Un Juego Perverso.

¿Que paso con Tony?

Después de la fiesta de Peter, Steve tenia que tratar con su marido ebrio, si no fuera por el suero del súper soldado estaría igual o peor que el.

-Vamos Tony, te llevaré a la habitación.- Cargo a su amado en brazos cual princesa. Tony por su parte se aferro del fuerte cuello del Cap.

Al llegar a la habitación Steve le quito la ropa y le iba a poner la pijama hasta que las manos de Tony lo detuvieron.

-Por favor no me dejes.- Hablo sutil.

-No digas tonterías Tony.- Intento proseguir pero Stark se le abalanzó haciendo que casi se cayeran.

-¿Me amas a pesar de no ser una mujer?.- Preguntó casi al borde de las lágrimas.

-Claro que te amo, me case contigo por amor y desde que estamos juntos, no hay día que no sea feliz, gracias a nuestro amor tenemos 5 grandiosos hijos.- Habló tranquilo, esperando que con eso los nervios de su amado se tranquilizaran.

-Pero Peggy era el amor de tu vida.- Tony no pudo evitar soltar algunas lágrimas, recordaba como su padre le contaba de lo hermosa que era la agente Cárter y como hacia una increíble pareja con Rogers y eso le dolía.

-Si, lo fue pero eso cambio desde que te conocí.- Abrazo a Tony con cariño y con su mano tomo la cara de su esposo e hizo que lo mirara.

-¿Y las fotos de Sharon?.

La tecnología sin duda era muy buena, pero también era mala y mas cuando tienes un loco, celoso, posesivo, paranoico, dramático, (En pocas palabras Tóxico), marido, aunque lo que paso no fue para que se diera un mal entendido, Sharon le envió fotos desnuda a Steve y Tony las vio cuando el Cap le pidió ayuda con su celular.

-No debió hacer eso y se lo dije, se que te sientes mal por eso pero no cambiaría a mi hermoso, sensual, Play boy, filántropo...

-No olvides... Hip... Multimillonario.

Steve soltó una pequeña risa.

-Multimillonario, esposo y padre de mis hijos, por una mujer que no vale ni siquiera una octava parte de lo que tu eres.

-¿Hablas de dinero? Por que mi seguro de vida es muy alto.

-Habló de esto.- Beso con ternura los labios ajenos, con calma empezó a separarse de su marido.

Tony al sentir la creciente distancia tomo la nuca de su Capipaleta y lo acerco de nuevo. El beso se hizo mas apasionado, en calor corporal de ambos aumentaba y sus cuerpos empezaban a reaccionar.

-Tony... Si sigues así no podre parar.- Su voz agitada hizo que Iron Man no quisiera otra cosa que no fuera esa voz en pleno coito.

-Hazme el amor.- Volvió a atacar los labios del rubio.

Desde ese incidente con las fotos no habían tenido sexo, ni siquiera se habían besado, dormían separados pero sus hijos no la sabían, solo sabían que sus padres tenían una pequeña riña.

Volver a sentir el tacto, el calor, la piel del otro después de casi 3 meses no fue mas que recordarles como es que sus cuerpos encajan perfectamente.

Sus lenguas bailaban y cada uno sentía la textura áspera de la otra, sus alientos se combinaban, sus salivas se mezclaban y sus bocas querían recuperar cada segundo que no habían estado juntas. El como se besaban era tan desesperado que solo hacia notar lo mucho que sus cuerpos se extrañaban, lo mucho que se necesitaban, lo mucho que querían reconciliarse.

La ropa de Steve desapareció en alguna parte de la habitación, al igual que el pudor o la cordura.

-Tony, no sabes lo mucho que te extrañaba, quería tocarte, hacerte mío.- Terminaron en la cama con Steve arriba de su pareja.