Carson:
Hoy sin duda fue un día muy pesado y todo por la pu** de Valentine, mi día iba a ser tan perfecto, pero como siempre algo tenía que pasar vaya suerte la mía.
¿Es que acaso una chica no puede tener un simple primer día de paz? Pues al parecer no aparte esta lo de Luzbel, cuando lo vi con ella algo dentro de mí se rompió y me decepcioné muchísimo pero no iba a dejar que ellos vieran eso por supuesto que no.
Una vez acabada las clases volé a mi casa no quería hablar con nadie porque si no reventaría de la furia, pero parece que mis peticiones no fueron escuchadas porque me encontré con quien menos me apetecía ver en estos momentos.
· Carson ¿podemos hablar?
· ¿De qué quieres hablar Luzbel? – dije tratando de controlarme
· Lo que paso hace rato no es...
· Mira Luzbel lo que paso hace rato no fue nada ¿ok? No somos nada y no tienes por qué darme explicaciones así que con permiso ADIÓS – dije interrumpiéndolo, me voltee dispuesta a irme, pero el me agarro del brazo para explicarme lo que paso.
· Pero...
· Pero nada Luzbel ADIÓS – dije soltándome de su agarre y dándome la vuelta esta vez para irme definitivamente, pero no di ni dos pasos cuando sentí que me agarro de la cintura, me voltio y paso lo que no creí que iba a pasar, me BESÓ.
Me beso con una pasión retenida como si hubiera estado esperando tanto por esto. Se sentía como en las nubes, sus besos eran como una droga tan adictiva que puede matarte; me beso por un tiempo, pero yo aún seguía en shock no podía reaccionar solo seguía el movimiento de sus labios hasta que mordió mi labio inferior para poder introducir su lengua arrancándome un gemido y fue ahí cuando reaccione de que esto no estaba bien.
· No...no Luzbel esto no está bien – dije separándome de él
· Carson me gustas por favor no quiero que pienses mal de mí – dijo apenado
· No Luzbel lo siento, pero esto – dije señalándonos - no puede pasar
· Espera Carson – dijo intentando detenerme
Me fui de ahí corriendo no podía, no quería salir lastimada, no otra vez y mucho menos por alguien que recién conocí hoy. Lo sentí perseguirme, pero con mis poderes oculté mi rastro para que no me siguiera, no quería verlo no ahora.
Llegué a mi casa y apenas entre fui a encerrarme a mi habitación para alejarme un rato de la sociedad de todo mas bien. Habían pasado ya tres horas y eran cerca de las siete de la noche aparte no había almorzado y sentía mucha hambre.
Pero primero decidí tomarme una ducha y relajarme por lo cual busqué mi pijama que consistía en unos shorts y un top todo de color rosado.
Después de unos 40 minutos decido salir de la ducha para poder cenar. Me cambio y bajo para prepararme algo ya que como lo dije antes muero de hambre.
Media hora después:
Me he preparado unos sándwiches y un jugo de naranja, cuando estoy a punto de empezar a comer suena el timbre de la casa y maldigo para mis adentros, pero como siguen insistiendo no me queda de otra que levantarme e ir a abrir.
Cuando abro la puerta y por supuesto no mire por la ventanilla antes de abrir gran mala costumbre mía por cierto y para mala suerte me doy cuenta que es...
Luzbel:
No me puedo creer lo que acabo de hacer...la besé...dios sus labios son tan exquisitos son como un manjar de los dioses...pero qué mierda estoy diciendo se supone que debo ceñirme al plan y no enamorarme de ella.
Dios porque tuvieron que mandarme a matarla y ¿por qué no a otro?... Claro debí suponerlo ellos ya sabían que era mi alma gemela y de alguna otra manera buscaban que ponerme a prueba jajajaj hay padre que iluso eres no te va a funcionar tu jueguito con qué guerra querías pues muy bien guerra tendrás padre.
Después de lo que paso con Carson debe estar odiándome, aunque debo admitir que me gusto...no, me encanto ese beso que nos dimos. Dios tengo hablar con ella y solucionar todo esto por lo menos ya sé dónde vive ella creyó que con ocultar su rastro podría confundirme y huir de mí... pues no.
Investigue un poco más sobre su forma de vivir; sé que vive sola así que eso me favorece un montón pues lo único que quiero hacer es hablar con ella sin interrupciones o al menos eso espero.
Son cerca de las nueve de la noche y sé que es muy tarde para verla, pero que se puede hacer. Llego al lugar y he de decir que es un lugar muy bonito, sin esperar más decido tocar el timbre ya que por lo visto aún hay movimiento por su casa.
Después de unos cinco minutos se abre la puerta y lo que veo me deja embobado es ella esta tan preciosa con ese pijama que me deja mucho a la imaginación.
· ¿Qué haces aquí Luzbel? – dice medio molesta y sorprendida por mi llegada
· Quiero hablar contigo Carson
· ¿Y sobre qué según tú?
· Sobre lo que paso hoy
· Pues no te preocupes por eso ya paso y no se volverá a repetir
· Carson, tú no lo entiendes necesito volver a...
· A que Luzbel – guardo silencio por unos minutos – sabes si no dirás nada has el favor de largarte ahora mismo – dice cerrando la puerta, pero soy mucho más rápido que ella así que detengo la puerta, la cierro cuando ya estoy dentro y a ella la estampo contra la pared.
· Necesito volver a hacer esto Carson – digo besándola con pasión, ella al principio se resiste, pero luego me empieza a besar con la misma intensidad.
Luego de unos minutos nos separamos por la falta de aire y veo que tiene los ojos cerrados, se ve tan hermosa así que joder...podría capturar este momento por toda la eternidad. Cuando abre sus ojos me mira expectante y muy confundida para luego ponerse de manera neutra y decir aun con su vista clavada en mis ojos .
· Luzbel...apenas me conoces hace horas y ya estás diciendo que te gusto y luego me besas o como sea que haya sido el orden, sinceramente no sé qué te pasa – dice confundida.
· Si tú supieras lo que yo sé me comprenderías y sentirías lo que yo siento o bueno sé que, aunque no lo quieras admitir sientes lo mismo que yo.
· ¿Quién eres exactamente?
· Yo soy aquel que fue por mucho tiempo aclamado y envidiado en el cielo por ser el favorito de Dios – digo lo que hace que se sorprenda mucho a tal punto que parece que los ojos se le saldrán de las cuencas - ¿ya lo adivinaste? O... ¿quieres otra pista más?
· ¿Por qué yo? – dice asustada
· ¿Aún no lo has adivinado Carson?
· ¿Adivinar?... ¿Qué? – dice confundida
· ¿Enserio aun no lo descubres?
· No...
· Eres mi alma gemela Carson – le digo – mi otra mitad
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Almas Gemelas - EN HIATUS
FantasíaUn corazón de hielo. Una voluntad de acero y un alma inquebrantable. Te presento a una hechicera. Te presento a Carson Cash. Hermosa. Letal. Fría y calculadora. Destinada a la grandeza. ... Carson siempre supo que su poder la pondría en un g...