, disfrutaron un rato de su sabor y su aroma pero Wede se detuvo.

-Se que si lo hacemos no vas a querer cumplir la apuesta.

-Creí que te había convencido -Sonrió ya que creyó que se había salvado -Esta bien ya lo voy hacer pero no miento, si quiero estar contigo.

Wede le robo un beso y prosiguió para sacar el contenido de la caja.

-También quiero estar contigo pero te prometo que después de esto no iré a trabajar por un mes y me la pasare contigo.

Peter se puso rojo al ver el juguete sexual y el lubricante que sacó Wede de la caja, el menor se asomó a ver que mas había adentro y vio muchos juguetes mas al igual que objetos sadomasoquistas.

-¿Cuanto gastaste en esto?

-Cuando se trata de ti el precio no importa BabyBoy.

Peter resignado sin decir otra cosa se acostó en el sillón a merced del mayor. Le bajo los pantalones junto con la ropa interior dejando ver sus partes íntimas el menor se avergonzó tapándose el rostro con sus brazos, Wede aprovecho para abrirle las piernas dejando caer el lubricante, el pequeño de cabello castaño se sobre salto un poco al sentir lo frío recorrer su entrada y sin previo aviso introdujo el juguete asiendo que Peter se quejara antes de poder reclamar su celular sonó y lo sacó para contestar mientras Wede seguía con lo suyo.